Capítulo VI

3.9K 318 32
                                    

Llegue al hospital en cuanto puse un pie dentro, me sentí extraño como si no fuera el mismo lugar que visitaba todos los días para leerles a los niños o el que visitaba para platicar con Samu, pase por la sala de espera y estaba totalmente vacía ni una sola alma, ninguna enfermera ningún familiar, nada, seguí caminando y decidí ir directo con Ali para preguntar qué es lo que ocurría, subí las escaleras y ahí estaba sentada, ordenando unos papeles en su escritorio.

-Hola Ali, ¿Qué es lo que ocurre, porque no hay nadie de personal ni familiares esperando? - Le pregunte pero ella solo observaba los papeles como si yo no estuviera a su lado.

- ¿Ali? - Le hable pero ella seguía en la misma posición, mirando y acomodando papeles.

Decidí ir directo a la habitación de Samu, camine unos cuantos pasillo cuando di la vuelta por el pasillo donde se encuentra la habitación de Samu vi a un hombre saliendo de su habitación, solo miraba su espalda no era ningún doctor ni enfermera o enfermero que yo hubiese visto antes aquí, decidí caminar hacia el para preguntar qué hacía en la habitación de Samu, camine un poco rápido para que no se perdiera de vista cuando ya estaba muy cerca de él, toque su espalda cerca del hombro...

- ¿Samu?, ¿pero como es posible que estés despierto? - Voltio ante mi toque, y no me lo podía creer es Samu, ¿Cómo es posible? Si hacía solo un día que lo había visto y los doctores habían dicho que tardaría en recuperarse, estoy que flipo...

- ¡Valla! ¡Valla!, a ti es a quien busco, creí que hoy no vendrías a verme - Dijo con una sonrisa un poco perversa o tal vez era mi imaginación era la primera vez que lo veo de pie, hablando y sonriendo.

- ¡Oh Samu por fin despiertas! - Dije lanzándome a él para darle un efusivo abrazo, no sé por qué lo hice pero ya lo había hecho.

-Eh tranquilo - Dijo separándose de mí - Yo solo te buscaba para decirte gracias-

- ¿Gracias?- Dije confundido.

-Sí, gracias-

-No, no hay nada que agradecer, Samu no sabes lo feliz que me hace que estés ya recuperado - Dije sonriendo sintiendo ya un poco entumecidas mis mejillas

- ¿Recuperado? - En ese momento vi a Samu desplomarse.

Cuando vi como Samu caía, rápido me dispuse a ayudarlo pero en un abrir y cerrar de ojos ya no me encontraba con él, me encontraba fuera del hospital camine hacia la entrada abrí la puerta e intente entrar pero era como inercia o una pared invisible que me impedía entrar al hospital esta ves si había personas en la sala, salían, entraban, pasaban doctores, enfermeras y yo no podía atravesar esa pared invisible, vi a Ali hablando con unas de las tantas personas que se encuentra en la sala le hable, no esta tan lejos de la entrada, pero ella solo seguía con lo suyo y al parecer nunca percibió mi presencia, camine hacia la librería con Ruth, al momento de entrar vi desde una ventana a una pareja viendo la estantería de libros, camine a la entrada y cuando puse un pie dentro de esta, aparecí dentro el hospital exactamente en la habitación de Samu dentro de esta había un hombre de pie a lado del cuerpo de Samu, lo más extraño era que el hombre del que hablo era Samu, pero que mierda estaba pasando esto no era real... intente decir unas palabras pero era como si no tuviese boca ninguna palabra salía de esta, decidí quedarme dentro de esta habitación ya que creo que si vuelvo a cruzar una puerta más, tal vez aparezca al otro lado del mundo, camine a la silla que siempre se encuentra en la misma posición y lugar, solo me senté y como si la silla tuviese algo para sedarte o algo parecido con solo tocarla me quede dormido...

Desperté pero esta vez ya no estaba en la habitación de Samu, me encontraba en la sala de espera esta vez todo parecía normal personas esperando, doctores saliendo y entrando al igual que con las enfermeras camine en busca de Ali, justo cuando di unos cuantos paso Ali llego a mí -Eh guille, ¿Ya te dieron la noticia? - De que me habla esta mujer- ¿Noticia? - respondí a su extraña pregunta

A TU LADO { Wigetta}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora