Capítulo XVIII

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En mi mente repasaba las palabras de Samuel pero no podía procesarlas.

- ¡¿QUÉ?! - Fue lo único que mi garganta pudo pronunciar

-Una casita para ti y para mí- Una gran sonrisa se asomó en su rostro- ¿Acaso no te gusta? -

- ¡Claro que sí! Es hermosa Pero... pero no puedo aceptar-

- ¿Y por qué no? Te explico cariño mío, es un regalo y no puedes rechazarlo-Su sonrisa se curveó hacia un lado-Ahí empezaremos una nueva etapa... en los Ángeles... juntos, vamos chiqui-

-Samuel...-

-"Gracias cariño, me encanta mi regalo" -Se acercó a mí y me plantó un beso en los labios- Sabía que te gustaría-Una media sonrisa se asomó en sus labios

-Es que es tonto-Atiné a decir

- Tú tonto-Me tomó de las manos-Y en tres días nos iremos-

-Dirás "En tres días me voy" -

-No, recuerdas que en el hospital te dije que tu irías conmigo a donde fuera...Pues mira que casualidad porque los dos nos iremos a L.A. cariño, ambos queremos irnos para allá, tú siempre has soñado con vivir allí, yo estaría más cerca de mi familia y Guille, tu eres parte de mi familia- Me abalancé sobre él en un abrazo

-Te quiero mucho Samuel- Susurré, sentí como una sonrisa se le formó en el rostro

-Yo igual te quiero-Dijo estando aun en el abrazo, se separó y pasó a darme un beso, sus labios comenzaron a moverse, pensé que sería corto, pero fue un beso más profundo.

Salimos de su oficina y nos dirigimos al jardín -Dime que es una broma lo de los tres días-Hice una pequeña pausa- Es que tengo que decírselo a Mia, los niños, ¡¡A mi madre!!... - Salimos al jardín, nos dirigimos a las bancas donde me había pedido ser su novio, una sonrisa se formó en mi rostro al recordar ese suceso

-¡¡Vamos!! Sabía que no me dejarías irme solo a L.A... ay mi Guille como me cuida-Soltó una carcajada por sus palabras, es que este hombre no piensa antes de hablar... - Y sí, es broma cariño, recuerda que en dos semanas viene Sebastián- Con su dedo índice me toco la punta de la nariz

-Mira que aún me puedo arrepentir- La expresión de Samuel cambió radicalmente, eso me provocó una carcajada

- ¡Jamás! Tú te iras conmigo quieras o no-

-¡Vaya y ahora a la fuerza me quieres llevar!... No conocía ese lado tuyo, mi querido Samuel-

-Ya sabes, todos los días se aprende algo nuevo- Alzó una ceja y me mostró una media sonrisa

-...-

-Bueno mi pequeño Guille, ¿quieres hacer algo en especial el día de hoy? -

-Podríamos salir- No tengo idea de a dónde, pero sería bueno salir a pasear.

-Uhh si, podríamos ir al cine-

-Samuel sabes que siempre me quedo dormido- Recuerdos se vinieron a mi mente, hace unos meses fuimos y siquiera vi los cortos que dan al inicio de otras películas, es que no sé qué es lo que me pasa, cuando desperté estaban los créditos... gracias a eso, Samuel se burló una semana entera de mi

-Cierto-Una pequeña mueca se mostró en sus labios - Entonces... podríamos visitar a Ruth-

-Me parece estupendo- Se levantó de la banca - Vamos dentro- Me levanté, el posicionó su brazo alrededor de mi cintura y me acercó a sus labios depositando un beso

-Vamos guapo-

Después de haber tenido una charla nos adentramos en la casa, fui a la habitación por mi móvil. Tome dirección hacia la cocina, supuse que sería donde estaría Samuel pero ya me estaba esperando en la sala. Salimos de casa, el auto estaba aparcado enfrente de la puerta principal; caminamos hacia él, Samuel me abrió la puerta del copiloto para adentrarme en este, cerró la puerta para después rodear el carro, mientras, me puse el cinturón y Samuel subió al auto. De camino a la librería me puse a pensar en lo rápido que había pasado el tiempo, ya hacía casi un año desde que conocí a Samuel y han pasado muchas cosas, muy rápido. Llegamos a la librería, bajamos del coche, entramos y nos encontramos a Ruth acomodando unos libros

A TU LADO { Wigetta}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora