- ¿Qué?- Dijo Douma mirando desconcertado al pelirrosa que comenzaba a sollozar.- Oye, ya tranquilízate, ahora explícame. ¿Cómo que estás embarazado? ¿Es eso si quiera posible?- Preguntaba al tiempo que Akaza hiperventilaba y su respiración enloquecía.- Tranquilo, respira hondo pilar o sino te mueres por respirar así.- Exclamó y su preocupación disminuyo al ver que el pelirrosa se recomponía.- Bien, habla. ¿Estás embarazado?
- Así es, lo estoy.- Habló mientras pasaba el dorso de su mano por sus ojos limpiando sus lágrimas. Por otro lado estaba Douma mirándolo con asombro, Akaza ante la mirada expectante llena de confusión continuó:- Yo tampoco creía que eso fuera posible, pero en mi familia hay una excepción.
- ¿Excepción? ¿Qué clase de excepción es la que me estas hablando?- Exclamó mirando no muy convencido al pilar.
Akaza resopla intentando no llorar a mares en ese instante. Estaba demasiado vulnerable y sensible, para él tampoco fue fácil la noticia y aún se encuentra mal por la misma.- Verás, mi familia hace siglos fue bendecida por la diosa de la vida y la fertilidad; Amaterasu. Mi familia recibió la capacidad de que tanto hombres como mujeres sean fértiles y puedan concebir hijos, por lo tanto si alguno de la familia Soyama llegase a tener contacto sexual con un hombre puede quedar en embarazo.- Explicó el joven Akaza mientras lograba retomar el control de sus emociones y trataba de permanecer sereno.
- Entonces, ¿estás embarazado de mí?- Dijo aún digiriendo lo que Akaza le había confesado, no le era fácil aceptar que tendría un hijo. Ahora sí que había metido la pata, no solo con el pelirrosa sino también con su amo Muzan. ¿Qué le hará a Akaza y al futuro hijo que espera? Douma no se preocupa tanto por el bienestar propio, sabe muy bien que su amo no lo matará, no en ese momento porque Douma es una pieza importante y mientras estén los cazadores de demonios necesitará de su ayuda para derrotarlos, sin embargo en el caso de Akaza es diferente...
- Yo tampoco sabía de todo esto, fue Kyojuro quien me contó todo hace dos meses. No estaba seguro de que estuviera embarazado, pero luego de presentar síntomas idénticos a la de una mujer en período de embarazo supe que en efecto estoy embarazado.- Akaza apretó los puños.- ¿Sabes que significa eso?- Una vena se asoma por la frente del pilar de la brújula.- ¡Tendré que dejar mi puesto como pilar! Y todo por tu maldita culpa. ¡Yo no pedí que me violarás! ¡Yo no pedí encontrarme contigo! ¡Yo nunca me quise entregar a ti!- Gritó furioso aquel pelirrosa levantándose del regazo de Douma.- ¡ARRUINASTE MI VIDA, MALDITO DEMONIO!- Exclamó en un fuerte gritó mientras las lágrimas se deslizaban por sus mejillas.- ¡¿POR QUÉ LO HICISTE?! ¡¿POR QUÉ NO ME MATASTE EN VEZ DE VIOLARME?!... ¡¿POR QUÉ?!... ¿Por qué...?- Y antes de poder seguir gritando sintió como su cuerpo perdía fuerza y cayó al suelo al tiempo que lloraba, gruesas lágrimas de impotencia, enojo, asco y puro odio salían de los ojos ámbar del pelirrosa.
- Akaza, yo...- Las palabras no salían de la boca de Douma y de pronto sintió una punzada en su pecho y su corazón rompiéndose, se sentía culpable por primera vez en toda su existencia.
ESTÁS LEYENDO
¡Maldito Demonio!
Romance🎴Akaza, pilar de la brújula, un hombre que lleva consigo un gran odio y rencor, en especial a los demonios, pero uno de estos seres se ganará un odio en particular, Douma, luna creciente dos, ellos se envolverán en una serie de conflictos, situacio...