En blanco [Shadamy] (EN ACTUALIZACIÓN)

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Sonic había perdido la noción del tiempo. No sabía la razón, ya que había muchas posibilidades que explicaban este suceso poco usual. No recordaban la última vez que se había tomado un descanso e, incluso para él, eso parecía una tontería, ya que al ser la cosa más rápida del mundo no estaba en su itinerario descansar, pero él no era un robot. Sabía que debía parar, tomar un respiro y replantearse que estaba haciendo, sin embargo, no podía hacerlo. Sentía una energía que lo mantenía alerta, andando por un tiempo tan extenso que él lo había olvidado. Estaba sobreactuando, de eso no había duda, pero, así como su energía estaba siendo drenada, su orientación y lógica les estaba ocurriendo lo mismo. No comprendía la mitad de las cosas que pasaban por su pensamiento o lo que podía ver, pero él seguía andando. Como siempre lo hacía. No importaba que eso simbolizara dolor o angustia.

Entonces, cuando alcanzó a ver como sus amigos se encontraban reunidos, debajo de la sombra de un enorme árbol, el erizo de ojos verdes esmeraldas se detuvo, abruptamente. Momento donde una sonrisa genuina se pintó en su rostro, aunque esta no duro demasiado porque, a duras penas pudo avanzar un paso, una voz muy conocida lo hizo detenerse.

—¿Qué haces aquí, erizo? —preguntó un erizo azabache con mechas rojo sangre, quien se encontraba recargado en árbol más, alejado, como siempre, del resto—, ¿ya acabaste de asechar a, quien sea que persigues, o te volverás a largar, una vez más, para hacerte el importante?

—Wow, cuanta agresividad, Shadow... —respondió, desconcertado por la reacción del mencionado— pensé que habíamos dejado este tema atrás, desde hace meses —Giró su cuerpo hacia él, mostrando su habitual sonrisa y actitud relajada—, creí que ya no hacía falta más discusiones como está.

—Tú y yo sabemos que eso no es verdad, no intentes sonar sorprendido —Lo cortó, tajante, solo como él sabía serlo—, nada está bien, mucho menos con los que dices que son tus amigos, a esos que siempre terminas complicándoles las vidas por tus tropiezos y malas decisiones —Comenzó a acercarse a él, serio—. ¿Has regresado para hacer lo que mejor sabes hacer, huir como un completo cobarde, o por fin dejaras de hacerlos miserables y te quedarás quieto, hasta que generes un nuevo problema para todos?

—Espera, no entiendo —confesó, varios segundos después—, ¿cómo que los hago miserables? —cuestionó, impactado con esas declaraciones, crédulo, genuinamente—. No quiero ser yo quien te lo diga, pero te puedo asegurar que te acabas de equivocar con tu descripción —dijo, regresando a su habitual tono cargado de seguridad y calma, mecanismo de defensa al que siempre recurría cuando algo no salía como lo planeado—, yo no los hago miserables —aseguró con mayor fuerza, sosteniéndole la mirada al azabache—. ¿De dónde sacas eso, Shadow?

—De las cosas que he podido observar, durante años —respondió, sin inmutarse, detalle que hizo emerger la inquietud en el cobalto—. No eres tan buen amigo, como piensas y alardeas todo el tiempo, Sonic —Una sonrisa arrogante lo atacó, haciendo que el mencionado frunciera su entrecejo, ligeramente—, incluso diría que eres bastante maquiavélico.

—¿Qué? —En automático, su cuerpo fue hacia atrás, afectado por esas proclamaciones, está vez, sin poder disimularlo—, yo no soy maquiavélico —atino a decir, desorientado—, he peleado con personas que si lo son y te puedo asegurar que yo no soy como todos ellos.

—Si es lo que tú quieres creer, está bien —Se encogió en hombros, desinteresado—, después de todo, jamás escuchas a nadie, así que da igual.

—Ok, esto es suficiente —indicó, después de haber suspirado con frustración—, no entiendo muy bien porque pareces tan molesto y, mucho menos, porque es conmigo, pero, sea lo que sea, te estas desquitando con la persona equivocada.