20

323 53 74
                                    

Sonic perdió la noción del tiempo. No fue hasta que el joven inventor se coló dentro de la sala, que algo cambio en el ambiente. En primer momento, Tails no lo observó, ya que su cansancio era palpable. Después de todo, acababa de darle los últimos retoques a su nueva obra maestra, la cual, peligrosamente, se encontraba entre sus manos. Estaba tan concentrado, admirando su trabajo de tantas horas, que, por un descuido, estuvo a punto de tropezarse y hacerlo caer. Rápidamente, se alteró, aunque, de manera automática, sus colas accionaron y lo hicieron levitar por unos pequeños instantes. No se quedó tranquilo hasta que sus pies quedaron anclados al piso, de nuevo. Fue entonces que Tails puso mayor atención a su entorno. Estuvo a punto de caerse por el pie de Sonic. Confuso y de manera instantánea, sus ojos azules claros se encontraron con la mirada perdida de su mejor amigo, quien, ni siquiera por el reciente acontecimiento lo había volteado a verlo, alertando más al menor enseguida.

—¿Sonic? —Fue hasta ese momento que el mencionado se enfocó en él—, ¿sucede algo?

—Nada, no te preocupes —contestó con un tono bajo—. ¿Necesitas ayuda con algo, hermanito?

—No, en realidad, vengo a ver si Amy ya está disponible —respondió—, como me dijiste que me avisaría tan pronto como despertara, creí que ella no había aparecido todavía —Por un momento, todo el sitio se quedó en silencio y nervioso por ello, el zorro continuó—: ¿Sigue dormida?

—No, subió a arreglarse —Se puso de pie, inexpresivo—, tendrá un par de visitas hoy.

—Oh, cierto, que vendrá Shadow —pronuncio tan rápido como recordó ese detalle—, pero él dijo que llegaría hasta la noche.

—Si, pero Rouge no —expuso su reciente descubrimiento—. ¿Puedes crees que dejo su desayuno a la mitad tan pronto como le dijeron que vendrían? —Sus manos se ubicaron a cada costado de su cintura, indignado.

—Pero si tú haces lo mismo todo el tiempo —Lo analizó, disperso—. Existe algún conflicto, dejas cualquier cosa que estes haciendo y vas hacia ahí —Frunció el ceño, extrañado—, lo siento, pero no entiendo cuál es tu molestia.

—¿Molestia? —bufó, exagerado—, pero ¿quién está hablando de molestia?

—Sonic, ya sabes a lo que me refiero —respondió, persistente—. Cuál es tu molestia realmente, ¿eh? —Enarcó una ceja, curioso, aumentando la inquietud del otro—, ¿qué no haya desayunado como es debido o que alguno de los dos vendrá a verla?

—A veces odio que me conozcas tan bien, hermano —Rodó los ojos, resignado—. Lo siento, es que no es intencional.

—No suenas muy sincero, ¿sabes? —confesó—. Es que en verdad parece que ese "pequeño enojo" —Hizo comillas grandes con los dedos de su mano desocupada—, si es intencional o, mínimamente, selectivo.

—¿Estás insinuando que yo estoy...? —Se quedó callado tan rápido como su mente terminó de formar la pregunta en su mente—. ¡No! —dijo con rudeza, sobresaltado al zorro de dos colas—, no te atrevas a mencionarlo, Tails.

—¿De qué otra manera podría nombrar lo que te lleva ocurriendo desde hace semanas? —Se cruzó de brazos, observándolo con detalle—, o, dime, ¿no sientes un poco de celos de que ahora Amy quiera pasar tiempo con alguien más, que no seas tú?

—No pienso contestar esa pregunta —Retrocedió un par de pasos—, pero te aseguro que no es lo que tú crees.

—¿Entonces que es?, porque estoy muy confundido —Dio un paso hacia enfrente, encarándolo, empeorando los nervios de su hermano—, ¿por qué parece molestarte tanto que Shadow tenga que pasar tiempo con ella?

—No me molesta —persistió, en esta ocasiona, con un tono de voz más elevado del acostumbrado—, solo es extraño, ¿sí? —Después de ver que el menor retrocedió, comprendió que le estaba dando la oportunidad de explicarlo por su propia cuenta antes de sacar alguna conclusión—. Primero intenta entender mi situación, ¿de acuerdo? —pidió, adelantado—, de un día para el otro, pasan de ser unos completos desconocidos, que podían pasar meses enteros sin hablarse, y ahora vendrán todos los días a verla —Su mirada quedó clavada en el suelo, desanimado—, es inevitable que no me sienta un poco desubicado, gracias al cambio.

En blanco [Shadamy] (EN ACTUALIZACIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora