Lecciones De Amor 🌺🩷 |Salma El Fil

Mentiras

—Y bueno chicos, ¿qué os parece este sitio? —dijo Eddie sonriendo.

—¡Magnífico! —dijo Leah flipando como siempre.

—Es muy bonito —dijo Nora flipando al igual que Leah.

—Es maravilloso —dijeron Albert, Jack y yo al unísono.

—No está mal —dijo Luck por último.

—Bueno, arreglemos las tiendas de campaña y elijamos con quién dormimos.

Leah, Nora y yo nos pusimos juntas, aunque era un poco incómodo ya que la tienda no era tan grande. Jack y Alberto se pusieron juntos y, como Luck quería estar solo, Eddie también se tuvo que quedar solo.

—Chicas, a mí me da pena Eddie, está solo.

—Pues ve a dormir con tu novio, Nora —dije divertida.

—¡Solo somos amigos!

—Amigos con derechos —dijo Leah siguiéndome el rollo.

—Me voy con él por pena y porque es mi mejor amigo. Además, así estaréis más cómodas. Bye.

—Suerte con tu novio, no olvides llevar condones, ¿eh?

—Vete a tomar por culo, Leah —dijo Nora divertida.

Tras eso, Nora se fue y entró a la tienda de Eddie. Sabe Dios de qué estarán hablando.

Llegamos bastante tarde al campamento, eran como las ocho de la noche y cerca de las nueve teníamos que irnos a dormir para al día siguiente levantarnos a las siete y media de la mañana, ya que habíamos quedado en ir a la playa, que estaba al lado del precioso campamento.

—Tía, me estoy meando.

—¿Y qué quieres que te haga? Ve a mear.

—Sí, sí, ¿enfrente de todo el mundo o qué?

—Enfrente de un árbol es mejor, Leah, pero si eso es lo que quieres, yo te apoyo —le dije divertida.

—No ayudas, Aurora —me dijo también divertida, negando con la cabeza.

Tras un rato de que Leah se fuese, alguien tocó la puerta.

—Aurora, ¿puedes salir un momento? —me dijo Luck seriamente. Y aunque siempre era serio y borde, esta vez la seriedad estaba mezclada con preocupación.

—Está bien —le respondí.

Luck y yo nos dirigimos a un acantilado con un tipo de valla de madera. Los dos nos apoyamos allí. Sinceramente, las vistas eran hermosas y a lo lejos había una playa preciosa.

—Mi jefe me ha mandado un mensaje diciendo que luego me tiene que decir algo importante y que ahora no puede decírmelo porque aún no está seguro de si lo va a hacer o no —dijo Luck mirando al horizonte.

—Luck, seguro que no es nada malo, solo estate tranquilo.

—Casi nunca le hago caso al capitán y me arriesgo de más. Aunque siempre logro salvar una vida más y el capitán lo agradece. Dice que no trabajo en equipo.

—Espera a que te llame. Mientras más te preocupas por el futuro, más nervioso estarás y encima tal vez te estés preocupando ahora por nada.

—Tal vez tengas razón, intentaré calmarme —dijo Luck mirando al horizonte.

Pensé que me iba a agradecer, pero seguía siendo igual de frío. No sé por qué es así y lo peor de todo es que le gusta ser así. ¿Quién le habrá hecho tanto daño?

Luego, Luck, sin siquiera mirarme a los ojos como siempre hacía, se fue y entró a su tienda de campaña.

—Hola, Aurora —me dijo Eddie colocándose donde estaba Luck hace un rato.