DIECISEIS: La Hora Final

6 3 0
                                    

                                                                                        ~Alaska~

Nos quedamos en la cabaña hasta que la noche cayó completamente. Las estrellas brillaban en el cielo despejado, pero en nuestro refugio, la atmósfera era tensa y cargada de incertidumbre. Victor se había sentado en una silla, revisando algunos documentos que había traído consigo. Cain y yo estábamos en la cama, sus heridas aún visibles pero ya mejorando.

Finalmente, rompí el silencio. 

- Victor, tenemos que hablar.

Victor levantó la mirada, notando la seriedad en mi voz. 

- ¿Sobre qué?

Cain se incorporó con cuidado, su mirada fija en Victor. 

- Sobre tu lealtad. No podemos seguir así sin saber en quién podemos confiar.

Victor suspiró, cerrando los documentos y dejándolos a un lado. 

- Entiendo. Hice lo que hice porque pensé que era lo correcto en ese momento. Pero ahora estoy aquí, con ustedes. Quiero ayudarlos a terminar con esto.

- ¿Y cómo podemos estar seguros de que no volverás a traicionarnos? -  pregunté, mi voz temblando ligeramente. - Después de todo lo que ha pasado, es difícil confiar.

Victor asintió, aceptando nuestras dudas. 

- Lo sé. Pero créanme, quiero acabar con Leon tanto como ustedes. Nos ha manipulado a todos, y ha jugado con nuestras vidas. No quiero que siga teniendo ese poder.

Cain lo miró intensamente, evaluando cada palabra. 

- Demuéstranos que podemos confiar en ti. Dinos lo que sabes sobre su próximo movimiento.

Victor asintió y comenzó a hablar. 

- Leon tiene varios escondites, pero uno de los más seguros está en las afueras de la ciudad. Es un lugar bien protegido, pero vulnerable si sabemos cómo entrar. He estudiado sus patrones de seguridad y creo que podemos sorprenderlo.

- ¿Por qué no nos contaste esto antes? - pregunté, mi desconfianza aún palpable.

- Porque no estaba seguro de sus planes exactos hasta ahora. - respondió Victor. - He estado recopilando información y ahora estoy seguro de que ese es su próximo destino. Quiere trasladar el tesoro allí.

Cain asintió lentamente. 

- Entonces tenemos que actuar rápido. No podemos darle tiempo para fortalecerse más.

- Exactamente. -  dijo Victor. - Pero necesitamos un plan sólido. No podemos permitirnos ningún error.

Nos sentamos los tres, discutiendo cada detalle del plan. Mientras hablábamos, comencé a sentir una leve chispa de esperanza. Quizás, solo quizás, podíamos salir de esto con vida y terminar con el reinado de terror de Leon.

- Alaska. - dijo Cain, rompiendo mis pensamientos. - Quiero que sepas que, a pesar de todo, confío en ti. Juntos podemos lograrlo.

Asentí, apretando su mano. 

- Gracias, Cain. Estoy contigo hasta el final.

Victor nos miró, su expresión seria pero decidida. 

- Vamos a hacer esto. Por nosotros, y por todos los que han sufrido bajo el yugo de Leon.

La noche avanzó, y aunque sabíamos que el peligro estaba cerca, nos aferramos a nuestra determinación y al frágil hilo de confianza que habíamos comenzado a tejer nuevamente. La batalla final estaba cerca, y estábamos listos para enfrentarla juntos.

La Chica De Los LazosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora