𝙻𝚘𝚜 𝚃𝚛𝚎𝚜 𝙳𝚎𝚜𝚎𝚘𝚜 |𝘚𝘢𝘴𝘶𝘬𝘦 𝘜𝘤𝘩𝘪𝘩𝘢|

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La llegada de los Hokages impresionó a la mayoría de la alianza shinobi. La entrada del cuarto fue una ola de esperanza para la mayoría de personas en combate, ya que, momentos antes iban a ser aplastados por un ataque de una Bijudama en su contra.

Agradecían a la persona que los habían revivido..

El Juubi había destrozado gran parte del campo de batalla, todos habian cooperado bastante para al menos sobrevivir, pero el agotamiento de chakra era evidente para todos y pronto caerían ante el enmascarado.

De repente, el campo alrededor se vio rodeado por un humo blanco ante los Shinobis de la nueva generación. Del humo se podían reflejar distintas sobras cerca de él. Sin embargo, al momento de dispersarse tres figuras conocidas para pocos hacía acto de presencia.

El azabache sostenía la mano de la albina cerca de él, mientras que ella se reincorporaba después de usar su poder. Itachi se mantenía al margen a un lado de su hermano, dispuesto a protegerlo a toda costa.

—Llegas tarde, Sasuke.

Fueron las palabras de un rubio lejos de ellos. Koemi lo recordaba, era el mismo chico que estaba dispuesto a traer a Sasuke devuelta a su aldea.

—¿Él no es... Itachi Uchiha?

Los murmullos empezaron a sonar, algunos diciendo lo imposible que era que Itachi estuviera vivo, otros pensaban que era un revivido por el Edo tensei, pero al ver sus ojos notaron que era todo lo contrario.

Aunque también se extrañaron por la chica que los acompañaban

Nunca antes la habían visto, pero desprendía un aura familiar.

—Sasuke.. ¿Kun?

El nombrado se giró a verla. Ahora que lo recordaba, ella había sido la persona la cual quería matar a Sasuke mediante una trampa encargaba

—¡¿Sasuke-kun?!.–Grito una rubia de linda cabellera, corriendo a dirección del nombrado, pero por orden de su equipo no logro llegar hasta él.

—¡Ino, recuerda que él es el enemigo!.–Aclaro molesto un chico con un chongo en su cabeza, tomando del brazo a la nombrada.

Ella por su parte solo se alejo unos cuantos pasos hacía atrás, entendiendo a sus compañeros.

—Tan escandalosos como siempre.–Inexpresivo con su alrededor, Sasuke ignoraba las réplicas en su contra.

—¡Tú! ¡¿A qué viniste, desgraciado?!.–Esta vez… reclamó un chico perro, según la albina.

Todos esperaban una contestación de parte de él. Por lo que sabía, Sasuke había traicionado a su aldea en busca de venganza hacía su hermano, por lo que los shinobis de la nueva generación vendrían siendo sus antiguos compañeros del pasado.

—Pasaron muchas cosas, pero decidí proteger Konoha.–Aún sosteniendo la mano de la albina, se dirigió hacía los demas.—Ademas... Voy a convertirme en el Hokage.

Koemi soltó su mano en cuanto dijo eso, su rostro tomo sorpresa ante aquella decisión. Y aunque le causaba gracia, intentaba no reír por su acción.

—¿Sasuke, estás bien? ¿No te duele la cabeza? Digo, porque no sé de donde sacaste esa conclusión.–Murmuró entre dientes a causa de su risa.

No es que no pudiera convertirse en Hokage, solo que con tan solo recordar su historial podria notar todas las faltas que obtuvo a lo largo de su vida.

—¡Si claro! ¡El tipo que a escapado de su aldea regresó para hacer bromas! ¡¿Sabes al menos que es ser un Hokage?!.-Chillo el chico perro al alzar sus puños al aire