𝙻𝚘𝚜 𝚃𝚛𝚎𝚜 𝙳𝚎𝚜𝚎𝚘𝚜 |𝘚𝘢𝘴𝘶𝘬𝘦 𝘜𝘤𝘩𝘪𝘩𝘢|

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Su vista se aclaró al momento en el que se dio cuenta en la situación en la que se encontraba. No sabía cuanto tiempo había pasado, pero el hecho de que el olor a sangre proveniente muy cerca de ella logró alertarla, fue motivo suficiente para recordar lo que habia sucedido horas atrás.

Sin embargo, se dio cuenta de la energía extraña que la tierra estaba dando a su alrededor, notando la destrucción masiva que había por el lugar.

Y al pensar un poco en los acontecimientos pasados, supo que la batalla de Naruto y Sasuke ya había acabado.

Frente a ella, un azabache mantenía su mirada fija en ella, mezclando sus propios sentimientos al mantenerse tranquilo, pero a su vez.. ¿Arrepentido?

Sus propias palabras resonaron por su mente, al momento en el que violeta y ónix se cruzaron.

—"No me interpondré en tu camino, pero eso no significa que me enojare contigo al momento en el que supliques por mi perdón."

Sus propias palabras la mantenieron sorprendida al momento de no querer saber "el porqué" proveniente del gran charco de sangre a su alrededor.

Sakura, Kakashi y Obito habían llegado hace algunos minutos, siendo la pelirosa la más capacitada para curar los cuerpos heridos de sus compañeros, pero el grito ahogado que soltó al momento de ver a lo que se enfrentaba puso los pelos de punta a la joven genia.

—¿Koemi..?

Sasuke busco con la mirada a su genia, intentando hablar con ella, sin éxito alguno.

La mencionada se acercó con cautela al darse cuenta que había sido despertada por el azabache, trayéndola de nuevo a por él.

Frunció el ceño.

—Yo...–Sasuke tartamudeo, sintiendo como sus cuerdas vocales se mantenían abstractas al daño de su batalla con Naruto. Sin embargo, Koemi ya había dejado todo muy en claro.—Yo quería disculparme contigo..

—Lo sé.

La albina se sentó a un lado de él, prestando atención al procedimiento de curación de la Haruno y los chistes extraños que salían de los labios del Uzumaki. Pero, todo lo que tenía que hacer era buscar una solución a su problema

—No... Yo he hecho cosas terribles y tú siempre me apoyaste. Aún si estaba equivocado.–Sasuke tomó la mano de la albina con su único brazo visible.—Nunca puse tu felicidad por delante porqué estuve todo este tiempo cegado por mi propia venganza. No valore a los que me rodeaban, incluso a Itachi.

Koemi suspiro, apretando sus labios inconscientemente al pensar muy bien en sus palabras.

—Y.. ¿Te arrepientes?

Bien, sabía que Sasuke esa demasiado orgulloso como para decirlo en voz alta. Más cuando sus compañeros lo miraron directamente hacía su pregunta.

Quiso burlarse, pero sabía que no era el momento indicando al saber que los sentimientos del Uchiha estaban siendo formentados a través de su sola presencia.

—Si.. y mucho.–Murmuro Sasuke, desviando su mirada a sus pies. El dolor en su espalda lo estaba matando y lo único que quería ahora era descansar

—¿Que dijiste? No pude oírte.–La albina señaló sus oídos, mientras una sonrisa traviesa salía de sus labios

Sasuke giró su rostro a su dirección, indignado y sin poder creerlo. Un impulso paso por su mente, pero sabía que no era el momento para eso.

No aún.

—¿Que..?

—Es broma, Sasuke. No debes tomarte todo tan a pecho.–La albina sonrió.—Y si lo dices por todas las cosas que hiciste, quiero decirte que estás perdonado