13. Intermedio

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Tras la proclamación de los ganadores de los primeros preliminares, a Kyle y Ellyss los separaron, uno para ir a la enfermería, la otra para disfrutar su victoria.

En la enfermería, unos magos con magia curativa rompieron las costillas de Kyle de nuevo para poder soldarlas bien de nuevo. Fue un proceso doloroso, pero para el final del día, estaba como nuevo.

Unos ayudantes muy amables y asustados le mostraron el camino a una de las habitaciones designadas para los ganadores de las rondas preliminares.

Al entrar, Kyle vio que era amplia. Las paredes eran blancas y una lámpara de araña iluminaba la habitación. Al entrar, había una puerta que daba a un baño a mano derecha. Enfrente de esa puerta, había un armario con ropa. Siguiendo hacia delante había unos ventanales enormes. Y a la derecha había una cama enorme.

Pero eso no importaba. No, lo que realmente hizo feliz a Kyle fueron sus amigos, sentados en su cama y sonriendo. Kai estaba tumbado en su cama, como si le perteneciera desde siempre. Seele lo amonestaba, pero aún así estaba sentada también. Blake se había tumbado boca abajo y parecía ajeno al mundo que lo rodeaba.

Y Ellyss estaba allí sentada, con las piernas colgando y agitándolas en el aire como una niña. Ya no tenía branquias ni una cúpula de agua cubriendo su cabeza. Su pelo castaño estaba seco por segunda vez desde que Kyle la conoció. La primera fue cuando casi se ahogó. Tenía su característico sombrero pirata y ya no iba descalza, llevaba unas botas piratas hasta las rodillas. Kyle sonrió al verla y fue a abrazarla.

Ella le correspondió al abrazo. Kai se sentó en la cama y los miró. Blake ni siquiera hizo ademán de moverse y Seele los miró levantando las cejas.

-Pero bueno, Kyle ¿te vas unas semanas y te olvidas de nosotros? -preguntó Kai con falso enfado.

-Sabes que no podría olvidarme de ti, eres irresistible -dijo Kyle con una risita.

-Eso es cierto, soy genial -coincidió Kai con una sonrisa.

Kyle abrazó a Kai y miró a Blake con curiosidad, que seguía ahí tumbado.

-¿Y este? ¿Está muerto? -preguntó Kyle.

Seele soltó una risotada y Kai sonrió ante esto.

-Ya quisiera estar muerto -dijo Seele-. Al ver tu victoria, se comieron muchas golosinas para celebrarlo. Kai y él. Le duele el estómago un montón.

Blake soltó un quejido y se giró hasta quedar boca arriba. Miró a Kyle y a pesar de su dolor de estómago sonrió.

-No te había oído llegar... Felicidades por ganar, novato. Sabía que podrías hacerlo -dijo Blake

-¿En serio? Porque cuando apareció el tipo ese de la alianza o solo quedaban cinco te estabas tirando de los pelos y te veías exasperado -dijo Kai.

-Bueno, eso fue porque me preocupaba por él

-Ya, ya, lo que tú digas -dijo Seele.

Kyle abrazó a sus amigos. Los había echado de menos, a pesar de que apenas se conocieran.

-Por cierto, ¿quien es esta linda chica? -preguntó Kai mirando a Ellyss.

Kyle volvió a mirar a Ellyss, quién miraba a Kai con curiosidad. Al parecer, no habían hablado mucho mientras no estaba.

-Bueno, ella es Ellyss. Me ayudó a ganar. Sin ella, dudo que hubiera podido hacerlo.

-Ya, y por eso ahora tienes novia -dijo Kai burlándose.

-¡No es mi novia!

-¡No es mi novio!

Ambos se miraron ante lo que acababan de decir y se rieron. Lo habían dicho a la vez. Kai los siguió observando.

El Coliseo del AzarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora