El Complemento del Diablo

Capítulo 20

El aire se sentía pesado.

El ambiente sumamente tenso.

Jack, Jean, y el heredero de Kingdom of Nãus se estaban mirando cara a cara.

No entendía bien el por qué Jack venía en horarios fuera de clase, pero me aterraba el hecho de que se hubieran encontrado y yo lo estuviese presenciando

—¿Qué hacen ustedes aquí? —Preguntó Jack tensando la mandíbula y apretando los puños. Podía notar como la ira se apoderaba de su cuerpo.

No pintaba bien.

—Eso no es asunto tuyo. —Por el contrario, el heredero del pueblo enemigo simplemente se encogió de hombros e intentó seguir su camino, pero Jack no lo dejó ir.

—¡Te hice una pregunta! —Dijo con tono amenazante.

—Y yo te di una respuesta, ahora, que no te haya gustado es problema tuyo. —Intentó seguir su camino, totalmente indiferente, pero de nuevo Jack lo detuvo. Esta vez tomándolo del brazo.

Mi corazón dio un respingo y por impulso comencé a correr hacia ellos.

—¡Jack, ya basta! —Me les acerqué y lo tomé del brazo.

—Es que tú no lo entiendes, ellos no deberían estar aquí.

—Así es, no deberíamos, pero quizás si en vez de estar jugando a tus juegos de niño hubieses mantenido el orden nosotros no deberíamos estar perdiendo el tiempo aquí. —Dijo con su característico tono cortante. Se veía que quería evitar problemas a toda costa, además de que estaba muy apresurado.

—¿De qué carajo estás hablando? ¡Aquí está todo bien!

—¿Sí? —Se giró sobre sus pies, esta vez enfrentando a Jack cara a cara. Dio unos pasos hacia él mientras Jack retrocedía un poco. —Si estuviera todo bien, ella no habría salido de la hibernación. Ni siquiera son capaces de mantener sus leyendas donde deben. ¡Encerradas! —Pronunció lo último ya estresado.

¿Ella? ¿Hibernación?

¿Qué se supone que era la leyenda de este pueblo? ¿Y por qué suena tan aterrador?

Jack seguía con la mandíbula tensa, estaba dispuesto a responderle, pero yo lo jalé del brazo y me lo llevé a empujones.

El rubio me guiñó el ojo y ambos se fueron en dirección contraria.

—¡Tú! ¡Animal! ¡¿Podrías por favor pensar con la cabeza fría?! Te acabas de enfrentar a dos de...

—Sé muy bien lo que hago, y me puedo cuidar solo. —Me interrumpió liberándose de mi agarre y poniéndose en marcha hacia la escuela.

—¡Jack, detente ahí, ahora! —Le chillé sin recibir respuestas, por lo que me vi obligada a correr detrás de él.

Evelyn miraba la escena como si estuviera viendo una película de terror.

—¿Qué quieres? —Se giró sobre sus pies, esta vez prestándome atención y mirándome a los ojos.

Había estado evitando hacerlo.

—Quiero que me digas que está pasando.

—¿Qué de todo?

—Todo.

—Ahora no tengo tiempo, debo ir a clases.

—¿A clases? ¡Ya terminaron las clases!

—Estoy tomando las de la noche, sí, te estoy evitando. ¿Algo más que quieras saber?