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Rose estaba sentada en su trono, con el ceño fruncido mientras revisaba los documentos que los consejeros habían preparado para ella. El salón del trono estaba en silencio, salvo por el crujido ocasional del fuego en la chimenea y el susurro de los vestidos de seda de Rose al moverse. Jisoo estaba a su lado, observando con preocupación el rostro tenso de Rose. Desde que se enamoraron, Jisoo había aprendido a leer cada pequeña expresión de Rose.

-Amor, ¿qué pasa? -preguntó Jisoo, acercándose un poco más a ella, su voz suave y cargada de preocupación.

Rose suspiró, dejando los papeles a un lado y frotándose las sienes con los dedos.

-Es la nueva ley que el consejo quiere aprobar. -respondió, su voz llena de frustración. -Quieren aumentar los impuestos a los campesinos para financiar la expansión del ejército. No estoy de acuerdo, Jisoo. Esto solo causará más problemas entre nuestra gente.

Jisoo frunció el ceño, comprendiendo la preocupación de Rose. Sabía lo mucho que su esposa se preocupaba por el bienestar de su pueblo, y eso era una de las cosas que más admiraba de ella.

-Entiendo tu punto, Rose, pero también debemos considerar la seguridad del reino. Con los rumores de guerra en el norte, debemos estar preparados. A veces, sacrificios deben hacerse por el bien mayor.

Rose la miró con una mezcla de sorpresa y frustración.

-¿Tú también crees que debemos cargar a nuestro pueblo con más impuestos? Sabes lo difícil que ha sido para ellos este último año con la sequía. las malas cosechas y la guerra. No puedo, en buena conciencia, pedirles más.

Jisoo tomó la mano de Rose, tratando de calmarla.

-No es que quiera cargarles más, Rose, pero también debemos pensar en la defensa del reino. Si no estamos preparados, podríamos perder mucho más. Quizás podamos encontrar una solución intermedia, algo que no impacte tanto a los campesinos.

En ese momento, Katniss entró en la sala. Su presencia imponente y su cabello blanco como la nieve contrastaban con la oscuridad de la habitación.

-Mi reina, perdón por interrumpir. -dijo Katniss, haciendo una reverencia. -He oído sobre la propuesta de aumentar los impuestos y quiero ofrecer mi perspectiva.

Rose asintió, agradecida por la presencia de Katniss.

-Por supuesto, Katniss. ¿Cuál es tu opinión?

Katniss se acercó, sus ojos azules brillando con determinación.

-Creo que deberíamos explorar otras formas de financiar la expansión del ejército. Estoy de acuerdo con Jisoo en que la seguridad del reino es crucial, pero también creo que hay maneras de hacerlo sin perjudicar a nuestros campesinos. Podemos buscar alianzas con otros reinos o incluso invertir en tecnologías que mejoren nuestra producción agrícola y militar.

Jisoo asintió, viendo el valor en las palabras de Katniss.

-Esa es una excelente sugerencia, Katniss. Si podemos aumentar la eficiencia en nuestras tierras y obtener apoyo externo, podríamos evitar cargar a nuestro pueblo con más impuestos.

Rose se levantó, alejándose unos pasos mientras pensaba. Sabía que tanto Jisoo como Katniss tenían puntos válidos, pero la idea de poner más presión sobre su gente la angustiaba.

-¿Y si en lugar de aumentar los impuestos, redistribuimos algunos de los fondos del tesoro real? Podríamos reducir algunos gastos de la corte y asignarlos a la defensa. Sé que no será suficiente, pero podría ser un buen comienzo sin afectar directamente a nuestro pueblo.

En ese momento, Lizbeth entró en la sala. Su expresión era seria y su postura firme.

-Mi reina, he estado escuchando la conversación. Creo que podemos reorganizar nuestras fuerzas para ser más eficientes sin necesidad de aumentar los impuestos. También podríamos considerar convocar a un consejo de guerra para discutir estrategias defensivas más económicas.

Princesa & Guardia [Chaesoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora