Todos somos débiles a algo o alguien, incluso el chico malo de la institución, Jeon Jungkook, quien es un claro ejemplo de ello. Su debilidad tiene nombre y apellido, además de tener la sonrisa más hermosa, su nombre es Kim Taehyung, y esta es la hi...
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El plazo de un mes para la planeación del intercolegial había comenzado, y todo el comité organizador se encontraba inmerso en su labor.
Taehyung, como vicepresidente del consejo estudiantil, dirigía cada reunión con determinación. A su lado, Jungkook, estaba más comprometido que nunca en la organización del evento.
Desde que se asignaron a trabajar juntos, Jungkook había encontrado más oportunidades para estar cerca de Taehyung. A pesar de tener que hacer a un lado sus sentimientos para el rato con Taehyung era reconfortante. Principalmente porque Taehyung era el tipo de persona que trataba de ver por los demás, escuchando la opiniones y dudas de cada uno, tratando siempre de hacerlos participe.
Por eso y muchísimas cualidades más que Taehyung poseía es que Jungkook estaba tan al fondo por él.
Cada tarde, después de las clases, se reunían junto a sus amigos para planificar. Hoseok y Jimin, los inseparables compañeros de Jungkook, se encargaban de la coordinación deportiva con entusiasmo.
Por otro lado, Jin y Yoongi, los amigos cercanos de Taehyung, aportaban su organización meticulosa al equipo.
Una tarde, después de una larga sesión de planificación, el grupo decidió tomar un pequeño descanso en el césped detrás del gimnasio.
El sol en ese momento comenzaba a ponerse en lo alto, creando una atmósfera tranquila y cálida alrededor de los amigos. Sentados en círculo, compartieron risas y bocadillos mientras descansaban de las discusiones intensas.
—Creo que deberíamos considerar cambiar el horario de los partidos de fútbol. Los estudiantes podrían tener mucha más energía por la mañana que por la tarde —sugirió Jin, mirando a Taehyung en busca de su aprobación.
Taehyung asintió pensativo. —Es una buena idea. Vamos a revisar la disponibilidad de las canchas y ver si podemos ajustar el cronograma.
Jimin intervino, señalando otro detalle. —También podríamos organizar una votación en línea para que los estudiantes elijan el diseño de la camiseta del evento. Creo que eso generaría más entusiasmo.
Hoseok asintió bastante entusiasmado. —¡Sí! Podríamos diseñar algunas opciones y dejar que decidan. Seguro que les encantará participar en el proceso creativo.
Jungkook, quien había estado observando a Taehyung mientras hablaba, finalmente decidió intervenir. —Taehyung, ¿qué opinas de la idea de Jimin? Creo que sería una forma genial de involucrar a todos los estudiantes.
Taehyung sonrió, agradecido por la participación activa de Jungkook.
—Estoy de acuerdo. Podemos lanzar la votación la próxima semana y ver qué diseño gana. Será divertido ver las ideas que tienen nuestros compañeros.
Hoseok dio aplausos con efusividad, añadiendo otra propuesta—. Grandioso. Podríamos hablar con alguien para que nos ayude con los diseños.
—Taehyung puede hacerlo —interfirió Yoongi—. El es muy bueno dibujando y creando cosas, tiene manos de ángel —dijo sonriendo levemente. Taehyung a su lado hizo una mueca de desaprobación en su dirección ante su comentario.
