CAPITULO 17. LA PRESA

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— Mierda!

Mark no pudo más y terminó vomitando de nuevo, se arrastró fuera del auto para no mancharlo. Mark podía sentir como aquel líquido espeso y caliente intentaba subir por toda su garganta de nuevo, intentando salir. Su pecho se veía presionado de forma involuntaria, sentía como sus costillas se contraían para no dejar salir el vómito... Pero le fue inútil.

¡CRUAGH!

Se escuchó de nuevo, aquel sonido tan asqueroso, pesado, y "húmedo" que chocaba contra el asfalto.

— ¿Mala comida? —Preguntó uno de los policías que lo escoltaba.

— Más bien, malos recuerdos.

— No tengo idea de lo que viviste allá adentro, pero sea lo que sea, me imaginó que fue muy horrible.

— No tienes idea... —Se incorporó—. Pude verle el cerebro a uno de mis amigos, vi la mandíbula fracturada y en carne viva de un hombre, además de eso, hice algo que jamás creí hacer...

La expresión de aquel policía demostraba su confusión.

— ¿Qué hiciste?

— Le enterré un hacha en el abdomen a una persona.

— Al hombre, me imagino.

— No, a su esposa.

— ¡Bue! Suficiente, ¿No querés mejor agua mineral para quitar el mal sabor?

— Gracias.

Mark aún se sentía débil. Por cada día que pasaba se sentía un desgaste enorme en su cabeza y cuerpo.

— Los padres de la joven siguen muy inquietos por encontrarla.

— Sí... Los padres de Violet me odian. ¿Te diste cuenta todo lo que me dijeron al salir de su casa?


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"Maldito y mil veces maldito" Exclamó la madre de Violet, balanceándose sobre Mark, aquel hombre se levantó de su asiento y dejándose ir hacia atrás para evitar los golpes de aquella mujer. Pero la policía la detuvo a tiempo, evitando una escena.

"¿¡POR QUÉ TÚ SÍ ESCAPASTE Y MI VIOLET NO!?" Los gritos de aquella mujer resonaban por las cuatro paredes del hogar, seguido de la voz suave y reconfortante de su esposo, el padre de Violet.

"Señora... Con todo respeto le vuelvo a repetir, yo vi a su hija caer desde el segundo piso y sobre una mesa, ¡Yo escuché como su cuerpo se estampó contra aquella mesa! ¡Y pude ver que ella ya no se movía!" Mark ya no estaba con aquel tono de voz apacible y dulce, ahora estaba gritando en el mismo tono que la madre de su amiga "muerta". Mark frotó su rostro con coraje, tratando de tranquilizarse. Tomó una bocanada de aire, calmó sus nervios y dijo—: "Cuando volvimos al lugar ya no había nadie, solo el cuerpo de las víctimas, los dueños de la casa, mis ... mis amigos muertos, pero Violet no estaba, y tampoco un "presunto" hijo de aquella familia de lunáticos. Tenemos por idea que tanto Violet como aquel joven están escondidos en algún lugar"

Mark realmente se veía afectado por todo lo que había sucedido; Sus amigos muertos, el como él estuvo a punto de morir, el como él asesinó a una mujer con sus propias manos. Y ahora, la desaparición de una de sus amigas, realmente todo era demasiado agotador como para que alguien le echase la culpa de todo lo acontecido, Mark solo era una víctima más.

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— Sí, la verdad es que es muy duro. —Respondió aquel policía.

THE HELL IN THE HOUSE  |CANÍBAL • TERROR | DISPONIBLE EN AMAZON.COM ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora