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CAPITULO 21. ¿No era Brahms?

— ¿Necesitas ayuda para relajarte? ¿algo de alcohol? ¿algo dulce?

Violet sabía que de esta no se salvaba, tenía que seguir la corriente. Pero más por nada, la duda, si Ben le advertía sobre Leo y su necesidad carnal, eso significaba que Leo era débil en la carne, en lo sexual, la adicción de Leo podría ayudarla por unos días, hacerle creer que tiene un interés mutuo hacia él, y luego escapar cuando menos lo esperase.

Pero necesitaba algo para no sentir tanto el repudio que tenía hacia él, lo único que le pasaba por la cabeza era beber mucho alcohol.

— Quiero beber algo más...

— ¿Necesitas beber un poco más? —susurró.

— Quizás...

Leo buscó en la otra mesita de noche, para la suerte de ambos, este era vodka, Violet apenas alcanzó a leer el porcentaje de alcohol, pero lo único que podía deducir era que aquella botella, la mandaría a otro mundo fuera de su consciencia.

— ¿Quieres un poco? —meneó la botella frente su rostro.

Violet intentó agarrar la botella pero Leo se lo impidió, con una mano sostuvo el rostro de la chica mientras que con la otra sostenía la botella ya destapada.

— Abre. —Ordenó.

Violet solamente se dedicaba a obedecer las ordenes de aquel chico. Al tragar aquel líquido podía sentir como quemaba toda su garganta. Leo colocó un poco de esta bebida en su boca, sin tragarlo, se acercó al rostro de Violet, obligándola a abrir la boca y dándole un beso más apasionado, dejando que el vodka que tenía en su boca se pasará a la de ella. Violet se sentía incómoda, no tanto por el beso, sino que aún estaba en aquellos días de sangrado, por lo que dio unas pequeñas palmadas en el hombro de Leo, indicándole que se detuviera.

Para cuando Leo se detuvo, ella comenzó a toser.

— ¿Pasó algo?

— Me siento muy mareada, creo que quiero darme un baño...

— ¿Te acompaño?

— Dame unos minutos y saldré l-lista...

— Estás muy ebria, apenas y puedes caminar, déjame ayudarte.

Leo hizo caso omiso a la petición de Violet, llevándosela cargada al baño, dejándola con cuidado dentro de la bañera. La cabeza de Violet daba mil vueltas, ya ni siquiera reconocía con claridad el rostro de Leo, podía ver a Leo y a Mark a la vez.

Al recordar a Mark dejó salir una sonrisa.

— ¿Qué? ¿Qué te parece tan gracioso?

— Te ves muy guapo...

— ¿Quieres que te ayude?

— Talvez...

Por lo único que rezaba ahora Violet era para que no se le escapara el nombre de Mark estando con Leo.

El pelirrojo comenzó a desvestirse, quitándose la camisa y el resto. Pidiendo un poco de espacio detrás de Violet, la mencionada encendió el grifo, dejando caer toda el agua caliente sobre ellos. La joven dejó salir un jadeo a causa del frío. Leo tomó las esquinas de la camisa de Violet, indicándole que elevará los brazos para quitársela, la mencionada obedeció, dejándose quitar la camisa por aquel joven de cabellos rojizos.

Mientras más pasaban los minutos, menos prendas había, así hasta queda completamente "limpios".

— Violet... —musitó— Quiero hacerlo aquí.