Loved In The 80's | KookMin 🎞

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"¿Qué?".

Jungkook, con una mirada llena de escepticismo y sorpresa, pronunció la única palabra que pudo salir de su boca al escuchar las palabras que su novio intentaba transmitirle de forma apresurada.

La verdad por fin estaba saliendo a la luz.

Jimin se encontraba en un constante vaivén de emociones, ansioso por revelar el secreto que guardaba con cuidado. Cada intento de encontrar el momento perfecto para hablar con Jungkook parecía desvanecerse entre distracciones y contratiempos. La primera oportunidad surgió al final de un largo día de trabajo de Jungkook. En la calma del hogar, Jimin se armó de valentía y se dispuso a hablar. Sin embargo, el destino parecía jugar en su contra, como si estuviera escribiendo el guion de una película llena de imprevistos. Cada vez que Jimin se acercaba a tocar el tema, la escena se veía interrumpida por intrusiones externas, dejando a Jungkook distraído y sin respuesta a las palabras no dichas de Jimin.

En otros intentos, cuando todo parecía alinearse a su favor y la quietud reinaba, el universo conspiraba de nuevo en su contra. Ya fuera el timbre insistente del teléfono o el olvido repentino de Jungkook por alguna tarea urgente, la comunicación entre ambos se veía truncada una y otra vez. En esos momentos de frustración, Jimin luchaba por mantener la calma y la determinación de transmitir su verdad a su amado, pero el destino parecía tejer una maraña de obstáculos en su camino. Cada interrupción y cada distracción, alimentaba la incertidumbre en el corazón de Jimin, haciéndole cuestionar si realmente encontraría el momento propicio para confesar lo que tanto le atormentaba.

Hasta que buscó otra instancia y se armó de valentía. Había llegado el momento preciso, y esta vez, nada ni nadie lo detendría en su propósito. Con la firme convicción de que su confesión era vital para el bienestar de su relación y la tranquilidad de Jungkook, Jimin estaba decidido a no ceder ante ninguna intrusión.

Con paso firme y la determinación reflejada en sus ojos, Jimin se acercó a Jungkook. Cualquier ruido externo, cualquier distracción, serían meras sombras que no podrían opacar la verdad que estaba a punto de revelar. Jimin estaba dispuesto a persistir, a insistir, a enfrentar cualquier obstáculo que se interpusiera en su camino, porque sabía que lo que tenía que decir era más importante que cualquier interrupción.

"Eso, mi amor" confirmó con voz serena. "No quiero seguir ocultándote nada. Pensé que al contraerte esto, podría ayudarte de alguna manera".

La expresión de Kook se volvió un enigma al fruncir el ceño y preguntar con un dejo de molestia:
"¿Por qué no me lo contaste antes?".
Su reacción era una mezcla confusa de emociones, un torbellino de sentimientos que se agitaban en su interior.

"Muchas veces quise hablar contigo sobre esto, pero respeté tu decisión de no querer abordarlo", explicaba con paciencia y sinceridad. "No podía seguir guardando esta carga solo, por eso tardé en contártelo", hablaba buscando transmitir consuelo a través de su mirada.

El pelinegro, sumido en sus pensamientos, expresó con voz reflexiva: "Dios mío, no puedo creerlo... ahora algunas piezas encajan".
La revelación parecía haber abierto una puerta a la comprensión en su mente, conectando puntos hasta entonces dispersos en el lienzo de su vida.

La conexión entre lo que sucedió con Jin y la experiencia de su novio generó un eco de incredulidad en Jungkook. "Es muy coincidente que a Seokjin le haya ocurrido algo similar contigo... con mi hermano. Es una locura", musitó, asimilando la complejidad de las circunstancias.

Su novio asintió con comprensión. "Lo sé. Intento verlo como una especie de señal. Si no hubiera conocido a Jin, nunca habría descubierto esto. Nunca lo habría creído", admitió con honestidad, compartiendo el sentimiento de asombro y gratitud por la forma en que el destino había entrelazado sus vidas de esa manera.