En el verano de 1983 nace una relación llena de aventuras, pasión y encanto entre un americano y un británico. Pero eso surgió en una época donde todavía la sociedad veía ese tipo de relaciones como el pecado más asqueroso y enfermizo que un hombre...
Yacían en la amplia cama de la única habitación de ese hotel. Jungkook y Jimin, solo ellos.
El mayor no paraba de llorar, al parecer el alcohol lo puso más sensible, sobretodo después del rechazo que Jimin le había dado.
Y ahí estaba Jimin, dándole el mayor consuelo que podía darle, el pelinegro aferrado a su cuerpo mientras su gran amor le acariciaba el cabello para tranquilizarlo.
Kook balbuceaba, el alcohol y el llanto no le permitían formar palabras coherentes.
"Jimin-Jiminnie" decía apenas. "Si te vuelvo a perder, yo-yo moriré" sollozaba mientras intentaba mirarlo. Al ver los ojos hinchados de Jungkook sólo suspiró y besó su frente. Aunque pudiera responderle no iba a entenderle porque no recordaría nada de eso al día siguiente.
También empezó a llorar, pero silenciosamente. Tenía en sus brazos al amor de su vida, y no podía hacer absolutamente nada. Se sentía frustrado, angustiado y muy triste por la situación.
No había dolor más grande que sufrir por amor.
¿Qué era lo correcto?, ¿qué pasaría si escuchara a su corazón?, ¿qué haría con Taehyung? le dolía la última pregunta porque justo estaba empezando a quererlo más seriamente.
A veces la vida te pone dos caminos, pero dependiendo de cuan difícil puedas tomar una decisión, vas explorando y cometiendo errores.
Luego de algunos minutos pensando y sentir los pequeños besos de Jungkook sobre sus brazos, decidió levantarlo para poder acostarlo bajo las sábanas.
Le trajo uno de los tantos recuerdos primerizos que tuvo con el pelinegro. Como cambian las cosas, ¿no?, ahora era él quien lo preparaba para dormir mientras el otro estaba sumergido en alcohol.
Jungkook ya no podía decir mucho, pues sus ojos se cerraban de vez en cuando. A Jimin le pareció tierno, mientras lo desvestía, este se estaba decayendo sobre la cama.
El menor intentó buscar algún pantalón de dormir que tuviera Jungkook por ahí pero fracasó en el intento. No tuvo más opción que recostar su cuerpo en nada más que ropa interior, el alcohol lo acaloró así que tampoco le puso una camiseta.
Jimin se acostó encima de las sábanas para respetar el espacio del mayor. Este apenas dejó de sentir el tacto del menor intentó buscarlo en la misma cama, y cuando lo sintió, se aferró nuevamente a su cuerpo. No tuvo más remedio que dejarse y darle ese cálido afecto para que pudiera dormir en paz.
No podía parar de llorar, qué no daría por poder disfrutar como quería esa vida que quería con él. ¿Cuánto iba a doler?, sentía que saber que tenía a su chico ahí y no poder amarlo bien era peor que no saber nada de él...
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Cuando Jungkook finalmente estaba dormido, Jimin utilizó su inconsciencia para poder desahogarse más. Desconsoladamente en llanto le empezó a decir:
"Aquí estás, mi vida, durmiendo junto a mí. ¿Sabes lo mucho que te extrañé?, intentaba refugiarme en hombres que pudieran darme lo mismo que tú me dabas, que se parecieran a ti, que me trataran como tú lo hacías, y nunca pude encontrarlo... Para mis cumpleaños siempre te pedí, y mis deseos se cumplieron. Discúlpame si soy muy hiriente contigo, a veces no quisiera tratarte como lo hago, sé que me arrepentiré pero, mi amor, te estuve esperando y no me quedó más opción que tomar la decisión de tener que olvidarte... Luego llegaste, inesperadamente con algunas noticias que nunca me hubiera gustado escuchar, pero aún así estoy feliz de que puedas ser estable alguna vez a diferencia de mí. Has logrado mucho en esta vida y estoy muy orgulloso de lo que eres, siempre seré tu admirador. Y no sabes lo mucho que te amo, lo mucho que causas en mí, si supieras cuantas emociones me provocas con tan solo una mirada, una palabra, un movimiento. Nunca me podré enamorar de alguien de esta misma forma Jungkookie, nunca. Y eso es lo que más pena me da, porque tampoco puedo demostrarte una vez más todo lo que te estoy diciendo, ya no. Hemos tomado rumbos diferentes pero también recuerdo lo mucho que me hablabas sobre el destino. El destino nos ha unido una vez más, pero me temo a que no estaba preparado para tu regreso y ahora tengo una carga muy grande que es la responsabilidad de dos personas a las que quiero mucho, a uno con más intensidad que el otro" rió. "Pero aún así es complicado... Tú también tienes más responsabilidades que yo y metas por cumplir, quizá no son metas que hayas querido para tu vida, pero ya está hecho. Si el destino así lo quiso tendremos que amarnos de manera prohibida, porque fue el mundo que nos tocó. Pero si de mi dependiera, si tú me lo pidieras, si tan sólo las cosas hubieran pasado de otra forma no dudaría en luchar por ti aunque de mi vida dependiera" finalizó, dándole un casto beso en la mejilla del somnoliento Jungkook...
