Félix logró concluir que cuando estaba cerca de Hyunjin perdía su juicio, por esa razón debía mantenerse entre más lejos mucho mejor. O por lo menos estar fuera de su alcance los siguientes treinta minutos que faltaban antes de cerrar.
—Félix estas todo rojo —Observó Mina cuando él se la cruzó llevando una canasta —, ¿Crees esta muy bajo el nivel del aire acondicionado?.
—Creo que si, deberías subirle un poco más. ¿Te ayudó? —Trató de desviar el tema de conversación.
—Eso no se pregunta hombre.
Mina dejó la canasta en el piso para que Félix se la ayudará a llevar, estaba pesada porque iba llena de botellas de cerveza.
—Va a la barra. Antes estoy haciendo tu trabajo, Hyunjin esta demasiado ocupado deslumbrando a los últimos clientes. Deberías estar allá...
—Ya, lo captó. Solo fui al baño, ya sabes, por el calor.
—Interesante. Mejor muévete con eso. Y por cierto, te queda bien el cambio.
Mina regresó a la cocina mientras Félix tomó una larga bocanada de aire antes de llegar a enfrentarse nuevamente a Hyunjin.
Por lo menos el demonio tentador estaba realmente ocupado atendiendo a un grupo que se había reunido en la barra, así que pudo poner las cervezas en el refrigerador, estarían bien frías para el día siguiente al menos.
—Dos cervezas —Le indicó un hombre ya algo borracho cuando llegó a la barra.
Félix las sirvió lo más rápido que pudo, el tipo no tenía cara de ser muy amigable o al menos no muy paciente.
Sin cruzar alguna mirada o palabra con Hyunjin, terminó atendiendo a cuatro clientes más. Durante ese tiempo pensó mucho en lo que le había dicho el demonio hacerca de Yina, no había admitido que le había dicho algo para se fuera, pero si lo había insinuado, eso quería decir que las probabilidades eran de un noventainueve por ciento.
A las once en punto recibió el mensaje de Chris diciendo que ya estaba afuera, y que si Hyunjin se iba a ir con ellos a casa que le dijera. Félix maldicio antes de acercarse al demonio que estaba terminando de guardar las copas.
—¿Vendras a casa? —Preguntó algo nervioso. Ni siquiera él sabia porque se sentía así. Si antes incluso le había pegado un puñetazo al idiota que tenía enfrente.
—¿Quieres que vaya?.
Según parecía, su actividad favorita era responder preguntas con más preguntas.
—Es decisión tuya.
—¿Estas enojado? —Félix quizo golpearlo nuevamente por preguntar tantas estupideces.
—No —Afirmó más seguro.
—Esta bien, entonces vamos.
Hyunjin le dio la vuelta a la barra y atravesó el bar, se despidió con gracia de Min Yae y Mina, Félix lo imitó resignado.
Al salir a la calle lo recibió un fuerte viento, luego Christofer haciéndoles señas desde la esquina.
—¿Subes adelante? —Le preguntó Chris a Félix.
—No, hoy prefiero el asiento de atrás.
Sin vacilar mucho abrió la puerta y se subió al auto. Hyunjin tomó el puesto del copiloto.
—Me alegra que vuelvas a la casa, se siente muy solo —Comenzó a decir Chris una vez arrancaton.
Félix se desinteresó del resto de la conversación, no tenía cabeza para nada, todo su mundo daba vueltas, si no era Hyunjin, tenía que ser Hyunjin, y podía ser Hyunjin, no había otro responsable de su decadencia más que aquel demonio.
ESTÁS LEYENDO
My Demon - 𝐻𝑦𝑢𝑛𝑙𝑖𝑥
FanfictionCuando Félix, un chico apasionado por la cocina, encuentra una antigua receta en un feo y viejo libro, jamás pudo imaginar que terminaría invocando al propio príncipe de las tinieblas en su cocina. Tampoco imaginó que podría invitarlo a cenar, inic...