¡Enid ya duérmete! [G!P]

Quarente troix

Sugerencia: escuchen una canción horny cuando vean este símbolo: ❤️‍🔥

Finalmente había llegado el tan esperado sábado.

La noche en que Ajax y Xavier abren las puertas de su apartamento para dar la mejor fiesta de sus vidas. Nadie sabe qué pasará, pero todos sabemos que será inolvidable.

La noche en que cualquier cosa puede suceder, y usualmente sucede. Corazones rotos, parejas nuevas, chismes que salen a la luz... nada es seguro, excepto que será una noche que recordaremos por siempre.

Y esta noche no es la excepción. Puedo sentir la electricidad en el aire.

Es mi oportunidad para hacer todo lo que llevo esperando desde que llegué a Nervermore.

M: Hola mi linda princesa.
M: ¿Que haces?

E: Comprando ropaaa
E: Amo comprar ropa

M: ¿Para lo de esta noche?

E: No, pero vi unos tops que ya tenía, pero en ese color no.

M: Y para esta noche?

E: En realidad no se si iremos

M: Oh vamos, será divertido, es lo que necesitan tú y el...ella... bueno tu sabueso, tráelo, no pueden perdérselo!!

E: Es queeee
E: Aún no se que ponerme
E: No quiero verme mal

M: Mon amour, pero si eres tú quien hace lucir bien la ropa. No es más que un trapo hasta que la pones en ti.

M: Te ves hermosa en todo

E: Bastaaa

M: Porque no te pones esa falda negra que te queda tan bien?

E: jajaja
E: Awww en serio crees que voy a ponerme eso para ti?

M: Bueno, al menos lo intenté

Llegué al apartamento de Ajax y Xavier, y pude sentir la energía de la noche en el aire. La música ya sonaba, y las luces estaban bajas, esto sería emocionante.

Me encanta esta sensación, la sensación de que cualquier cosa puede suceder.

Entré en la cocina, donde Ajax y Xavier estaban preparando bebidas y riendo con los demás. Me sonrieron al verme, y les devolví la sonrisa.

—Hey, ¿que tal pasivos? —Salude a cada uno

—Mejor eso que nada, Merlina—. respondió Ajax. Reí, tenia razón. —¿Y tú?

—Lista para la noche, hoy no se me escapará esa rubia.—dije, sonriendo.

A lo lejos Yoko estaba encima de Divina, rogándole algo, Arvel parecía estar calmando a Yoko desde un rincón.

Me enfadé un poco al verlo, pero no quería arruinar la noche.

Enid entró en la cocina, yo la miré y sonreí.

Me acerqué a ella, no pude evitar sonreír al ver lo que llevaba puesto. La falda que le había propuesto. Me sentí emocionada y nerviosa al mismo tiempo cuando la tuve cerca.

—Hey, ¿cómo estás? —pregunte, intentando parecer casual.

Se volvió hacia mí, y sonrió ampliamente. Sus pupilas se dilataron al verme.

—Bien, supongo. — la diferencia de altura era muy obvia, su cabeza inclinada para mirarme me parecía tierno.

El brillo en sus ojos estaba derritiéndome.