Lo que no ves de mí - Juantin

24. Mar en calma

Juanjo miró a aquel hombre con cara de pocos amigos y tragó saliva pesadamente mientras se apretaba el cinturón de su traje marrón. Necesitó toda la calma y la sangre fría del mundo para no echarse encima del periodista y partirle la cara, ya no solo por lo que había insinuado sino por la forma en la que habló de Martin "ese bailarín que se cree cantante" había dicho con un tinte de ironía en su voz y fue suficiente para que Juanjo perdiera los estribos.

—Nada de lo que se ha hablado por ahí es cierto. No entiendo la necesidad de meterse en la vida privada de la gente para repartir comentarios hirientes completamente injustificados. Él y yo solo somos amigos, todo el mundo sabe quién es mi pareja y me parece toda una falta de respeto hacia nosotros y especialmente hacia Martin hablar y especular sobre su identidad sexual o su vida privada.

—Pero tras aquella foto de Magallón y algunos vídeos de los conciertos...

—Ya he dicho todo lo que tenía que decir. Creo que tanto Sofía como Martin o yo hacemos cosas mucho más importantes por las que interesarse—dijo con tono duro antes de que aquel periodista del tres al cuarto pudiese terminar la frase.

—Toda la razón, ¿qué nos puedes contar del single? ¿Es cierto que no está dedicado a Sofía?

En ese momento Juanjo quiso tirarse de los pelos, el periodista ya no sabía ni que hacer por conseguir una exclusiva. De nada serviría seguir hablando con él, todo lo llevaría al mismo terreno.

—No. Sofía es un apoyo incondicional en mi vida, pero además del amor tengo otras muchas cosas que contar.

La cola de la alfombra no avanzaba y Juanjo quería desesperadamente hacer desaparecer a aquel hombre que se encontraba grabándole en directo para algún programa de cotilleos de la televisión. En ese momento vislumbró justo detrás de él a Denna quien acababa de llegar junto con Alex y se excusó de la forma más amable que pudo para acercarse a la pareja.

—Denna, aquí por favor—gritó el periodista siguiendo los pasos del maño. Juanjo quiso advertirle, pero de pronto fue demasiado tarde porque la rubia se había volteado hacia este y le observaba con una sonrisa inocente.

—Menudo hijo de puta—soltó Denna en un susurro mientras tomaba en cada brazo a Alex y Juanjo. Habrían estado hablando con aquel desagradable hombre un total de cinco minutos hasta que se pudieron escaquear, pero para Juanjo fueron los cinco minutos más tediosos de su vida.

—Lleva acosándome un buen rato, te intenté avisar pero te adelantaste.

—Bueno el mal trago ya ha pasado, ahora a ver la película para la que nos hemos puesto tan guapos—le respondió Alex ofreciéndola una sonrisa tranquilizadora.

El evento en sí no estuvo mal. A Juanjo le costaba creer que realmente le invitasen a aquellas cosas, parecía que su vida era una película. Aun así perdió la cuenta de veces en las que personas que acababa de conocer trataban de acercarse a él. Supuso que buscaban algún reconocimiento por parte del cantante para aprovechar el tirón que el programa le había dado. Otros muchos, en un intento de ser majos e interesarse por su vida le habían preguntado por su supuesta pareja y porqué no había asistido a la premier. Fue por ello, que en la fiesta de después no se despegó de Alex y Denna, quienes debían estar pasando por una situación similar. Agradeció profundamente haber coincidido con ellos y no tener que lidiar con ser perfecto con todo el mundo, mientras cientos de ojos le observaban.

—Te tengo que enseñar una cosa —le dijo a su amiga cuando por fin pudo hablar con ella asolas.

Se encontraban en el cóctel que habían organizado después de ver la película y el ambiente se había relajado considerablemente. Denna observó a Juanjo esperando a que siguiese hablando mientras se tomaba su copa.