EL SIRVIENTE DEL COCODRILO

-24-

-Perfecto.

Taekjoo mostró una sonrisa. Estaba en el baño con un frasco y unas pastillas, este las guardo en un lugar seguro. Zhenya se lo había traído en su regreso de la isla. Taekjoo le había pedido que le trajera unas pastillas y un frasco.

'Me faltan mas cosas para hacer la bomba. Tendré que pedírselo poco a poco las cosas... tengo que hacer una bomba casera, una bomba casera muy peligrosa'

Taekjoo salió del baño, pero antes se mojó la cara para simular que se había adentrado al baño para lavarse el rostro. Cuando salió, se encontró al ruso guardando una cosa en un cajón. Cajón que zhenya jamás utilizaba para guardar algo. Taekjoo dividió ignóralo, se dirigió hacia la cama para acostarse. Zhenya salió de la habitación cuando este se acostó. El moreno miró a zhenya irse con sorpresa, no se esperaba que el ruso se fuera de la habitación. Taekjoo tenía la costumbre de que zhenya se acostara a su lado cuando este se acostaba primero.

'¿Por qué se va?'

Taekjoo no planeaba seguirlo, decidió dormirse pero sintió una punzada de curiosidad hacia el objeto que zhenya guardó en el cajón. Se levantó y se dirigió hacia el cajón, se iba a quitar la curiosidad. El cajón no tenía seguro así que no iba hacer problema en abrirlo. Los ojos de taekjoo se agrandaron al igual que su boca. Adentro del cajón estaban las llaves del helicóptero de zhenya. Era un día de buena suerte. El moreno iba a tomar las llaves sin dudarlo pero detuvo su mano que estaba apunto de agarrar las llaves del helicóptero.

'Es una trampa'

Taekjoo notó rápidamente que era una trampa. Zhenya jamás dejaba las llaves, siempre las tenia o las dejaba en una parte donde el jamás podría encontrarlas. El jamás las dejaría en un lugar fácil de encontrar. Desde que esta en la isla, siempre intentó encontrar las llaves cuando zhenya no la traía, pero jamás las encontraba. Taekjoo dirigió su mirada hacia la puerta donde zhenya salió.

Zhenya miraba la puerta fijamente. Su rostro mostraba diversión. Sus ojos se agradaron lentamente mientras que a la vez se le formaba un arco en los labios. Entro a la habitación después de unos minutos. Taekjoo se encontraba acostado en la cama, le daba la espalda. Zhenya se acerco a la cama para luego subirle en ella y acostarse, apegó su cuerpo a la espalda del moreno.

-¿Por qué te haces el dormido?

-...

Zhenya apegó su rostro en el cuello de este, empezó a besarlo lentamente ahí mismo mientras que a la vez pasaba su mano por todo el torso de este. Taekjoo frunció el ceño, apretó su mandíbula con fuerza. Las acaricias se detuvieron pero los besos no. Taekjoo soltó un suspiro bajo de alivio, sus ojos se abrieron rápidamente al sentir como una mano le agarraba su pene que se encontraba flácido. Zhenya soltó una risa mientras apretaba un poco su agarre.

-¡¿Qué mierda heces?!, suéltame bastardo.

-Hoy toca ordeñarte.

Zhenya subió un poco su mano, con su pulgar apretó la parte superior del pene. Taekjoo empezó a temblar, soltó un jadeo al sentir la presión en la parte superior de su verga. El pene de Taekjoo se empezó a ponerse duro lentamente. Zhenya mostró una sonrisa de satisfacción al ver la reacción que estaba provocando en Taekjoo, empezó a masturbarlo. Por cada minuto, su ritmo de movimiento de mano aumentaba. La vista de taekjoo se empezó a tornarse nublada, los dedos de sus pies se retorcían, su cadera se movían de adelante y por atrás por culpa de las expansiones de placer que sentía en su pene.

-¡Aah!, ah... basta...

-Taekjoo.

Zhenya mordió el cuello de este con fuerza. Taekjoo llegó a su límite. Se corrio en la mano del ruso con fuerza, su cabeza se hizo para atrás mientras que sus piernas se estiraron por el orgasmo. Zhenya levantó su mano para mirarla, estaba cubierta de semen.

-Ja, no duraste nada.

-B-Bastardo...

Taekjoo fue girado boca abajo en la cama, sus pantalones quedaron hasta las rodillas y su culo estaba en el aire. Zhenya con sus dos manos abrió el trasero para dejar a la vista el agujero del moreno. Taekjoo se estremeció al sentir como su culo era abierto. Zhenya tomó las caderas de este para que estuviera cerca de su rostro. Pasó su lengua en el agujero de taekjoo.

-¡¿Me estás lamiendo el agujero?!

-¿tu que crees?

Zhenya rio mientras empezaba a lamer y chupar el agujeros del moreno con desesperación. Taekjoo se ruborizo, su cuerpo se tenso por completo.

-¡No!

•

•

•

-Pareces perro en celo.

Zhenya soltó una carcajada por el comentario de taekjoo hacia el. Taekjoo se encontraba acostado en el torso de zhenya. No estaba acostado ahí por voluntad propia pero no se quejaba. Este miraba a zhenya con enojo, acercó su mano hacia la mejilla de zhenya para luego jalarle una mejilla con fuerza. Zhenya se dejó jalar la mejilla, este se le hacía muy divertido. Su mirada se dirigió hacia el cajón donde se encontraban las llaves del helicóptero.

-¿Las agarraste?

-No.

-¿Por que?, pensé que te querías ir de aquí.

-...

Taekjoo se quedó en silencio. Ocultó su rostro en le pecho del ruso, tomó aire para hablar.

-No te quiero abandonar.

-¿Enserio?

-Si.

Zhenya mostró una sonrisa de alegría al escuchar las palabras del moreno sobre no querer abandonarlo. Todavía no le tenía 100% de confianza hasta ahora. Por esas palabras y ver que no agarró las llaves del helicóptero que el mismo dejó, hizo que zhenya empezara a sentir más emociones que nunca había sentido. Taekjoo dejó de ocultar su rostro.

-¿No me dejarás?

-Jamás.

-Entonces promételo... prométeme que jamás me abandonarás.

-Lo prometo... lo prometo con mi vida Evgeny.

Los dos hombres se miraban fijamente. Taekjoo se levantó un poco, agarró el rostro de Zhenya con cuidado para luego plantarle un beso en los labios con suavidad. Zhenya abrazó la cintura del moreno, mientras cerraba sus ojos y correspondía el beso. Taekjoo era el único de los dos que pertenecía con los ojos abiertos.

'Que idiota'

Continuara.

Una disculpa por las faltas de ortografía. 🙇‍♀️