-19-

1.7K 191 69
                                    


-¿Qué haces?.

-Estoy arreglando la lavadora.

Olga miraba al moreno arreglar la lavadora. Este golpeó la lavadora que hizo que esta prendiera y empezara a funcionar. Taekjoo se sacudió la ropa.

-El golpe siempre funciona.

Olga miró a Taekjoo para luego mirar la lavador. El ruido de la lavadora se convino con los ruidos de hélices de un helicóptero. Zhenya llegó a la isla. Taekjoo y Olga se miraron con sorpresa.

-!¿Ya volvió?!. ¡no pude disfrutar su ausencia!.

Olga se tomó la cabeza con fastidio. Olga y Taekjoo caminaron hacia la sala. Los sonidos de las hélices del helicóptero se detuvieron, ahora pisadas se empezaron a escuchar. Zhenya entró al hogar con una expresión tranquila, pero su expresión cambió a una de enojo.

-¿Qué haces aquí?.

Fue lo primero que dijo zhenya cuando vio a su hermana en la sala. Olga, ya acostumbrada, solo lo miró con tranquilidad.

-Vengo a reposar en esta isla.

-¿Con permiso de quien?.

-Con mi permiso.

Olga cruzó los brazos para luego irse hacia la habitación que se hospedaba. Zhenya no quitó la mirada en su hermana, la dejó de mirar cuando desapareció de su vista. Su mirada furiosa se dirigió hacia taekjoo.

-¿Cuando llegó esa cosa?.

-Ayer.

Zhenya frunció más el ceño. Le lanzó al moreno una bolsa con comida. Taekjoo tomó la bolsa antes de que cayera al suelo.

-¿Limpiaste?.

-Si.

-¿sábanas limpias?.

-limpias.

Zhenya asintió con la cabeza para luego acercarse al moreno, lo agarró de la cintura para apegarlo a su cuerpo. Taekjoo se sorprendió pero se dejó, no era el momento adecuado de alejarse cuando zhenya estaba enojado. Zhenya acercó su nariz hacia el cuello del moreno, empezó a olerlo y besarlo ahí mismo. Taekjoo soltó un quejido de la sorpresa.

-No hagas eso.

Zhenya lo morido por le cuello, moví sus manos hacia su trasero para acariciar las mejillas con fuerza. Taekjoo se ruborizó por el agarre de su trasero. Este ya no le importó si Zhenya estaba enojado. Taekjoo lo intentó empujar pero el agarre del ruso se hacía mas fuerte.

-Taekjoo.

Dijo el nombre de este mientras seguía besándolo por el cuello. Taekjoo arrugaba su frente con asco, esto era algo nuevo en zhenya de dar beso en el cuello. Este pudo lograr separarlo de su cuello.

-No hagas eso y menos aquí.

-¿Por qué?... ¿Por qué está esa cosa aquí?.

-Es lo más obvio. Te pido que no hagas eso o por menos hazlo cuando estemos en la habitación.

-...

Zhenya lo miró en silencio. Taekjoo lo miró fijamente pero desvió su mirada hacia atrás al notar que zhenya lo soltó de su trasero. Un suspiro de alivio salió en sus labios.

EL SIRVIENTE DEL COCODRILODonde viven las historias. Descúbrelo ahora