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-Basta Idiota.

Taekjoo ocultaba su rostro en una almohada para contentar sus gemidos. Zhenya se encontraba levantó el trasero de taekjoo hacia su rostro, este estaba chupando y lamiendo la entrada arrugada de taekjoo. La sensación era desagradable y rara para el moreno. Taekjoo apretaba las sábanas con fuerza mientras soportaba la sensación que estaba sucediendo su entrada. De un momento la sensación desapareció.

-Eres un asqueroso.

Taekjoo fue volteado bruscamente, ahora el moreno se encontraba boca arriba. Miradas chocaron entre los dos hombres.

-Hagamos una apuesta, Taekjoo.

-¿Ahora?.

-Si, si ganas te daré las llaves del helicóptero pero si pierdes, me darás un deseo.

-¡Acepto la apuesta!.

Taekjoo mostró una sonrisa confiada, este tenía confianza que iba ganar esta vez. Pensaba que la apuesta iba hacer algo deportivo. Que equivocado estaba. Zhenya rio, agarró su grande erección para luego juntarla con la verga de taekjoo. Las dos vergas de los hombres se encontraba juntas gracias a que zhenya las juntaba con su gran mano.

-El que se corra primero, pierde.

Taekjoo miró a zhenya con sorpresa. Iba a hablar pero detuvo en seco al sentir como zhenya empezaba a frotar su verga junto a la suya. Los dos hombres empezaron a jadear por culpa de la sensación de la frotación.

-¡Hah, Ah!... No.

-¿Quieres que me detenga?, Entonces Se va significar que yo gané.

Zhenya sonreía pero en esa sonrisa tenía una pizca de burla, siguió con su frotación pero ahora la frotación era violenta. Taekjoo frunció el ceño mientras lo miraba, agarró a zhenya de los hombros para luego clavarles las uñas. Se estaba concentrado para no correrse. Zhenya apretaba las dos vergas para juntarlas más y sentir más placer. Taekjoo no podía contener sus gemidos que salían de su boca, Era algo placentero para su cuerpo pero para él era asqueroso. Empezó a temblar al sentir que el ritmo aumentaba.

-Aguanta más zainka.

-Mierda.

Al final taekjoo llegó a su límite. Su pecho y el pecho de zhenya se derramó del semen del moreno. Zhenya se rio al ver como taekjoo temblaba después de correrse.

-Perdiste.

Taekjoo miró con enojo a zhenya. Había perdido de nuevo.












-¿De nuevo estoy teniendo este sueño?.

Taekjoo se miró sus pequeñas manos. Ahora era consciente que estaba soñando que la última vez. Su hermano que se encontraba vivo en ese momento en su sueño, lo llamaba con mucha asistencia hacia él para jugar a los columpios. Se estaba repitiendo el sueño. Iba ir hacia su hermano pero se detuvo al ver al niño de cabello rubio que pedía ayuda. Sus piernas empezaron a dirigirse hacia el niño.

'¿Por qué mierda voy con el?'

Taekjoo estaba confundió. Sus piernas se movían por voluntad propia. El niño lo agarró de la mano para luego aferrarse a él mientras temblaba. No podía ver el rostro del niño.

-Taekjoo.









EL SIRVIENTE DEL COCODRILODonde viven las historias. Descúbrelo ahora