Alguien toca mi puerta y veo a la mata de pelo roja asomada, Matteo entra con una bandeja de desayuno, se acerca a mi y deja la bandeja a un lado, me mira con la mirada baja.
Ya hace cuatro dias que Enrique esta en el hospital lo ultimo que supe fue que se salvó con la sangre que le done, pero Matteo ese dia, no me lastimo, tiene razón yo nunca senti esa sensacion de que mi padre se esta muriendo.
Por que no lo esta, esta vivo, en una cárcel, cada dia le pido a Dios que no lo deje salir por mucho tiempo, me lastimo y si queda libre no se si me buscara para hacerme daño o... No quiero pensar en eso.
También se que lo que dijo no lo dijo para lastimarme solo estaba en un mal momento y lo entiendo, y sé que soy dura con el a alejarme estos dias. Se sienta a mi lado y juega con mi cabello aun sin mirarme.
- A mi padre lo dan de alta hoy - Dice rompiendo el silencio - Y mi madre me llamó para invitarnos a una cena, ya que mi padre te quiere ver.
No se que decir jamás pensé que Enrique me quisiera ver, miro el desayuno a mi lado y como un poco de él, Matteo me mira y contiene una sonrisa.
- Esta bien, a que hora sera - Le digo seria siguiendo mi postura de indiferencia.
- En la noche, yo te aviso - Se intenta levantar pero no se lo permito
- Quédate tenemos que hablar - Le digo y por un momento palidece - Se que ese dia no lo dijiste de mala manera ni para herirme, solo que es un tema delicado para mi.
- Eso quiere decir que me estas perdonando ¿Verdad? - Me pregunta y veo la ilusión en su rostro.
- Algo así - Le respondo y agarro sus manos - Pero quiero... Quiero contarte la verdad - Le digo con la voz baja - Ya estoy lista para contarte... Pero no en estos momentos, te lo diré pero no de una vez - EL me toma por las mejillas pero no me da un beso en los labios si no en la punta de la nariz.
El se va y me doy un baño, me coloco un vestido de flores blancas y me siento en mi cama a esperar a mi visita, poco tiempo después y tocan la puerta de la habitación la abro y le dejo el paso para que se siente en la cama.
- Jessica ya estoy lista - Le digo y ella sonríe y noto el brillo en sus ojos - Lo he estado pensando todos estos días y se lo contare todo a Matteo y ya despues a los demás.
- Eso es un gran paso amiga - Me dice y me abraza - Cuando estés lista y lo quieras hacer, estas en todo tu derecho, y me alegra que ya estes mejor - Me da un beso en las mejillas antes de seguir hablando de cosas triviales.
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Me termino de maquillar frente al espejo, acomodo mi pelo que tiene unas ondas, aliso mi vestido esmeralda que me llega mas abajo de los muslos.
Salgo con mi bolso y veo a Matteo intentando colocarle la cadena a Lola, mi pequeña perrita esta molestando a mi novio, me acerco a ellos y le quito la cadena a el y se la coloco a mi Lola que se deja colocar por mi parte.
Salimos de el departamento con mi perrita por delante de nosotros, Matteo abre la puerta de los asientos de la parte de atrás, me voy a mi asiento de copiloto y espero que el se monte y nos ponemos en marcha para ir a casa de sus padres.
Cuando llegamos me llevo la gran sorpresa que están rodeados de guardaespaldas y demás, Matteo me comentó que su padre está con buena vigilancia para poder cuidarlos. Entramos a la casa donde Natalia es quien nos recibe.
Nos hace esperar en la sala mientras ella se va con lola a su lado, un hombre se acerca a la sala y Matteo se levanta para darle un abrazo a su padre que ya esta un poco mejor, pero sigue con cuidados especiales.
- Es un honor volver a verlos, a los dos - Nos dice sentándose frente a nosotros - Cristina, te debo la vida - Me sorprendo con sus palabras - Te debo la vida y estoy muy agradecido por eso - Se levanta y busca algo en los cajones de la cómoda a su lado - Te devuelvo el pase del club - Me lo da y me lo quedo mirando un buen tiempo - Y con todo el corazón, te pido una disculpa, que me perdones por la forma en que te trate esa vez y tienes toda la autorizacion para entrar a la empresa y a donde tu quieras.
No se que decir, le doy las gracias y guardo el pase en mi bolso, también le pide disculpas a Matteo y quedaron en que el iba a volver a la empresa. Natalia se nos une y nos pide que pasaramos a comer.
Nos sentamos en la mesa y empezamos a comer, todos en silencio y de pronto Enrique toma la palabra con un tema que nadie se esperaba.
- Como sabrán, he aumentado la seguridad en las empresas y en la casa. Me tomé el atrevimiento en poner guardias cerca de su piso y van atras de ustedes cuidándolos -
Matteo suelta su cuchara y mira a su padre - Les digo para que estan al tanto. Pero es mejor que sepan que los cuidan por que pueden atacarlos a ustedes.
Aceptamos la propuesta de que tengamos guardaespaldas para estar mas seguros, ya que todavía hay policías investigando quienes provocaron el ataque. Nos quedamos un buen tiempo mas hablando con ellos.
Mientras que Matteo y su padre hablaban de cosas de la empresa, mientras que Natalia y yo hablamos de seguir tomando las fotos que faltan con Andrea, para hacer el lanzamiento de la linea de ropa.
Ya nos faltan muy pocas fotos, y luego de eso van a ver entrevistas y otras cosas para que la linea de ropa sea todo un exito.
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BALLERINA
Teen Fiction¿Comprarías al amor de tu vida? El amor es algo que no tiene precio, pero para algunas puede que sí. El amor que Matteo y Cristina puede que tenga precio, ya sea el dinero o la vida. Pero tengo una pregunta para ti lector: ¿Te enamorarías de una "C...
