46- Fin del trato

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Decisiones, la vida esta llena de ellas, buenas o malas, pero siempre tienes que tomar una decisión.

Me muevo en la cama algo incomoda por el vacío que se siente en ella, tome la decisión de dormir alejada de Matteo la noche anterior, me molesta todo lo que me dijo.

Y no solo con el, también con Jessica, ella mas que nadie sabia mi miedo a ser tratada como alguien débil, alguien que no puede ver por si misma, pero se equivoca. Ella no tenia que ir a hablar con Matteo sobre la libertad de mi padre, no tenían que crear el collar, muy bien podían decírmelo.

¿Por que pensaron que no me hubiera alejado ahora? Ahora que estuve frente al peligro, peligro que hubiera prevenido de haber sabido... En fin.

Me levanto y me doy una ducha, me coloco una camisa manga larga de color negro, un pantalón holgado cómodo, me recojo el pelo en una coleta alta, y salgo de la habitación.

Al llegar al comedor encuentro a Natalia, Enrique, Sol y todos los demás, Jessica estaba en una esquina del comedor, con un pañuelo en la mano y los ojos rojos, se levanta a penas me ve entrar en la cocina, se intenta acercar a mi pero me muevo rápido y me siento al lado de Sol.

-Cristina por favor...- Habla pero se calla al ver que la pienso ignorar.

- Jess, lo mejor es que le des un tiempo para que piense bien las cosas - Habla Gabriel intentando detenerla, pero no lo logra.

- No Gabriel, no. Cristina escúchame por favor, tienes que hacerlo - Pide sorbiendo por la nariz intentando frenar su llanto.

- ¿Tengo? No tengo por que, sabes, tienes razón, me quiero alejar, pero no de todos, si no de ti - Le respondo sin controlar el modo cortante de mi voz. Todos me ven expectante a lo que diré, pero mas ella.

- ¿De mi? ¿Y que hay de Matteo? ¿De el no te vas a alejar? El también tubo demasiado que ver en todo el tema del collar - Habla alto señalando a Matteo que esta al lado de sus padres.

- Y lo hice, ¿O que te parece? No me senté al lado de el, no lo he saludado, ni tampoco dormí en la misma cama que el durmió. Pero no tienes razón en algo, el no tiene la culpa, la gran parte de la culpa la tienes tu - Me levanto y la señalo con mi dedo índice - Tu, por que tu sabias que mi padre, Federico estaba libre, y fuiste la que se negó en que me dijeran la verdad, Matteo no sabe de mis miedo como lo sabes tu, y bien que los conoces y los usaste en mi contra - Termino de hablar y veo como se rompe a llorar, Gabriel la abraza y la sienta a su lado - No tengo hambre, buen provecho.

Dije esto ultimo y salí de la cabaña al lago, me senté en una roca a mirar al mas allá, en este momento no quiero estar con nadie, ni hablar con alguien.

Se que fui dura con ella, se que no reaccione como todos esperaban, pero me canse, me canse de ser siempre la suave, que siempre comprende a todos, que siempre escucha a todos y no los critica, quiero que por un minuto sea yo la comprendida.

No se en que momento las lagrimas empezaron a salir, hasta que me rompí en dos, todo lo que pase, todo lo que me dijeron, todo ese peso cae en mis hombros y no puedo hacer mas que llorar.

- Sabes que ella te quiere ¿Verdad? - Escucho una voz a mi espalda, me giro para conseguir a Gabriel ahí parado.

- Ella te mando ¿No es así? - Le pregunto mirando al frente.

- No. Se que parece que si, pero no. - Responde sentándose a mi lado - No voy apoyarla en esa decisión que tomo, yo se lo dije estando en Sevilla cuando tuve la oportunidad de hacerlo. Le dije también que así mismo como ella me había perdonado que la halla sedado para que no quisiera ir con nosotros a buscarte - Confiesa y lo miro con los ojos abiertos, a lo que el se ríe - Si, también sede a Sol, y Matías casi me corta la cabeza.

- Eso no lo sabia - Confieso riéndome bajito.

- hace dos días cuando Natalia la llamo, ella estaba en la cafetería, yo estaba con ella visitándola entes de volver a la empresa - Sus mejillas se sonrojan y se ve tierno - Pensé que se desmayaría cuando le dijeron que paso algo contigo, todo el viaje paso haciéndose preguntas sobre que te había pasado. Cuando Jon le conto, me confeso que se arrepentía de no decirte la verdad, me dolió verla en ese estado, llorando desesperada por que tu no estabas a su lado.

No respondo, por que no se que responder frente a todo lo que me acaba de confesar.

- Se que es difícil asimilarlo, pero ella tubo miedo, por tu reacción y no creo que se merezca que la ignores, ni que rechaces lo que ella te va a decir. Pero todo queda de parte tuya y tu decisión - Se levanta y vuelve a la cabaña.

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Volví a entrar a la cabaña luego de alrededor una hora mas o menos, en la cocina solo se encuentra Natalia y Enrique hablando entre ellos, con Lola descansando entre sus pies. Subo al segundo piso y paso por la habitación donde duermen Thomas y Santiago, después están David, Matías y Gabriel, y luego donde están las chicas, Jessica esta sentada en medio de una cama mientras Andrea le soba la espalda.

Paso a sentarme con ellas, y en esas horas nos confesamos todo lo que nos teníamos que confesar, todo lo que teníamos que decir, y nos perdonamos. Con Jessica deje que me explicara todo su punto de vista, y bien no es que perdone todo por completo solo di una segunda oportunidad a cambiar sus errores. 

Luego de comer todos en la mesa, mientras reímos de cosas innecesarias, Matías se rie cuando avergüenza a David y este le da un golpe en la espalda por el comentario.

En la noche me pongo mi pijama dispuesta para irme a dormir cuando alguien toca mi puerta, abro y veo a Matteo, lo raro tiene los ojos rojos.

- ¿Puedo... puedo pasar? - Pregunta con la mirada puesta en sus pies como si fuera lo mas curioso de la vida.

- Claro - le deje pasar.

No me había dado cuenta que llevaba una caja entre sus manos, se sentó en la esquina de la cama.

- Quería decirte que hoy ya se acaba el trato, ya hoy se acaban los cuatro meses - Dice algo nervioso - Solo venia a traerte esta caja con cosas que guarde - Me entrega la caja y la abro.

Dentro de ella estaban un montón de fotos de los dos, el día que me pidió ser su novia, nuestras citas, en la pijamada, las secciones de fotos y cada momento que pasamos juntos.

- Le pedí a Carolina que me diera las fotos en físico - me dice señalando las fotos  - Bueno eso era todo, cuando volvamos a Madrid me pongo a buscar un piso para ti y las chicas o si te quieres quedar en el piso no tengo ningún problema yo busco otro - Habla y se levanta para irse con una lagrima rodando en su mejilla.

Le agarro la mano, y lo freno, pongo la caja en la cama y le tomo las manos. 

- No me dejaste hablar, se acabo el trato pero bien recuerdo si no lograbas enamorarme me dejabas en paz - Parece pensarlo y asiente - ¿Quién te dijo que no me enamoraste? - Pregunto con una sonrisa pasando mis manos por su cuello.

- Eso quiere decir que no me dejaras - Hace un puchero que se ve adorable

Rompo el espacio que quedaba entre nosotros uniendo nuestros labios en un beso que marca un nuevo comienzo , sin un trato por medio.

- Entonces es el fin del trato - Dice y vuelve a unir nuestros labios.

                                                                                                                                                                                                                                                                                 

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