CAP 18

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∆POV JENNIE

Las lágrimas no dejaban de caer mientras caminaba hacia el baño, sin importarme si alguien me veía. No podía creer lo que acababa de pasar en la cafetería. La humillación que sentí cuando Leo me hizo esa escena frente a todos me estaba devorando por dentro. Sentía que no podía respirar, que el aire se me escapaba mientras mis amigas trataban de consolarme, pero todo era en vano.

-Jennie, estás bien, ¿verdad?- Karina preguntó con preocupación mientras me ayudaba a sentarme en un rincón apartado del baño. -Fue horrible, pero estamos aquí contigo.

-Sí, solo... necesito un momento sola,- dije, secándome las lágrimas y tratando de calmarme. Las chicas se miraron entre sí, pero entendieron que necesitaba tiempo a solas. Se fueron, aunque no antes de abrazarme una vez más, dejándome con mis pensamientos y el dolor persistente.

Me quedé allí sentada, apoyada contra la pared del baño, recordando cada palabra cruel que Leo me había dicho. La forma en que me había humillado frente a todos, el dolor en sus palabras, y la manera en que mi corazón se rompía cada vez que pensaba en lo que una vez significó para él. El hecho de que me hubiera tratado así me hizo sentir como si todo lo que había construido en mi vida aquí hubiera sido en vano.

Mientras intentaba calmarme, escuché un suave toque en la puerta del baño. Miré con desconfianza, pero cuando vi la figura de Kai asomarse, mi corazón dio un vuelco. No estaba segura de cómo me sentía en este momento; la confusión, el dolor y la traición estaban mezclados en una maraña de emociones.

-¿Jennie?- Kai preguntó suavemente. No podía entender cómo, después de todo lo que pasó entre nosotros, él aún parecía estar ahí para mí.

-Déjame sola- dije, tratando de sonar firme, aunque mi voz temblaba.

Kai no hizo caso a mi ruego y entró al baño, cerrando la puerta detrás de él. Se acercó con pasos decididos, y me sentí conflictuada. Parte de mí deseaba su compañía, mientras que otra parte me recordaba lo mal que terminó nuestra historia.

-Lo siento- dijo Kai, su voz sonando sincera pero con un matiz de frustración. -No debí haberme metido, pero vi todo desde la puerta. Leo no tenía derecho a hacer eso.

Me volví hacia él, sintiendo cómo la rabia y el dolor se mezclaban en mi pecho. -¿Y tú qué sabes de lo que pasó?- le respondí, mi voz saliendo con un tono ácido. -Después de todo, tú también me hiciste daño.-

Kai bajó la mirada, asintiendo lentamente. -Lo sé, y me arrepiento de ello. Pero eso no cambia el hecho de que lo que Leo te hizo hoy fue horrible. Yo te quería a mi lado, pero nunca te haría algo así. Me dolió verte sufrir.

-¿Y qué quieres que haga?- pregunté, frustrada. -Tú me diste una bofetada, me humillaste también. ¿Cómo puedes decir que no te gustaría verme sufrir después de lo que hiciste?

-Porque lo que pasó entre nosotros fue una historia del pasado- dijo Kai, acercándose un poco más. -Lo que siento ahora es que quiero verte feliz. Quiero que sepas que, aunque haya sido una parte de tu dolor, no soy como Leo. No hubiera sido tan cruel.

No sabía si sus palabras eran sinceras o si simplemente intentaba recuperar el terreno perdido. Sin embargo, algo en su mirada me hizo cuestionar mis propios sentimientos. La verdad era que en este momento, no tenía a nadie más a quien recurrir.

-¿Y qué harás ahora?- le pregunté, intentando mantener la compostura. -¿Qué puedes hacer para cambiar lo que pasó?

Kai se inclinó hacia mí, sus ojos fijos en los míos. - Puedo estar aquí para ti ahora, si eso es lo que necesitas. Si quieres hablar, si necesitas un hombro para llorar, aquí estoy. Y en cuanto a Leo, voy a hacer todo lo posible para que se dé cuenta de lo que realmente hizo y para que pague por ello.

EL AMOR QUE NO QUERIA (JENLIM)-(JENLISA)-(GIP)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora