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Megumi despertó por segunda vez en el día, la diferencia es que ahora se sentía limpio y fresco, llevaba su ropa interior y un buzo que olía a itadori.

Se aferró a la ropa y trató de inhalar todo el aroma posible como si fuese a desaparecer un día. Se sentó en la cama, buscando su teléfono en la mesita de luz para ver la hora; seis trece de la tarde, había dormido tres horas.

Se puso de pie y caminó hasta la cocina en busca del alfa, después de todo lo que pasó lo único que quería era quedarse pegado al chico como koala.

— hola lindo, despertaste — el omega asintió y vió al pelirosa estar buscando algo en el catálogo de netflix, este abrió sus brazos en llamado de un abrazo y el menor obviamente no se negó, terminando nuevamente sentado sobre su regazo.

— te extrañaba — dijo acariciando la nuca de yuuji mientras enterraba su cabeza en las glándulas de olor del alfa, sintiendo como el mayor hacia lo mismo. El pelirosa soltó una risita.

— hace un rato estuvimos juntos — megumi miró a los ojos avellana del chico y dejó un pico en sus labios antes de volver a acomodarse en su anterior posición. — estás muy mimoso — dijo dando caricias por toda la espalda del chico, desde su nuca hasta su espalda baja donde se encontraba el borde del buzo amarillo que llevaba puesto.

— como dije — habló de nuevo. — te extrañaba — recalcó y se volvió a acomodar sobre el alfa, casi como tratando de que se derritieran en ese abrazo

itadori volvió a reir y ahora con una mano libre siguió buscando en la tele alguna serie o película para ver. — ¿te gustaria ver una peli? — pregunta mientras lee el resumen de una de ellas que le había llamado la atención, sin embargo, la sacó y siguió deslizando en busca de otras opciones.

megumi asintió y ahora se dió la vuelta pegando su espalda al pecho del pelirosa para también ver la televisión. Ve como el otro pone una película llamada "CLOSE".

No llegó a leer el resumen pero cree que puede llegar a gustarle, yuuji acomoda el volumen y siente sus brazos rodear su cuerpo en un tierno abrazo, el video carga y el sonido de las voces empiezan.

Dando inicio a la cinta.

El omega sabe que no es como todas las personas, en cambio, sabe perfectamente todo lo q le diferencia de lo demás. Una de esas cosas era que nunca terminaba de entender que es lo que sentía realmente.

En la película había un adolescente llamado Leo, megumi no entiende por qué siente un sentimiento de entendimiento hacia el personaje ficticio. Su cuerpo recorre un escalofrío y siente a itadori atraer una manta hacia ellos tapando sus piernas. Luego siente un beso de este en su nuca pero no puede reaccionar.

Su mente se encuentra en blanco, su corazón latiendo fuerte mientras sentía una agonía crecer en su pecho.

Leo era un personaje dentro de lo inusual, lo sentía demasiado real como para ser verdad. Ya que después de todo, ambos eran unos adolescentes que no saben como se sienten realmente.

El personaje era un chico que se alejaba de lo que le hacía bien con tal de encajar en un lugar en donde la gente pueda verlo normal, sin embargo el chico tampoco comprendía el por qué lo hacía. El omega frunció el ceño al tratar de llamar "idiota" a alguien ficticio.

Cuando yuuji lo abrazó con mas fuerza se dió cuenta de que estaba temblando, y no era del frío, ya que el ambiente estaba caluroso gracias a la calefacción del lugar. — ¿estás bien? — megumi respirando por su boca solo asintió, se sentía como si hubiera corrido una maratón.

Llegando a la parte de la excursión, megumi siente que puede comprender el dolor del chico rubio al enterarse de la pérdida de su mejor amigo. Y posible amante. El omega se permitió soltar unas lagrimas y se aferró al abrazo en el que el alfa lo sostenía. Yuuji meció el cuerpo del menor tratando de calmarlo.

El oji verde se giró sobre su cuerpo y volvió a esconder su cara en el cuello del alfa soltando otro sollozo. Esta vez ya no lloraba por la película, si no que lloraba todo aquello que no pudo hace tiempo. Liberando sus miedos, preocupaciones y agonía.

— n-no puedo ver más la película — hipó. Itadori sonrió en comprensión y lo abrazó fuerte después de poner pausa a la televisión. El aroma que soltaba megumi le hacía entender que había algo más que eso en su corazón. Sin embargo, no lo presionó. — no entiendo lo que siento — habló luego de unos minutos soltando lagrimas. Sorbió su nariz y se centró en el aroma tranquilizante del café que itadori empezó a soltar.

— ¿quieres contarme?

— yo... se que soy distinto a los demás y que en realidad ya debería saber muchas cosas de las que no sé — empezó explicando como pudo con su voz quebrada. — pero por ejemplo no sé que es estar en una relación, tampoco sé que es esa sensación de tranquilidad que me brindas, o esas mini explosiones que siento en mi estómago cada vez que agarras mi mano, me besas o me sonríes — pausó para organizar sus pensamientos. — tampoco sé que es esa sensación de enojo cuando alguien trata de alejarte de mí, o esa sensación de seguridad que me diste cuando lo hicimos, ¿por qué me haces sentir tanto? ¿por qué no entiendo mis emociones? — ahora se miraban a los ojos, megumi tenía un rastro de lagrimas que iban desde sus ojos hasta su mentón e itadori tenía un rostro sonrosado y sorprendido.

El pelirosa llevó sus manos a los ojos verdes del menor y secó sus lagrimas, luego empezó a repartirle besos por toda su cara. — me pondría triste si supiera que no te sientes así — megumi se sonrojó. — creo que no soy yo el que deba decirte esto pero lo que sientes se llama amor — el pelirosa sonrió. El otro parecía inmerso en sus pensamientos.

Amor. ¿Que era el amor? Sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser. Pero, cambiemos la pregunta.

¿Qué era el amor para megumi? Para megumi el amor eran esos días cuando era niño y junpei le enseñaba a leer un cuento. Amor eran esos días donde no se sentía bien y buscaba refugio en los brazos de su primer amigo. Amor era cuando la madre de junpei también cuidaba de él. Amor eran los besos en la frente que yuuji le daba. Amor era también sus abrazos que lo hacían sentir protegido.

Amor también eran las caricias y palabras de afirmación que el alfa le daba. Amor era Yuuji Itadori. Amor era aquel primer amigo que hizo cuando era niño. Amor eran las nuevas personas que integró en su vida.

El mundo podía tener su definición de amor, pero si a megumi le preguntaban cual era, él respondería que amor, era aquello que yuuji, y las personas que ama, le daban.

El azabache ahora si se dió la oportunidad de sonreír y abrazar al chico.

— sí, lo que siento es amor — ambos quedaron fundidos en ese abrazo que deseaban que fuera eterno.

Porque para yuuji, el amor era megumi. Y para megumi, el amor era yuuji.

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nota autora: veanse la peli q estaban viendo estos dos, yo le tengo que dar una oportunidad, aun no la vi :3

por cierto, gracias a lu por la ayuda que me está dando para realizar este fic <3 la mayoria de cosas son idea de ambas, algunas son suyas

winter flowers ; itafushiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora