CAPITULO 8

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CAPITULO 8

-Chiaro. Per me non c'e nessun problema- respondió el y luego sonrió.

-Gracias, Cameron – dijo Madison y luego me miro

-Español por favor- dije y los dos rieron.

-que si, que no hay problema-dijo mi amiga y mire a Cameron.

-¿seguro que no tienes cosas que hacer y te estoy quitando el tiempo solo por mi capricho? Por qué puedo esperar a que Madison tenga tiempo, no hay prisa, de verdad.

-No- me respondió- por mi está bien, a menos de que no quieras ir conmigo- rio.

-no, digo, si – sacudí la cabeza- quiero decir, gracias por llevarme.

- a Cameron le gusta ese lugar, seguro que está más que encantado. Él te puede dar el tour- bromeo Madison.

-Y para mi seria todo un placer- se rio el interpelado, y mostro todas las perlas blancas que forman su sonrisa, en la por un segundo, me perdí.

-gracias- dije y me gire de nuevo hacia la televisión.

Me había asustado un poco un inusual hecho, desvié completamente mi atención de mi mejor amiga y su novio a propósito, debido al pensamiento que la reacción había producido y me puse a pensar en eso. ¿Por qué encontraba a Cameron muy atractivo? Si lo era, pero lo que realmente me preguntaba era ¿Por qué todo en el causaba una extraña sensación en mí? Mire de reojo a la feliz pareja a mis espaldas, y pude ver la sonrisa de Cameron. Entonces llegue a una conclusión fácil. Esta deslumbrada por él. Por supuesto, era el joven más apuesto con el que me había topado en toda mi vida. Me reí discretamente, que suerte la de Madison.

-¿te quedas a comer?- pregunto ella, luego de un rato- ¿sabes? Con Karol se me ocurrió una idea hoy, ¿Por qué no salimos un día los cuatro? Nosotros tres y Alexis- explico ella sin esperar la respuesta de su novio a la primera pregunta.

-No, cielo, no puedo quedarme. Hoy hay cena familiar- torció el gesto- Y lo de la salida los cuatro suena excelente le comentare a Alexis hoy.

¿Debería preocuparme? Sabía que Madison ocultaba muy dentro de ella la idea de emparejarme con alguien, pero al pensar en el hecho... ¿Qué tan malo podía llegar a ser si se trataba del hermano de Cameron? Seguro también era apuesto.

-Hasta mañana, vendré a desearte buena suerte antes de que te vayas- dijo Cameron a su novia y luego beso su frente.

-Gracias, amor.

-Karol. Me gire a mirar a Cameron de nuevo al escuchar mi nombre-. Mañana tenemos muchas cosas por hacer, espero no te canses- sonrió.

De pronto sentí una emoción que no pude explicar, un ligero entusiasmo allí, cerca de donde se encontraba la fierecilla enjaulada.

-hasta mañana- dije y le devolví la sonrisa.

Madison y Cameron salieron hasta puerta donde tardaron más de cinco minutos en despedirse; trate de no pensar en ello, porque a fin de cuentas, su manera de decirme adiós era algo que a mí no incumbía.

Luego de que oí la puerta cerrarse, Madison se sentó a mi lado en el sofá y luego suspiro.

-¿no es perfecto?-pregunto.

-¿Qué cosa?-inquirí confundida.

- mi novio- dijo, con aire de orgullo.

Yo reí, pero no dije nada. Aun cuando Madison me lo había preguntado no podía decirle lo que pensaba. Si, si era perfecto, pero por alguna extraña razón, mi boca no podía soltar esas palabras enfrente de mi amiga.

-¿a qué horas te iras mañana?- pregunte.

-A las seis.

-¿de la tarde?

-De la mañana.

Abrí los ojos como platos y la mire.

-¿seis de la mañana? Y ¿a qué horas vendrás?

-No lo sé-musito y luego torció el gesto-. La isla de Torcello está un poco lejos, quizás venga como a las cinco de la tarde.

-Pero si solo te harán una entrevista, ¿Por qué tardaras tanto?

-porque si me aceptan me quedare para que me capaciten o algo así- se encogió de hombros.

-voy a extrañarte- hice un puchero y ella rio

-me extrañaras más si consigo el trabajo, porque saldré hasta las ocho de la noche- volvió a reír y esta vez yo me uní a su risa

-Madi, estoy cansada, me acostare ya- dije.

-¿tan pronto? Pero si son las ocho de la noche

-ocho cuarenta- corregí-. Y sí, estoy muy cansada y quiero dormir.

Bueno de lo que había dicho solo la primera parte era cierta por que tenía miedo de volver a soñar la misma pesadilla de la noche anterior.

-Está bien. Buenas noches.

-buenas noches- me levante del sofá y camine hasta mi habitación.

-¡Ah! Mañana tienes que levantarte temprano- me aviso-. Cameron vendrá antes que yo me vaya y luego te llevara al puente de los suspiros.

Me detuve antes de entrar a la habitación.

-Genial-dije, y sonreí.

Me introduje a mi habitación y me arrope para dormir, luego me acosté en la suave cama y me cubrí con las sabanas. Me quede mirando el techo en total oscuridad, y alcanzaba a percibir el sonido de la televisión proveniente de la sala.

Sentía el entusiasmo crecer con cada minuto que pasaba, maña iría al famoso puente de los suspiros, un lugar que querido visitar desde que madison se vino a vivir aquí; pero había otra razón para alimentar este entusiasmo, y era que pasaría un buen rato con Cameron. Pero aun no sabía por qué esa idea me entusiasma tanto. Los golpes en la puerta me despertaron y entonces me percate de la voz de madison del otro lado

MANUAL DE LO PROHIBIDO *Terminada*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora