Ora por los malvados -COMPLETO-

Capítulo 18: Maniobras de Slytherin (Parte 5)

CAPÍTULO 18: Maniobras de Slytherin (Parte 5)

Sala de Requisitos

19 De octubre de 1995

5:15 p.m.

Antes de que una sola alma en el castillo hubiera comenzado el desayuno, la noticia de los tres Slytherins gravemente heridos ya había llegado a la aldea de Hogsmeade, y antes de la cena, toda la Gran Bretaña mágica lo sabría. Los nuevos rumores fueron criados por el segundo, que van desde una pelea entre ellos debido a los resultados de las pruebas de Quidditch hasta Sirius Black infiltrándose en el castillo una vez más. Algunos incluso teorizaron que Snape finalmente se había roto y se había vuelto psicópata de sus alumnos, esa había sido su teoría favorita hasta ahora.

Afortunadamente para él, ninguno de los tres estudiantes había muerto. Pucey y Rowle se mantendrían en la enfermería durante la próxima semana cuando sus huesos fueran regenerados por Madam Pomfrey, y tendrían que someterse a terapia física para volver a la normalidad. Warrington no tuvo tanta suerte, en su ataque lleno de ira, había destrozado casi cincuenta huesos separados. Si tuviera suerte, solo pasaría un mes en la enfermería. Y si fuera inteligente, se daría cuenta de que nunca volvería a cruzarlo.

Los maestros y estudiantes de tres casas estaban confundidos, preocupados y, sobre todo, aterrorizados. Los ataques fueron tan repentinos, tan aleatorios, en su mente, que podrían ser los siguientes. Los únicos que sabían lo que realmente había sucedido eran los Slytherins, y tampoco estaban carenando bien. Eran mucho peores que cualquiera de las otras casas, todos habían evitado el contacto visual con él, la gente parecía pálida y los que estaban claramente enfurecidos no podían hacer nada. Montague está haciendo, estaba seguro.

Mientras Harry presenciaba a toda la escuela horrorizada por sus acciones, desesperado por encontrar al perpetrador de estos horripilantes ataques, no sintió remordimiento ni lástima por ellos. Ni siquiera la más mínima gota. Justo lo contrario, en realidad. Allí estaba de nuevo, ese sentimiento de orgullo, de poder, de respeto. Después de todo su tiempo en Hogwarts, finalmente pudo verlo en sus ojos. El temor paralizante con el que había vivido durante sus primeros dos años. No había nada más satisfactorio que ver a los Slytherins que habían hecho de su vida un infierno en cualquier movimiento que hiciera.

"Córtalo!" Harry le había roto a Theo, que había estado nervioso a su alrededor toda la mañana. "No voy a atacarte, a menos que sigas actuando como una perra."

"Cómo esperas que actúe?" Theo había preguntado, más tenue de lo habitual. "Casi los matas."

"Casi", aclaró Pansy. Ella había sido la única Slytherin que no le tenía miedo, de hecho, parecía más orgullosa que nada.

"Era necesario", dijo Harry. Y me gustó. "Además, somos amigos, recuerda."

"Sí," Theo asintió, todavía un poco conmocionado. "Amigos."

Había venido. Todavía estaba en estado de shock por todo el asunto, pero después de que eso pasó, y se dio cuenta de por qué era necesario, todo volvería a la normalidad. O al menos Harry lo esperaba.

Durante todo el día, había visto a varios miembros del Departamento de Defensa tratando de llamar su atención. Lo pasarían por los pasillos, persistiendo lo suficiente como para que él obtuviera la pista, algunos, como Hermione, tomaría el enfoque indirecto y lo vería desde el otro lado del aula. Pero los ignoró a todos, sabiendo que lo emboscarían de todos modos tan pronto como comenzara la reunión del DA.

"Qué les pasó?"

"Sabes quién los atacó?"

"Va a haber otro ataque?"