Ora por los malvados -COMPLETO-

Capítulo 102: El Único Que Jamás Temerá (Parte 1)

CAPÍTULO 102: El Único Que Jamás Temerá (Parte 1)

Lugar Grimmauld

12:30 a.m.

Black no le quitó los ojos de Harry. Todavía estaba alerta, casi temblando de anticipación mientras se arrodillaba gradualmente y buscaba sin rumbo la varita en el suelo. En el momento en que lo tocó, entró en acción. Rodando por el suelo mientras agarraba la varita, Black no tomó tiempo antes de nivelarla contra Harry. Su mano temblaba violentamente, su rostro se contorsionaba lentamente de rabia. Pero Harry no parpadeó, ni siquiera se había estremecido. Miró impasible a los ojos de Sirius Black, casi jugando con el brillo de la locura detrás de ellos mientras disfrutaba viendo crecer el miedo de Black por su falta de reacción.

"Te dije que iba a matarte", susurró Black fríamente, y en un movimiento rápido, un chorro de luz salió de su varita. Pero en lugar de golpear a Harry, chocó contra la cerradura de la celda, provocando un suave clic cuando la puerta se abrió ligeramente.

Levantándose a sus dos pies, Black se movió metódicamente mientras estudiaba a Harry. Su varita fue entrenada una vez más en él cuando la ira dentro de él comenzó a crecer. Él abrió la puerta, tropezando fuera de la celda, pero no pudo llegar a más de unos pocos pasos de la puerta antes de que Aurora comenzara a chillar de nuevo. Ella abruptamente dejó de volar en círculos alrededor de Harry, flotando justo encima de su hombro, formando fuego desde sus alas mientras miraba a Black.

"No tendrías la oportunidad", dijo Harry finalmente.

"Crees que tu pájaro sangriento puede protegerte?" Negro gruñó hacia atrás.

"Ella no necesitará," como él dijo esto, la llama de Aurora se extinguió, y ella descendió lentamente hasta que se posó en el hombro de Harry. E incluso después de que le ordenó a Aurora que se retirara y parecía aparentemente sin varitas, Black no se atrevió a hacer un movimiento.

Bueno.

"Puedes tratar de matarme y ver cómo funciona eso para ti... de nuevo..." Harry se fue, dando un paso hacia Black que obligó al hombre a retroceder ligeramente. "O puedes venir conmigo, y te daré algo que quieras más."

"Y qué es eso?" Negro apretado.

"Cómo te gustaría la oportunidad de matar a Bellatrix Lestrange?"

El nombre tuvo el efecto instantáneo que Harry había esperado. La varita de Black comenzó a temblar más en su mano, su mandíbula se puso firmemente mientras la furia ardía detrás de sus ojos. Sirius Black no necesitaba bajar su varita para que Harry supiera que su odio por Bellatrix Lestrange superaba con creces su odio por él.

Departamento de Misterios

12:30 a.m.

Las palabras de Malfoy resonaron dentro de la cabeza de Neville. Burlándose de él. Riendo de él. Lo peor de todo fue la apariencia que todos los demás le estaban dando, una combinación de lástima y decepción. No podría salvarlos esta vez, y lo sabían. Casi podía oír a Malfoy riéndose detrás de su máscara. El mundo parecía detenerse, o al menos disminuir la velocidad, y luego lo escuchó. Esa risa. Neville no necesitaba darse la vuelta para saber de quién era. Esa voz había estado notablemente ausente toda la noche, no era de extrañar que fuera cuando decidió mostrarse.

"Oh, qué maravilloso giro de los acontecimientos", dijo alegremente, saltando detrás de él mientras el espejo oscuro de sí mismo usaba su brazo derecho para apoyarse contra Malfoy. Esa sonrisa burlona, su oscuro reflejo ni siquiera necesitaba señalar lo obvio para él para perforar ese punto en su cabeza. "Después de todo este tiempo, con todos pensando que eres algo especial o digno de tanta atención, resultó ser solo otro perdedor con delirios de grandeza."