14: De Acuerdo al Plan.

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14: De Acuerdo al Plan.

Durante su semana de descanso Lando optó por la mejor opción, la cual era viajar al lugar donde residía, parte de su decisión fue porque Checo le dijo que él también iría a Mónaco, con Max por supuesto, pues ambos vivían juntos.

Apenas llegar al lugar había querido mandar un mensaje a Sergio, pero no lo creyó prudente; desde la primera ocasión que le había llamado estuvieron intercambiando mensajes, pero eran muy esporádicos y eran sobre los típicos saludos o uno que otro deseo de buena suerte para las carreras; por lo que mejor espero a que los días pasarán, y que un encuentro por casualidad se diera entre ellos.

"Lando, ¿Me escuchaste?".

—¿Qué?, ah, no, perdón. —Se había olvidado que estaba en llamada con Carlos.

"¿Pues no que muy interesado en lo que me había pasado?, ¿en dónde tienes la cabeza?".

—Sí, sí, ya dije perdón, te escucho es solo que me perdí un rato.

"Ya me di cuenta, en fin, como te decía, estoy en Madrid, dejé las cosas claras con Charles".

—¿Al fin te atreviste a besarlo? —cuestionó juguetón.

"No, le dejé el camino libre con Andrés".

—¿Qué?, pero si a ti te gusta Charles, ¿por qué hiciste eso?. —Se levantó de la cama y empezó a dar vueltas por su habitación, no creyendo en lo que había escuchado—. ¿Acaso enloqueciste?.

"Tranquilo, nada de eso, bueno sí, me gusta, pero él ahora está con este chico, y si Charles quiere estar con él yo lo voy a respetar, tuve mi oportunidad y la arruiné".

—Pero a ti no te agrada ese sujeto.

"No, pero no me tiene que agradar a mí, y Charles parece agusto con él, no le voy a arruinar algo más, regresamos a nuestra antigua dinámica, a nuestra amistad, y por mí eso está bien".

—Vaya —comentó sorprendido—. ¿Entonces eso es todo?, dejarás que la persona que te gusta se quede con otro.

"No puedo obligarle a que me corresponda, y si es feliz con otro yo estoy feliz por él".

—Wow, amigo, no sé si eres muy comprensivo o muy tonto. —Carlos soltó una risa del otro lado de la línea—. Si esa es tu decisión yo te apoyo.

"Gracias hombre, ahora te dejo porque mi sobrino ya despertó de su siesta y tengo que ir por él a su cuna".

—De acuerdo, te dejo entonces, disfruta tu vida de tío.

El madrileño se despidió de él agradeciendo y deseándole una buena semana de descanso, luego colgó la llamada, se quedó unos segundos observando la pantalla, cuando el reloj cambió un minuto bloqueó el aparato, tal vez una caminata le ayudaría para despejar la mente.

La vista de la tarde le parecía hermosa, el cielo iluminado con los últimos rayos de sol era simplemente relajante, detuvo su andar cuando su música se vio interrumpida con lo que era una llamada entrante, sacó su celular, y no lo pensó dos veces luego de ver de quien se trataba,

—¿Checo?, Hola —saludó con algo de sorpresa.

"Hola Lando".

—¿Todo bien? —preguntó al oír el tono desanimado del mexicano.

"Sí, sí, sólo quería... saludar".

—¿Seguro?, porque honestamente no te oyes bien.

"Bueno, la verdad es que no, yo... algo pasó, y me apetecía hablar con un amigo".

Odio a Tu NovioWhere stories live. Discover now