Space between us (Hailee & Tn Holland)

Capítulo 25

Ya había pasado dos meses de que desperté, el primer mes me quedé en el hospital por la heridas que querían que se cerraran y medio se cicatrizaran, el segundo a mediado de Marzo me dieron el alta y fue lo mejor de la vida, llegar a mi departamento y estar en mi espacio, en mi cama, sala, claramente recostada y en reposo pero en casa, toda mi familia está pendiente de mí, pero Hailee se quedó en Londres para cuidarme, hicieron un trato con el equipo y sobre el tour, pospusieron las fechas para que los bailarines tengan mucho mas tiempo de ensayar y aprenderse las coreografías, la verdad Haiz y Soph, supieron manipular al equipo para lograr eso, honestamente no me queje por el simple hecho que ella estaría conmigo en toda la recuperación.

Estaba en mi oficina, en mi mesa con el iPad enfrente de mi modificando unos planos que iba a enviarle a Rachel y escucho como tocan la puerta.

— Así que aquí estabas, ni accidentada dejas los planos o el trabajo — dice Haiz recostada en el marco de la puerta.

— Jamás — le digo con una sonrisa — además estos planos son importantes, mira — le hago una seña para que se acerque y se coloque alado mío.

— Amor todos tus planos son importantes para ti — dice mientras se acercaba a mi.

— Touché — le digo soltando una risa — pero te juro que estos si lo son — le digo mientras movía el iPad un poco a la izquierda donde ella iba a estar.

— A ver — me dice mientras analiza los planos — espera, yo reconozco estos planos — dice mirándome — son los planos de la casa, verdad? — yo asiento ante eso — pero se ve diferente, estas modificándolos? — vuelvo a asentir — por qué?

— Porque sencillamente cambie de opinión de algunas cosas para sacarle mas provecho a los espacios y cambiando un par de cosas mas, cuando los termine te los muestro — le doy un beso en su cachete — para que me buscabas preciosa? — le digo poniendo mi atención en ella.

— Para que cenes — dice con tono de obviedad mientras me mira fijamente, con una sonrisa.

— Cenar? Si aun es temprano — le digo riéndome y ella me mira confundida.

— Amor, son las 7 de la noche — dirijo la mirada a mi pequeño reloj y veo que efectivamente son las 7:25 de la noche.

— Que carajos, si hace un momento eran las — hago una pequeña pausa, sacudo levemente mi cabeza — sabes que olvídalo... te veo en el comedor bebé — le digo con una sonrisa.

— Eso fue... extraño, pero esta bien — me dice para darme un beso en la frente y salió de la oficina.

Me estiro en la silla, doy una vista a todo el plano, me convencía, pero no al mismo tiempo, limpie los planes digitales y volví a un lienzo en blanco, agarre el celular y le envíe un mensaje a Rachel que parara ese proyecto, que quiero hacer otros planes, me levanto y salgo del escritorio y me dirijo a la cocina, me encuentro con Haiz en el celular y nuestros platos ya en la mesa.

— Aquí estoy amor — le digo sentándome — pensé que era pasta.

— Hay pasta pero decidí comprar sushi, hace tiempo que no comíamos esto — dice agarrando los palillos.

— Me parece bien pero sabría mejor con vino.

— Por supuesto, pero no puedes tomar alcohol, así que decide ¿agua o jugo de naranja?

— Agua, jugo como que no.

— Excelente decisión — ella se paró, puso agua en un vaso y volvió a la mesa — aquí esta.

— Gracias bebé — le digo dándole un beso a la mejilla.

Empezamos a comer, últimamente todo ya era muy familiar, comer juntas, levantarnos juntas, estar prácticamente juntas 24/7, terminamos y seguimos platicando de todo lo que ha pasado con su gira hasta que mi teléfono comenzó a sonar y nos rompió de la burbuja.