Amor Floral (Terminado)

Abrazo.

Nicholas abrazo la cintura de su esposo mientras besaba sus labios. El lo había extrañado mucho, y había pensado en el desde el momento que partió a su viaje. Procuró llamarlo todos los días almenos para saludarlo y desearle un buen día.

Ahora lo tenía tan cerca, y eso lo ponía feliz. Luego de haber pasado por esa gran discusión, la reconciliación, el viaje y ahora estar en casa. Lo ponía demasiado contento saber que todo estaba bien entre ellos.

— Estoy tan feliz de verte, Wonnie.

Dijo entre el beso.

— ¿Enserio?

Preguntó Jungwon tomando distancia, descansando sus manos en el pecho del contrario. Nicholas por su parte, en ningún momento soltó la cintura de su esposo.

— Claro, amor. Verte es lo único que quería, te extrañe muchísimo en Canadá. No me gustó dejarte luego de que dejáramos las cosas bien entre nosotros.

Nicholas besó la mejilla de Jungwon, y ese simple gesto le había causado más que mariposas a Jungwon. 

— Amor, ¿esas que son?

Preguntó Nicholas, señalando levemente los medicamentos que estaban sobre uno de los muebles. Jungwon había estado medicandose debido a su anemia, quería curarse y no tener que preocuparse por su salud. Pero le resultaba molesto tener que cuidarse tanto.

— Son mías, Sunghoon me las trajo. Olvidé guardarlas, no me gusta ver todo eso.

Jungwon se separo del abrazo, y se dirigió a tomar sus medicamentos para guardarlos en la pequeña mesita de luz que tenía en su cuarto.  Nicholas lo siguió por detrás, para poder abrazarlo por la espalda y preguntarle tiernamente acerca de su salud.

— ¿Me cuentas?

Preguntó luego de dejar un beso en su nuca.

— Es anemia, no te preocupes. Por ahora solo tengo que tomar algunas píldoras, y cuidarme. Estoy bien.

Contestó mientras se volteaba y se apoyaba sobre el mueble, para mirarlo a la cara a Nicholas mientras hablaban.

— ¿Es por eso que habías estado tan pálido últimamente?

— Es posible.

Nicholas abrazo devuelta la cintura de su esposo y escucho atentamente lo que decía.

— De todos modos, como le dije a Sunghoon, anemia o cualquier otra enfermedad es lo último que quiero ahora. Así que estoy cuidándome, quiero mejorar pronto y no tener nada de que preocuparme en mi salud.

— Me parece muy bien, prometo cuidarte yo también. Te ayudare con todo.

Dijo y dejo un beso corto pero cariñoso en los labios de Jungwon.

— No tienes que hacerlo, puedo cuidarme solo.

— Yo se que puedes pero soy tu esposo, quiero hacerlo. Déjame hacerlo.

Lo siguiente que Jungwon sintió fue como Nicholas dejaba besos por toda su cara, como si de un dulce perro se tratase. Luego besó su boca, pero de una manera más intensa.

Jungwon ya sabía para donde iba a ir. No hubiera dicho nada y hubiera dejado que pasara, en ese momento se sentía bien con Nicholas. Este reencuentro no le había causado ningún malestar, pero...

Pero todo esos recuerdos del día de ayer azotaron su cabeza.

¿Qué le pasaba, por amor a Dios?

— Wonnie.. ¿Te parece bien que sigamos?

Pregunto al notar la repentina tensión que había en el cuerpo de Jungwon. Se separo un poco de él, solo para chequearlo con la mirada. Quería asegurarse que todo estara bien.

— ¿Por qué preguntas?

— Mañana trabajas. Y además, estas tenso. ¿Todo bien?

Jungwon miro los ojos de Nicholas, sabía que con cada cosa que decía o hacía solamente lograba que él se preocupe más. Pero no podía evitarlo, todo era un remolino y lo atormentaba demasiado.

Ni siquiera sabía que es lo que quería.

Estaba tan perdido.

— Sí, solo me acordé de algo malo. Olvídalo.

— Esta bien.

Y mientras más miraba a Nicholas, no podía evitar sentirse tan impuro e inmundo. Realmente debería estar loco por mentirle tan descaradamente a él de esa forma.

¿Por qué lo había hecho?, ¿Por qué?

— ¿Puedes solo abrazarme?

Preguntó.

Nicholas se sintió confundido por la pregunta, sin embargo recordó que su esposo siempre había sido un manojo de nervios y ansiedad. Y para él, en lo que respectaba, no haría nada que le provocase más nervios o estrés innecesario. Así que solo asintió con una sonrisa amorosa, y dejo un beso corto en los labios de su esposo al ver como sus ojos se habían llenado de agua.

Jungwon mostraba esa faceta débil y sensible que siempre tiene escondida. Y eso le hizo sentir como un avance en su relación.

— Por supuesto, amor.

Respondió mientras abrazaba con amor la cintura de su amado y descansaba su cabeza en el hombro del contrario. Jungwon también lo abrazo, por encima de los hombros y apego su cuerpo tanto como pudo.

— Tranquilo.

Susurró Nicholas cuando sintió como las lágrimas de Jungwon le quemaban la piel.