Capítulo 3

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Taylor se quedo callado por unos segundos y después siguió comiendo.

- ¿En serio? - Pregunto el.

- Si Taylor, jamás podría olvidar esos ojos - Toque mi frente.

- Hay mucha gente con ojos azules ¿viste su rostro? - Comía mientras preguntaba.

- No, su color de ojos es único - Negué con la cabeza.

- Hayes lo tiene, estas pareciendo una niña enamorada - Termino su comida y se recargo en el asiento.

- Taylor... Esta bien, olvidemoslo - Hice una mueca.

- Yo pienso que si era Hayes...

- ¿Por que dices eso? - Pregunte confundida.

- Espero y no te incomode, les dije que vinieran a cenar - Taylor señaló atrás de mi.

Me giré y venían todos, atraían la mirada de todos los presentes en el restaurante, era un gran montón y lo bueno era que mucha gente ya estaba abandonando el lugar, eso me gustaba de vivir aquí, que los locales y todo eso fueran cerrados muy tarde.

Me quede callada, tal vez Taylor tenia razón y era Hayes a quien había visto. Ellos juntaron unas mesas a la nuestra.

- ¿Por que se fueron de repente? - Pregunto Jack G.

- No encajabamos en ese lugar, no con esa canción - Contesto Taylor.

Mire a Cameron que estaba casi al final sentado junto a Sam, ella le contaba algo mientras ambos sonreían. Baje la mirada a mis piernas.

- ¿Quieres algo más? - Taylor me pregunto.

- ¿Un postre? Un postre estaría bien - Confese tímida.

- Claro, yo también quiero uno - Susurro Taylor.

Aaron llamo a la mesera para que ellos pudieran pedir su comida y Taylor ordenará.

La mesera se alejó de la mesa y solo nos quedamos todos viéndonos unos a otros esperando a que alguien dijera algo.

- ¿Y cómo te la haz pasado _______? - Pregunto Carter.

- Muy bien, ha sido una noche muy loca, gracias por todo chicos - Sonreí y después mire hacia la ciudad.

Estábamos cenando al aire libre en plena noche lo cual era realmente genial.

El celular de Hayes comenzó a sonar y el se alejó de la mesa para contestar.

Lo seguí con la mirada, estaba al fondo hablando, caminaba de un lado a otro con el celular en su oído. Hayes noto mi mirada y me sonrió. Me giré.

Gire mi mirada a Cameron y el se giró al mismo tiempo hacia mi, hizo una mueca y miro a Sam y luego a mi, bajo la mirada negando con la cabeza.

Puse los ojos en blanco.

Necesito hablar con el.

- Necesito ir al tocador, permiso - Me levante.

Camine hasta quedar por donde estaba aquella palmera en la cual había visto aquellos lindos ojos azules. Me puse al lado.

Mire la mesa, todos lucían muy sonrientes y felices, casi todos tenían pareja. A pesar de las grandes amistades, me seguía sintiendo sola.

Dirigí mi mirada a Cameron, el también me miro, quería que entendiera que necesitaba hablar con el, me miro, vamos Cam, ven, mordí mi labio. Me sentía triste, pensé que tal vez yo le interesaba pero era obvio que el aún quería a Sam.

Y lo comprobé, el dejo de mirarme para volver a mirar a Sam, le sonrío y siguió prestando atención a lo que decía. Baje la mirada y comencé a bajar las escaleras.

No quiero tu amor.

Camine con tranquilidad y sin prisas hasta el tocador de mujeres, en realidad no iba a hacer nada, solo quería salir un rato de ahí. Peine un poco mi cabello y enjuague mis manos para después volver a salir.

Subí las escaleras y camine hasta la orilla.

Me recargue en en barandal y admire la ciudad.

Me sentía sola, no se si alguien también le pase esto; a veces me entran las ganas de estar con alguien, de sentirme querida de otra forma, quiero a alguien que me ame de verdad, pero luego pienso que es mejor estar sola por que tienes muchas facilidades.

A pesar de qur hoy ya es primero de Marzo, por que ya pasaron las 12 siento algo de frío, el clima esta muy fresco. Aun no comienza la primavera es obvio que a eso se debe.

Froto mis brazos debido al frío, es algo incomodo por que siento que alguien me esta mirando, bajo la vista pero no hay nadie, hay gente caminando por las calles y los autos pasan algunos con prisa y otros sin importarles atrasar el trafico.

- Hola - Saludo alguien a mi lado.

Gire mi cabeza para ver quien era y sonreí.

- Hola Hayes - Suspire.

- ¿Cómo te la haz pasado? - Pregunto.

- Muy bien, gracias por todo - Susurre.

- ¿Hay algo que desees? - Pregunto y lo mire confundida.

- ¿Para que? - Respondí con una pregunta.

- No te he dado tu regalo de cum...

- No te preocupes por eso Hayes, así esta bien - Lo interrumpí.

- No, claro que no ¿algo que quieras hacer o comprar? - Pregunto.

Ay pero este chico si que era un necio, me puse a pensar tenia ganas de ir a la playa o de ir a algún lago cercano, tenia ganas de nadar y poder mirar el atardecer por un rato en un lugar tranquilo, algo callado y un poco alejado de la ciudad, hace apenas 2 meses que nos mudamos a la gran ciudad y aquí no es muy tranquilo que digamos desde temprano por la mañana el trafico esta presente y por las noches no faltan las personas que salen a divertirse.

- Quiero ir algún lago ¿crees poder llevarme? - Lo vi de reojo.

- Me parece perfecto, pensaba ir a pasar una semana con mi familia y tengo planeado ir a visitar el "Lago Norman" ¿Te gustaría venir? También vendrá Michel - Propuso.

- Me agrada la idea, pero ¿no es ninguna molestia para tu familia? digo por que es como una reunión familiar - Lo mire.

- ¡Para nada! Tu eres como de la familia - Tomo una trago de la copa que traía en su mano - A parte mamá y Sky dijeron que tenían ganas de verte, hace como un año que no vas a casa-.

Eso era cierto, de vez en cuando acompañaba a Hayes a su casa o iba a visitarlo, me llevo muy bien con el y también con su madre y ni se diga con Sky, algunas veces me invitaban a ir a comer a su casa o simplemente a ir a charlar y también en un tiempo era como la niñera de Sky lo cual era muy divertido por que ella es una niña maravillosa.

- Entonces esta bien ¿qué día sera? - Pregunte.

- Mañana, por la tarde - Su boca se convirtió en una linea recta. n

- ¿Mañana? - Hice una mueca.

No tenia planes para mañana ni nada por el estilo pero sentía que era muy pronto, no tenía organizado nada.

- ¿Tienes planes? - Pregunto.

- No, solo que no tengo nada organizado - Respondí.

- En la mañana puedes hacerlo - Sugirió.

- Esta bien - Acepte.

- No te arrepentirás - Sonrió.

Bueno ahora tengo planes para mañana, un viaje.



Perdón PrincesaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora