9 Cena con amigos

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Alguna vez se han sentido tan fuera de lugar que varias veces se han preguntado qué hacen ahí, cuando podrías estar en cualquier lado, hasta durmiendo a gusto y no ahí rodeados de gente con la que no conectan, riéndose de cosas que no les causa gracia, e intentando encajar con personas con las que honestamente, les importa poco encajar. Así se siente Stella ahora, en medio de los amigos de Janet, y no es porque son gente joven, sino porque simplemente se siente fuera de lugar, encima le hacen preguntas o dicen cosas que la hacen sentir incómoda.

—¿Entonces finalmente pondrán el título de novias? Hace bastante que no voy a una boda. Digo las cosas entre lesbianas funciona así ¿Verdad? Nacen, crecen, se conocen un mes, se casan en tres, se divorcian en tres más, vuelven y arman una familia de nuevo.

—Bueno la verdad que no sé cómo funciona entre lesbianas ahora, pero en mis tiempos funcionaba igual que con cualquier pareja.

—Cierto que eres más grande —comenta uno de sus amigos.

—Dior, basta —le pide Janet.

—¿Qué? Llevan 8 meses saliendo nada más —Janet le toma la mano y entrelaza sus dedos—, han roto el récord lésbico, a está altura tú ya estarías embarazada de tres meses, y ambas estarían casadas o viviendo juntas, mínimo.

—Cariño, cierra la boca —exhala algo enojada— ¿Alguien más quiere cervezas? —pregunta antes de levantarse y solo uno acepta— No la acosen ni le digan nada ¿Okay? Dejen de ser tan desagradables que me la van a espantar y de verdad me enojaré con ustedes.

Los amenaza y se va, no pasa mucho tiempo que deja de ser la novedad ya que poco habla, ellos cenan y se van temprano. Janet despide a los cinco, sus dos amigas y tres amigos, para volver a la cocina mientras Stella termina de lavar lo último de la loza.

—Perdona por...

—Creo que lo mejor es que dejemos todo hasta aquí.

—¿Qué? —Janet se acerca rápidamente a su lado— ¿Esto es por ellos? No son siempre así de idiotas, solo es como una prueba de fuego y...

—No es por ellos, es por nosotras, es porque no creo que pueda responderte el te amo de vuelta —toma su rostro entre sus manos—, porque lamentablemente amo a otra a persona —suspira—, ella siempre ha ocupado un lugar en mi corazón y abarca tanto, tan profundamente, que no ha quedado espacio para alguien más, lo siento. Eres una mujer maravillosa, Janet, un ser humano impresionante y mereces ser feliz con alguien que pueda decirte te amo de vuelta, y que no tarde ocho meses saliendo contigo cuando debería haberte hecho su novia al cuarto mes, por eso de los tiempos lésbicos —Janet con tristeza sonríe.

—¿Podemos al menos darnos un beso de despedida?

Stella acepta y cargadas del amargo sabor de un final, se besan, Janet la abraza fuerte y llora un momento sobre su hombro mientras es consolada, cuando finalmente está lista para irse la castaña la besa en la frente y se va.

El lunes llega y por ende el inicio de clases también, la próxima semana es la excursión y en tanto Jasmine intenta acercarse a Stella, Janet hace lo contrario por salud mental. Resulta que trabajar de quién estás enamorada hace las cosas un tanto más difícil para olvidar a dicha persona, pero Janet lo intenta e intentarlo, implica tratar de no hablar o ver a Stella ¿Se complica verdad?, trabajando en la misma escuela. Pero por suerte tiene una nueva distracción, una pasante haciendo su residencia.

—¿Podemos hablar? —pregunta la pelirroja colocandose a su lado en el recreo.

—Ya hablamos —le responde tajante—, no seré tu amante.

—No te pido eso.

—Me pides estar juntas, a espaldas de tu esposo y de todo el mundo, esa es la definición de un amante —la observa a su lado.

—La miras mucho ¿No te parece? —le dice pelirroja al ver que mira a Janet.

—No tienes derecho a reclamarme nada, porque no somos nada.

—¿Te besas como me besaste ayer con quién no eres nada? —Stella frunce el ceño— Y estás equivocada, eres mía Stella, y yo soy tuya, arreglaré mi estado civil para que estemos finalmente juntas y ahí sí —la observa directo a los ojos— eso —apunta a Janet a su espalda con el pulgar— dejará de ser una ocupación visual en tu visión panorámica.

Stella se ríe en cuánto ella se va enojada, ya no está más con Janet, pero no va a decirle eso, por ahora. A medida que la semana pasa, ve como la profesora y la nueva pasante parecen llevarse bastante bien, aunque las miradas que le regala a ella están llenas de algo de tristeza y melancolía, sabe que Janet va a estar bien, que va a superarla y eso espera porque se merece muchas cosas buenas, es una gran mujer.

—Hola —la saluda siendo la primera en llegar al comedor.

—Hola.

—Mis amigos se sintieron culpables por lo del otro día y te mandan sus disculpas.

—No fue culpa de ellos.

—Lo sé, pero al menos así aprenderan a ser más prudentes y les saqué que me inviten la cena en mi restaurante favorito ¿Cómo has estado tú?

—Bien —Stella suspira y la mira—, espero que te llegue alguien que de verdad pueda darte todo, Janet —acaricia su brazo y entra Jasmine, seguida de la residente de Janet.

—Me voy, nos vemos Stel, Jasmine —la saluda y salen.

Stella se sienta y Jasmine a su lado, entonces la castaña se mueve de lugar dejando una silla en medio, a lo que la pelirroja suspira.

—¿Sigues con ella?

—Que te importa.

—Tiene cara de tristeza y te ve con melancolía, o han cortado o se han peleado ¿Cuál de las dos? —la otra ve los exámenes para corregir y la ignora— Yo creo que han cortado.

—No es de tu incumbencia.

—Porque no las he visto andar acarameladitas o darse miraditas, y toques, tampoco se te acerca a la salida y...

—Jasmine —la otra la mira—, metete en tus asuntos. No somos compinches amiguitas, no somos cercanas, no me interesa entablar un relación de amistad contigo. Así que no metas tu nariz dónde no te llaman ¿Okay?

—¿Qué tipo de relación te interesa conmigo entonces?

Stella blanquea los ojos, toma sus papeles, su taza y maletín para irse a su curso. Al ir saliendo y casi ser interceptada por Jasmine, viene entrando Gerbert.

—Ger, a Jasmine le encantaría saber las diferencias sobre las mariposas.

El hombre fanático de esos insectos, comienza a explicarle la diferencia entre las clases, lo que hace que le sea imposible a la otra librarse y suspira frustrada escuchando algo que no le interesa, pero tomó la oportunidad de distracción de Stella y le dejó una nota.

"Maktub del árabe, significa: Lo que está destinado a suceder, siempre encontrará una forma única, mágica y maravillosa para manifestarse"

Stella sonríe y se muerde el labio inferior negando con la cabeza, alguien golpea la puerta y antes de esperar respuesta entra, la pelirroja está parada con una expresión de enojo lo que le produce a la castaña una sonrisa aún más amplia y sigue en lo suyo.

—Eres cruel, me tuvo media hora explicándome las diferencias entre los distintos tipos de mariposa, las crisálidas y en qué lugares habitan.

—Hoy aprendiste algo nuevo —se ríe y sigue corrigiendo, pero su sonrisa se borra cuando escucha el seguro en la puerta.

Jasmine avanza demasiado rápido a ella, corre la silla y la besa, primero Stella se resiste, pero luego cede y Jazmine se coloca encima de ella para profundizar el beso, no saben cuánto tiempo están así, pero el timbre suena y así de rápido como vino, la pelirroja se le quita de encima y toma su maletín.

—Tú también acabas de aprender algo nuevo. Vuelve a provocarme y veras como con gusto te borro la sonrisa petulante en cuánto tenga chance.

Stella se queda parpadeando un par de veces sin terminar de procesar el asalto de ella. Su corazón late demasiado rápido, se lleva la mano a sus labios e intenta calmar sus respiración de a poco, respirando pausadamente.

Enséñame a amarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora