Abro los ojos y observo el techo.
Las palabras de papá resuenan a la vez en mi cabeza y hacen que me duelan.
Me levanto sin ganas y me miro en el espejo. Desde el reflejo, analizo la hora que es.
Las seis y media de la mañana.
Me hago una coleta como puedo y me cambio rápidamente. Me pongo los zapatos negros y cojo las llaves. Cierro la puerta de casa y me pongo los auriculares.
Salir de casa para tomar el aire me da vida.
Me pongo en marcha y dejo de prestar atención a mi cabeza.
He tenido unos días de mierda. Un día tras otro. Sin parar.
La conversación de ayer con mi padre no terminó muy bien. Cuando acabó de decirme que conoció una mujer, me dio un beso en la mejilla y desapareció por la puerta de mi habitación sin antes decir "quiero que me entiendes" o "mamá quería que pasara de página y eso he hecho"
Con esas palabras me demuestran muchísimas cosas que antes no sabía.
Y ahora ya las sé.
El viento me azota el rostro.
El verano está empezando a llegar, pero el frío de las mañanas aún está ahí.
Una hora y media más tarde, la lluvia me alcanzó.
Corriendo como una loca abro la puerta con la llave y me encuentro de morros con quien menos quiero hablar.
—¿Estabas...?
—Caminando. Si.
Subo las escaleras sin mirarlo antes.
—Beatriz. Cielo—la voz cansada de papá me hace darme la vuelta, poniendo los ojos en blanco—. No quiero que te lo tomes a mal.
—Disfruta del día, papá.
—Pero...
Cierro la puerta de mi habitación y apoyo la cabeza en la puerta.
Me quito los zapatos y me dejo caer en la cama.
Mi cabeza da vueltas y vueltas, conversaciones tras conversaciones. Sin dejarme pensar con tres dedos.
Oigo a papá cerrar la puerta para ir a trabajar y observo el escritorio.
Respiro hondo y me siento en él.
Los ojos se me cierran, pero mi mente, ahora mismo tiene la mejor inspiración. Y cuando hay inspiración.... Hay bocetos.
"Cuando no me viene nada a la mente para hacer bocetos, tengo ideas para escribir. Y cuando no tengo ideas para escribir, me vienen a la mente bocetos que crear" La frase que le dije a Celia es lo que está sucediendo ahora mismo.
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El amor por el dinero
Teen Fiction«Sé que a veces puedes creer que no. Que parezca que no quiero saber nada de nadie o me importe una mierda todo. Pero siempre voy a querer saber de ti». Beatriz Ronald se enfrenta a la pérdida de su madre y la repentina inestabilidad económica de su...