Dioses Griegos. La llave de Pandora

Dios Supremo

>> ¿Ese es el lazo de Hestia? O sea que...<< pienso tragando grueso.

-Si no te vas ahora...-dice Hades y lo miro. –Será muy tarde. –lo miran.

-¿Qué? –dice Cronos. - ¿Es una broma tuya? - >>Bien, eso lo entendí<< corro dejándolos ahí y me dirijo a buscar la última puerta.

-¿Dónde está? –miro a todos lados, pero solo hay paredes sin puertas.

-Camina tres pasos a tú izquierda. –era la voz de Hefesto.

Camino y quedo al frente de la pared lateral, coloco mi mano encima de ella y aparece una puerta. La abro y al entrar me encuentro con el lugar en que Hefesto estaba anteriormente. Giro mi anillo.

-Pensé que...

-Sé que no te agrada mucho verme...

-No dije eso, solo que...-suspiro. –Tengo que buscar a Ares.

-Entiendo, sin embargo no puedes ir sin algo con que defenderte.

-Tengo esto, me lo diste. –él sonríe.

-Solo sirve contra Apolo. –busca algo en sus bolsillos. –Tuve que darte uno, es muy poderoso, sin embargo...-saca otro brazalete. –Este abarca los poderes de los otros Dioses.

-¿Otros Dioses?

-Los principales hijos de Cronos, ellos son muy fuertes, más fuertes que cualquier otro.

-Pero...

-Ve, no puedes perder más tiempo. Solo debes seguir derecho. –antes de que diga algo estoy afuera en el pasillo.

-¿Por qué todos hablan con acertijos? –camino y no me tropiezo con la pared frente a mí sino que aparezco en el museo que Hades y yo habíamos aparecido anteriormente, sin embargo estaba oscuro, ya no se oía el ruido de la batalla, todo estaba en calma.

Una linterna me saca de mis pensamientos y me escondo. Es el vigilante hablando.

-Debería renunciar. –murmura yéndose. Salgo y me dirijo a la salida, abro la puerta y salgo.

-¿Dónde podría...? –sonrío ampliamente al recordar que Ares aparece si le rezan. >>Supongo que cualquier tipo de oración<< -Bien... Ares, Dios de las guerras, por favor ayúdame a ganar esta batalla, sé que me oyes y me...-se escucha un estruendo en el cielo, me alejo un poco y Ares cae. Me mira.

-¿Me rezaste? –dice confundido.

-Era la única forma de que vinieses ¿o no?

-Bueno, sí, es cierto.

-¿Sabes dónde está Artemisa y Afrodita?

-No lo sé, Artemisa desapareció y no la encuentro, Afrodita...bueno, estábamos ocupados...

-No quiero saber. –se encoge de hombros. –Hades me envió contigo...

-¿Por qué te enviaría conmigo?

-Porque liberé a Cronos...-me mira sin poder creerlo. –No fue con intención, Hermes...

-¿Hermes te manipuló? –asiento.

-Cronos está en el Olimpo y...

-Esto es malo, Daria, muy malo.

-Lo sé, lo sé. –me muerdo el labio. –Pero no puedo revertir lo que hice.

-No te culpo. –camina de un lado a otro. - ¿Dónde está Apolo?

-Cronos los controla, tiene a Rhea encerrada, Deméter, Apolo y quizás Hestia estén bajo su control.