Dioses Griegos. La llave de Pandora

Hera.

-Puedo hacer pequeña gente con fuego. –dice Hades, me limpio las lágrimas y lo miro.

-¿Qué? –asiente sonriendo.

-¿Quieres ver? –asiento con curiosidad y alza su mano, en su palma se forma un pequeño muñeco que está inclinado hacia delante, luego otro aparece con una llave y se la introduce en la espalda al otro, le comienza a dar vueltas, sin embargo no hace nada, se acerca y en ese momento se levanta rápidamente haciéndome sobresaltar, Hades se ríe y lo miro.

-Eres un idiota. –digo riéndome.

-¿Me culpas por qué tú te asustaste?

-Tú me asustaste. –digo dándole con un cojín y él se ríe. Me hala hacia él y me besa.

-Amo tú risa. –sonrío. –Por eso odio que cualquier persona te haga llorar.

-Es...-suspiro. –No quiero hablar.

-¿Lo amas? –lo miro y niego.

-No, solo me dolió que me haya engañado, me prometió...me lo prometió mirándome a los ojos, supongo que fui una idiota y lo siento. –él niega.

-No deberías llorar por alguien que no le importa más nadie que él mismo.

-Lo sé, sé que me amas y que te amo. –sonríe.

-Y que nunca te engañaría.

-No lo dudo. –me besa de nuevo.

En ese momento él se mueve rápidamente parándose frente a mí, se escucha un quejido y Hades se ríe.

-Zeus se enojará por tomar sus rayos sin permiso. –dice Hades con el rayo en la mano.

-Tú cállate y quítate de mi camino. –dice enfurecida, era una mujer alta, de cabello cobrizo claro, ojos verdes y tez blanca, toda ella desprendía una luz de su cuerpo, sin embargo estaba furiosa, eso se podía ver.

-¿De tú camino? –Hades se ríe. –Hay muchos más caminos, hermanita. –los miro. >> ¿Esa es Hera? << pienso tragando grueso.
-Sabes lo que quiero, ahora...-camina y Hades agarra rápidamente su bastón fusionándolo con el rayo en su mano. - ¿Me atacarás?

-Solo es un plan de contingencia, cruela. –Hera se enoja más y desaparece de mi vista. –Esto es divertido...-dice Hades antes de perderlo de vista igualmente, Cerbero entra corriendo para pararse cerca de mí, miro a todos lados buscándolos, pero no hay nadie.

Me voy a mover y Cerbero gruñe.

-Bien, bien, me quedo aquí. –se escuchan unos golpes y la risa de Hades.

-¿¡Por qué defiendes a esa zorra!? –grita Hera furiosa.

Me volteo y están parados frente a frente, Hera sosteniendo su brazo y Hades estaba apoyado en su bastón riendo.

-¿Cómo no defenderla? Es el amor de mi vida. –sonrío.

-¡Tuvo sexo con el imbécil de mierda! ¡En mi cama! –me mira. –Me las vas a pagar, perra...

-Tú esposo, me engañó, él me...

-¡Cállate! –se escucha un estruendo y ambos están en el suelo, Hera está mirando el suelo con moretones y sangre en la comisura de su labio, comienza a llorar.

-Lloras por un idiota...-dice Hades en el suelo también, estaba igual a Hera. –No deberías...

-¡Cállate! ¡No te quiero oír! –dice llorando, me acerco a Hades y me mira. -¡Haré lo que sea y te asesinaré! ¡Te asesinaré por haberte metido con mi esposo! –antes de que diga algo ella desaparece.