Al abrir mis ojos lentamente me di cuenta que ya no estaba en el sótano si no que estaba en mi habitación. En ese momento la puerta de mi habitación se abrió y Ginger entro.
-Gracias a Dios que ya despertastes.- la mire confundida.
-¿Que hora es?- aclare mi garganta y Ginger me paso una vaso de agua que estaba en mi mesa de noche y se sentó al lado mío en la cama.
-Son alrededor de las 7:30- contestó mirando su celular.
"¿Porque sentía que se me olvidaba algo? Joder la cita de Jay."-pensé.Trate de salir de mi cama pero Ginger me lo impidió.
-¿A donde crees que vas?- preguntó.
-Jay.- fue lo único que respondí.
-Jesa se encargó de eso.- respondió soltando su agarre en mi cuando notó que mis músculos se relajaron.- Tu mamá no tarda en subir. Estaba preparando una sopa o algo así.- me comentó. Me permiti relajarme en mi cama y al cabo de unos minutos mamá entró a mi habitación con un plato de sopa.
-¿Como te sientes?- dejó el plato sobre mi escritorio.
-No lo se- dije en voz baja-¿Que me paso?, digo me tuve que haber desmayado o algo ¿no?-
Las caras de mamá y Ginger sólo reflejaban una emoción y era preocupación.¿Que me había pasado?La habitación se lleno de silencio, nadie había contestado mi pregunta y eso me ponía ansiosa.
-¿Mamá?-Nada.
-Esperaremos a que Jesa regrese con tu hermano. Mientras tanto trata de comer algo.- sin más se fue cerrando la puerta tras ella. Mire a Ginger pero esta desvío su mirada.
Una hora después cuando llegaron Jesa y Jayvian, todas volvieron a mi habitación y cerraron la puerta. Por lo que me habían dicho papá estaba abajo con Keila asegurándose que no espiara en la conversación. Espere en silencio a que una de ella hablara. Se seguían mirando entre si y supuse que hablaban mentalmente. Toque mi cuello y no llevaba puesto mi collar.
-'Me pueden decir de una buena vez. ¿Qué fue lo que me paso?'- le pregunte a todas.Jesa suspiró y habló.
-Cuando subíamos a comer algo después de haber estado entrenando, sólo te desmayasteis de la nada.- desvío su mirada de mi. Supuse que había más.
-Tratamos de que recuperaras la conciencia, pero no lo conseguimos. Por eso decidimos llamar a tu mamá.- añadió Ginger.
-¿Y?- mire a mamá quien a este punto tenía los ojos brillosos. Se veía que trataba de no llorar.
-No pude hacer nada.-ahogó un llanto.- No tenías nada.- estalló en lágrimas y Ginger la llevó a mi baño. Jesa se sentó al borde de mi cama.
- Estuvistes inconsciente por casi 6 horas.-comentó. Eso ya lo sabía. Bueno de una manera u otra ya que ella fue la que llevó a Jay a su cita. Lo que no sabía era que demonios me había pasado.
-Gracias por llevar a Jayvian a su cita. Me siento como la peor hermana del mundo.- me tape la cara con una almohada.
-De nada, pero no te sientas así no fue tu culpa lo que te paso.-
-Eso nadie lo sabe, nisiquiera yo se que me paso. Un momento estoy con ustedes a punto de ir a comer algo y luego despierto seis horas más tarde en mi cama.- mamá y Ginger salieron del baño.
-¿Sentistes dolor antes de desmayarte?- preguntó Jesa después de unos minutos de silencio y captó la atención de todas. Lo pensé pero ya sabía la respuesta y era un simple NO.
Así que negué con la cabeza. Jesa se puso de pies y comenzó a caminar por todos lados masajeandose la sien.
-¿Que piensas Jesa?- esta vez fue mamá quien preguntó. Jesa se detuvo en seco y suspiró y cara demostraba angustia y preocupación.
-Sintesis- fue lo único que dijo. Ginger y yo nos miramos con el ceño fruncido, pero al parecer mamá entendia que significaba, por que ella tenía los ojos abiertos como platos.
-¿Estas segura?- Jesa se encogió de hombros. Note que se mordía el labio inferior. En tan poco tiempo que llevó conociendo a Jesa he notado que hace eso cuando esta insegura o nerviosa y en este caso creó que son las dos.Todas nos quedamos en silencio. Al rato las chicas se fueron a sus casa y prometieron llamar en la mañana. Cuando se fueron salí a mi balcón necesitaba aire fresco después de todo lo que había pasado.
La vista de mi balcón no era del otro mundo ya que daba a el jardín través de mi casa. Este estaba cubierto por las flores de mamá y el árbol gigantesco de manzanas que quedaba a la izquierda de mi balcón. Me quede ahí sentaba entre el silencio cuando Keila entró corriendo a mi habitación y salió al balcón.
-¡Aisha! Adivina que, adivina que.- brincaba de alegría con un niño en la mañana de navidad.
-¿Que ocurre Keila, por que tanta emoción?-
-Sostén mis manos- ordenó. Fruncido el ceño pero aún así lo hice.-Ahora cierra los ojos.-
-¿Porque?-
-Sólo cierra los ojos- insistió y cerré los ojos. La verdad era que no tenía ganas de discutir con ella.Pasaron varios segundos cuando volvió hablar.- Ya puedes abrir los ojos.- Abrí los ojos lentamente pero no veía nada frente a mi donde hace unos segundos estaba Keila pero podía sentir sus manos en las mías.
-¿Keila?- hable despacio.
-Si- se escuchó su voz frente a mi
-¿Cómo estas haciendo esto?- se volvió hacer visible y solté de repente sus manos causando que se asustara.-¿Desde cuando puedes volverte invisible?- se encogió de hombros.
- No lo se, lo acabó de descubrir.- la mire extraño y continuó.- Estaba jugando en el sótano mientras tu, mamá y tus amigas hablaban y en el sótano no tenía puesto mi cuarzo y no lo se - se encogió de hombros- me imagine siendo invisible. Como no vi que nada cambio subi a mi habitación y me mire en el espejo y no me vi. A los pocos segundos después me volví visible otravez y pensé en mostrártelo.--Wow- fueron las únicas palabras que se me pudieron ocurrir en ese momento. Después del extraño día que he tenido mi hermanos me dice que descubrió uno de sus poderes y sola.- Estoy muy orgullosa de ti Keila. ¿Ya se lo mostrasteis a mamá?- negó con la cabeza.
-Quería que fueras la primera en saberlo. Sabes, para que te alegrarás un poco.- se encogió de hombros y la envolví en un abrazo.
-Gracias si que lo haz hechó. ¿Por que no vas y se lo enseñas a mamá y papá?- asintió y salió corriendo de mi habitación. No puedo mentir la noticia de que Keila por fin halla descubierto unos de sus poderes me puso feliz pero luego volví a la realidad. Un presentimiento corrió por todo mi cuerpo y me decia que algo andaba mal muy mal.*En Multimedia Keila Connors*
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Dificil De Entender
RandomLa vida de Aisha Connors es fuera de lo normal. Tras estar toda su vida siendo educada en casa y estando excluida del mundo. Tomara un nuevo camino que la llevará a conocer personas igual que ellas. ¿Sera fácil para Aisha manejar su vida secreta aho...