No se veía muy feliz de estar en la sala de su casa mirando películas con su hermano y amigos sin hacer nada más. Fourth estaba tan aburrido como harto de ese día, aunque fuese su cumpleaños.
Y quizás, irse a su habitación a dormir no estaba siendo tan mala idea.
—Voy a dormir un rato —dijo levantándose del sofá con pesadez—. Si mamá pregunta, solo díganle que estoy dormido y que no quiero ser despertado por nada del mundo.
—¿Quieres que vaya contigo? —preguntó Khao mirándolo desde el suelo, donde se encontraba abrazado por el hermano mayor de Fourth. El Omega negó sonriendo.
Después de terminar una pequeña discusión con su hermano, subió las escaleras con mucha flojera. Es que, todos los años son fiestas en grande, muchas personas entrando en su casa, muchos regalos y comida deliciosa. Todo lo que Fourth le gustaba. ¡Pero no! Tenía que haber estúpida nieve en septiembre.
¡Nunca ha nevado en septiembre! ¿Por qué este año sí? Ahg, resulta tan frustrante para él estar encerrado en su hogar sin hacer nada más que dormir, siempre es su primer pensamiento. Y no porque sea un Omega flojo, sino porque Fotfit así se lo pide. Ese lobo sí es flojo y bastante dormilón. Fourth lo ama casi todo el tiempo.
Casi.
Se tiró en su cama boca abajo y se estiró tanto como quiso mientras sonreía, pues sus sábanas aún tenían el delicioso aroma de Gemini sobre ellas. Fourth no evitó removerse sobre ellas para impregnar el aroma ajeno en su ropa porque, de todos modos, ya lo tenía. Todo lo que usaba estaba lleno de Gemini, incluso sus bandas para el cabello y mochila. No era broma cuando decía que Gemini era posesivo.
Se entretuvo tanto removiéndose que ni siquiera escuchó cuando abrieron su puerta y la volvieron a cerrar. Fue consciente de que había alguien en su habitación cuando ese alguien estaba encima de él, mirándolo, sujetándole las muñecas con algo de fuerza mientras le sonreía.
Gemini había subido detrás de él apenas tuvo oportunidad, es decir, apenas el papá Alfa de Fourth se fue. Porque quería estar con él, siempre quería. Gemini resultaba como un gatito cuando estaban a solas y, aunque dijera que él es todo un Alfa poderoso capaz de intimidar a cualquiera, con Fourth es toda una masita que se sonroja y se siente tímido.
—¿Qué haces aquí? —preguntó el Omega mirándole fijamente los labios y luego los ojos—. Se supone que te ibas a quedar viendo la película con tu hermano y First.
—Me aburrí —respondió simple—. Además, quiero preguntarte algo.
Fourth movió su cabeza un poco con una mueca en sus labios, pero sin dejar de mirarlo. Norawit Gemini en serio era guapo, muy hermoso y súper imbécil, pero eso era punto y aparte.
—¿Qué sucede?
—¿Puedo besarte por primera vez?
La sorpresa invadió las facciones del lindo Omega sobre la cama. De no ser porque estaba acostado, probablemente se habría caído de nalgas contra el suelo. ¿Por qué Gemini quería besarlo? ¿Ahora también quería marcar su boca con mordidas y saliva? No es como que le molestara, pero el primer beso ya le pertenecía a otro Alfa. No tuvo una relación con aquel chico porque apenas Gemini se enteró, lo espantó, pero estuvieron el tiempo suficiente para besarse. No quería ser malo y arruinar el momento entre ellos porque en serio quería besarse con Gemini, así que simplemente asintió.
El Alfa sonrió mostrando sus dientes y ocultando sus rasgados ojos en el proceso. Se inclinó lentamente hasta rozar sus narices suavemente, dándole un beso esquimal muy tierno que provocó un suspiro en el Omega. Gemini solo podía pensar que Fourth era hermoso todo rojito, que no importaba nada más que ellos dos.
Con su lengua delineó el labio inferior de Fourth para ver cómo este abría su boquita levemente, invitándole a entrar. Y bueno, ¿quién es él para negarse? Juntó sus labios con algo de fuerza contra los de Fourth, moviendo las muñecas del Omega hacia arriba mientras se empujaba levemente contra él. No tenía más intención que besarlo y disfrutar la boca ajena, pero el jadeo que se perdió en sus labios, proveniente de Fourth, lo hizo enloquecer.
Mordió los labios del menor sin llegar a hacerle daño y utilizó su lengua en aquel húmedo beso que estaban compartiendo. Fourth trataba de seguir el paso mientras apretaba sus manos en puños por el constante movimiento del Alfa sobre él. Y es que, su entrepierna le estaba doliendo y el pantalón ajustado solo le molestaba más que nunca. Quería quitárselo, pero la fuerza en sus muñecas era tanta que ni siquiera podía moverlas.
—Omega —susurró el Alfa sin alejarse realmente de los dulces labios del menor.
—Alfa —respondió al borde del colapso
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El Alfa que odio, ¿es mi Alfa? | Geminifourth
Hayran KurguNattawat Fourth es un tierno y adorable Omega de grandes mejillas, piel canela y estatura bajita, tiene la fama de ser el Omega perfecto para cualquier Alfa en la tierra, incluso aquel chico con el que vive peleando todo el tiempo. Norawit Gemini es...