For your hate

Capítulo 4

Bill's Pov

Ya habían pasado un par de minutos desde la hora en la que se suponía que los chicos vendrían y aún no llegaba el tren. Estaba impaciente por verlos, por sentir que todo es como hace un par de meses. Les necesito para sentirme, por lo menos, un poco en casa.

Estaba realmente nervioso por verles, ya habían pasado bastantes meses desde la última vez que nos vimos. ¿Habrían cambiado?. No tenía ni idea si vería a mis amigos de siempre, al castaño de pelo largo y ojos verdes y al rubio bajito con lentes gruesos, o a dos chicos diferentes, ¿más mayores, tal vez?.

Que emoción, ambos vendrían a visitarme... o bueno, ahora a ambos. Les había contado mucho sobre Nick y ahora que pasamos más tiempo juntos pues no tenía caso seguir escondiendo las cosas. Nicholas y yo empezamos a salir.

- ¿Cómo son tus amigos? - Preguntó al verme buscando incansablemente entre la multitud de gente que teníamos de frente.

- Bueno, Georg es más bajo que yo, tiene el pelo castaño y largo. Sus ojos son verdes y su piel muy blanca y Gustav es aún más bajo que Georg, es rubio y lleva lentes de marco grueso, él es más bronceado, bueno... en comparación mía lo es.

Estiraba mi cuello por todo lo alto que podía llegar a ver, que por mi altura era bastante, para encontrarlos, o por lo menos, ver si venían en el tren que acababa de llegar. La gente seguía bajando, pero no había señales de mis amigos.

- No los veo, Nick. ¿Habrá pasado algo?. Ya deberían estar aquí... - Dije un tanto preocupado. No podía dejar de pensar en que algo les había sucedido.

- Tranquilo, Billy...

- No me llames así, por favor, Nick - No me gustaba para nada que me llamara Billy, me hacía recordar mucho mi pasado y por mi pasado me refería a Tom más precisamente.

- Lo siento, Bill. Vale, te decía que a veces los trenes se retrasan. ¿Por qué no intentas llamarles? - Sugirió.

- Vale - Me llevé el móvil a la oreja. Varios tonos, pero sin respuesta alguna.

- ¿Nada?.

- Nada.

Nicholas me rodeó en un abrazo tierno. Apoyé mi cabeza en su hombro y colocó sus brazos en mis caderas. Aún no éramos muy cariñosos el uno con el otro, así que este gesto me tomó por sorpresa, pero si de verdad quería olvidarme de Tom debía hacer mi mayor esfuerzo por pretender que mi ex novio no existía y si él no existía yo no tendría que poner resistencia en empezar algo con Nick. Era atractivo, amable, cariñoso y bueno, muy bueno. Yo sería muy estúpido si dejara ir a un chico como este. Aunque mi cabeza estaba 100% convencida de esto, mi corazón no se acelera cada vez que Nick me toca, mi piel no reacciona a su aliento como solía hacer con Tom, mi cuerpo no encajaba tan perfectamente con él como lo hacía con mi Tom.

Nick no es Tom y me debo acostumbrar.

- ¿BILL? - Al escuchar mi nombre me deshice del abrazo de Nick y rápidamente empecé a seguir la voz de Georg.

Ahí estaban ambos, viéndome con los ojos brillantes, casi tan llenos de pequeñas lágrimas como los míos. Corrí a su encuentro y me dejé ir sobre ellos.

- Pero Bill, estás en forma, ya no eres un crío flacucho - Dijo Georg con una pequeña risa saliendo de sus labios.

- Y tú estás más enano - Respondí sarcástico.

- ¡Gus, estás más rubio! - Parecía que mi amigo se había teñido el cabello de un rubio platinado que le quedaba excelentemente bien.

Nos abrazamos los tres, tenía a Gus y a Georg a cada lado de mi, recordando todo lo vivido estos últimos meses.