Capítulo 17

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Bill's Pov

Habíamos pasado de estar recluidos en una casa de cuatro paredes, que aunque era pequeña, era mucho más grande que mi departamento, pero esta habitación de hospital era diminuta comparada con todos los lugares en los que hemos vivido Tom y yo. Él pues no lo notaba, estaba completamente dormido, pero yo ya no podía más. No me despegaba de Tom ni dos segundos. No quería que despertara y no me encontrara a su lado. ¿Cuándo pensaba reaccionar?. Ni el Doctor lo sabía, pero me había dado un pronóstico excelente. Tom era alguien jóven, un chico que ha vivido la mayor parte de su vida en muy buen estado físico, mental pues no tanto, pero según lo que había dicho el Doctor, su caso es completamente una reacción física.

- Los síntomas son variados. Es posible que se haya sentido constantemente cansado, como si no tuviera energía para afrontar el día. Incluso Tom pudo experimentar una actitud negativa o de desconexión hacia todo lo que lo rodea, algo así como si sintiera que ya no le importa tanto lo que hace, los demás, hasta podría decir que, ya no siente cierto interés por él mismo, por cuidarse o mantenerse medianamente sano.

- Sí, pude percibir algo así estos últimos días - Agregué a la explicación del médico que estaba tratando a Tom en el hospital.

- A eso súmale el diagnóstico psiquiátrico del que me has hablado, más todos los problemas que han tenido últimamente, era solo cuestión de tiempo para que el chaval se desconectara de la realidad.

- No entiendo, Doctor. ¿Esto es algo físico o mental?. Tom ya se ha, como usted dice, desconectado de la realidad, pero siempre había estado consciente, despierto.

- Es completamente físico. Cuando hablamos de casos como este, es esencial entender cómo afecta a su cerebro. Esta desconexión es una respuesta al estrés prolongado, y esto tiene un impacto significativo en varias áreas del cerebro. En el caso de Tom, te podría decir que, en base a mi basta experiencia en este tema y mi poco conocimiento sobre la parte psiquiátrica, la mezcla de estrés y depresión ha sido letal para él.

- ¿Él puede morir, Doctor? - Pregunté lleno de miedo e incertidumbre.

- No, no, estoy muy seguro de que eso no puede ocurrir. Como te he comentado, su pronóstico es muy bueno, está respondiendo de muy buena manera al tratamiento. Es cuestión de esperar a que su cerebro procese toda la información y decida despertar.

- Es que no entiendo lo que le sucede - El chico de 19 años, asustadizo y vulnerable salió a relucir. Me sentía tan pequeño y tan ignorante al no entender nada de lo que me decían que no sabía a quién acudir por un poco de apoyo. Este tipo de cosas las saben sobrellevar los adultos. Sí, yo era uno, pero me refería a un adulto más mayor que yo. Lo único que yo quería ahora era acurrucarme al lado de Tom y llorar abrazado a él. Si esto hubiera sido algo psicológico tal vez hubiera podido hacerle frente, pero en temas físicos, soy un completo ignorante.

- Déjame explicártelo con términos más fáciles. El cerebro de Tom está cansado, tan cansado que ha decidido tomar un descanso. Se ha desconectado de sus funciones conscientes. Por eso él duerme. Todo su cuerpo y su cerebro necesita recargarse. En su caso, el estrés, la depresión y la tristeza, sumándole la desnutrición en la que estaba cayendo, lo hicieron colapsar. En otro momento de su vida no le ha sucedido esto, pues su cuerpo estaba en buen estado y podía soportar el cansancio y el estrés, pero ahora, en ese estado crítico en el que se encontraba, su cerebro no encontró la fuerza física que necesitaba y ha puesto todo a dormir, para recuperarse y sanar.

- Vale, creo que ahora lo entiendo. ¿Cuánto tiempo han tardado otros pacientes en recuperarse de esto?.

- Él es el primero aquí en Múnich.

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