PERSEA FORKS © - El Campamento Mestizo

PERSEA FORKS - Luke no es así

— No sabía que también fuiste elegido como portador de un escudo —aunque para Lyra portar el escudo no era mayor honor a decir verdad, no presenciaba para ella un momento importante.

Lyra se dio cuenta de lo callado que estaba Jasper, que por el momento no había hecho más que mirar al horizonte del pequeño lago al que ambos habían ido, puesto que Lyra esperaba encontrar ahí a Kenia, para verla practicar el ritual.

— ¿Jasper? —

Jasper la había estado escuchando perfectamente todo este tiempo, no la había desatendido y había escuchado con mucha atención, pero su mente también divagaba en lo que Luke y Desa habían hablado.

Además que Percy estaba en la vista de Luke, puesto que Percy también había sido nombrado como un portador de escudo sagrado.

Entonces Lyra le dio un codazo a Jasper exigiendo que le mirará y lo hizo, con el ceño fruncido— ¿Qué quieres pececito? —

— ¿estás bien? —

Jasper bufó, no podía evitar no pensar en eso— antes de que llegarás a la casa de Desa —Jasper sabía que sería importante para Lyra y más si se trataba de Percy— escuche a Wayans hablar con esa mujer, sobre Percy —Lyra frunció el ceño— y sobre algo contra Marte, Lyra, no sé qué tanto sepas de tu amigo, pero debemos tener cuidado —

— ¿Cómo estás seguro? ¿y por qué meterían a Percy en relación con Marte? —

— No lo sé, Wayans dijo que el hijo de Neptuno era un gran portador del escudo —explicó Jasper a Lyra, pero ella no podía evitar pensar en que Luke no podría estar tramando algo— y también hablaron de genocidio —Lyra se alarmó— no sé que tanto estén planeando pero... —y entonces Lyra se desatendió y se alejó de Jasper horrorizado.

— No, Luke jamás planearía algo en contra de Percy —Lyra estaba convencida de que su amigo no era un genocida y tampoco un homicida— y menos sería un genocida, es imposible que... —

— No sé qué tanto confíes en tu amiguito, pescadito, pero... —

— No, Jasper, conozco a Luke —

— Y yo sé lo que escuche —

Ambos se miraron con ferocidad, pero Jasper sintió la salvajidad de la sacudida de su corazón, cuando vio el destello de preocupación en la mirada de Lyra y ella habló— él no sería capaz de dañar a Percy, ni tampoco a mí —finalizó con un hilo en la garganta, mientras el viento arremetía con su cabello.

Y Jasper sintió como su corazón se encogía— Lyra, eso no lo sabes —masculló apenas— y si ese idiota hace algo, no quiero que después te culpes —porque Jasper conocía a Lyra, tanto como para saber que ella era capaz de asumir la culpa de otros— no dejes que tus sentimientos nublen tu juicio —

Lyra levantó su mirada— ¿mis sentimientos? —y hubo un silencio, volvió a hablar— ¿tanto se me nota? —

Para Jasper eso fue un balde de agua fría, el haber confirmado lo que no quería confirmar— yo solo —suspiró y cerró sus ojos antes de tomar el puente de su nariz— te protegeré, a Percy y a ti, debo decirle a Percy y los demás, esto no es seguro —y dicho ello, Jasper paso por el lado de Lyra y se fue de ahí, dejándola sola en medio del lago.

Lyra no sabía que había roto algo dentro de Jasper, más bien empezaba a tener dudas de lo que le había contado, Jasper no inventaba historias, mucho menos en contra de alguien, no le servía hacer ese tipo de cosas, entonces, ¿por qué hacerlo ahora, con qué propósito?

— Deberías creerle —y entonces apareció Kenia, tras los arbustos de Lyra, con un manto en su mano y una extraña marca en su frente.

— Pero Luke jamás haría nada en contra mía —apeló Lyra— es mi amigo —