—Te dolerá el estómago —comentó Hyerin mientras abría las cortinas de la habitación, dejando que la luz del amanecer llenara el espacio.
Jeongin, siempre atento, había hecho la cama mientras ella tomaba una ducha. Además, se había encargado de pedir el desayuno, aunque claramente solo pensó en comer una hamburguesa y papas. Sobre la cama, había colocado una bandeja de madera con un festín de McDonald's, y el televisor ya estaba encendido, reproduciendo la serie que habían planeado ver antes de quedarse dormidos la noche anterior.
Hyerin se sentó a su lado, acomodándose a su lado.
—Claro que no —replicó él con una sonrisa confiada.
—¿McDonald's a las ocho de la mañana? —Hyerin lo miró, arqueando una ceja.
—Así desayunamos los hombres fuertes, cariño.
—Bebés, querrás decir —murmuró ella, divertida.
Jeongin frunció el ceño, claramente indignado, mientras Hyerin soltaba una suave carcajada.
—Te vas a arrepentir —le advirtió, señalándola con una papa frita antes de llevársela a la boca.
—Uy, qué miedo —respondió ella, sarcástica, haciendo un gesto exagerado de temor antes de tomar su propio plato, una opción mucho más saludable: frutas frescas, dispuestas en un pequeño tazón.
Hyerin suspiró, resignada a la elección de su desayuno, pero agradecida por el gesto de Jeongin. Encendió el televisor, buscando el primer episodio de la serie que habían dejado pendiente. Mientras tanto, Jeongin disfrutaba su comida con entusiasmo, como si no hubiera nada mejor que un desayuno grasoso a primera hora del día.
—¿Por qué me miras así? —preguntó Jeongin, notando la mirada divertida de Hyerin.
—Solo estoy esperando el momento en que te arrepientas o te duela el estómago —respondió ella, llevándose una rodaja de manzana a los labios.
Jeongin soltó una risa suave, sacudiendo la cabeza.
—Eso no va a pasar, ya verás —dijo con seguridad, aunque la mirada escéptica de Hyerin dejaba claro que no estaba convencida.
Los dos se quedaron en silencio por un momento, enfocados en sus respectivos desayunos mientras la serie comenzaba. Hyerin, a pesar de sus dudas sobre el McDonald's matutino, se sentía contenta. La compañía de Jeongin, con su energía despreocupada y la distraía de todo el desastre de su mente y claro el dolor insistente por su periodo.
—El lunes iré a Busan por dos semanas —anunció Jeongin, su mirada fija en Hyerin mientras la serie seguía reproduciéndose en segundo plano.
—Ujum... ¿Tomarás el tren? —respondió ella distraída, sin apartar la vista de la pantalla.
ESTÁS LEYENDO
𝘾𝘼𝙉'𝙏 𝙎𝙏𝙊𝙋, 𝐞𝐢𝐭𝐡𝐞𝐫 𝐰𝐚𝐲 𝐢'𝐦 𝐠𝐨𝐨𝐝 𝙔𝘼𝙉𝙂 𝙅𝙀𝙊𝙉𝙂𝙄𝙉
Fanfic𝘌𝘯 𝘥𝘰𝘯𝘥𝘦 𝘑𝘦𝘰𝘯𝘨𝘪𝘯 𝘯𝘰 𝘱𝘶𝘦𝘥𝘦 𝘥𝘦𝘫𝘢𝘳 𝘥𝘦 𝘢𝘮𝘢𝘳 𝘢 𝘏𝘺𝘦𝘳𝘪𝘯 ❝𝙊𝙝 𝙡𝙚𝙩 𝙢𝙚 𝙊𝙝 𝙡𝙚𝙩 𝙢𝙚 𝙊𝙝 𝙡𝙚𝙩 𝙢𝙚 𝙡𝙤𝙫𝙚 𝙮𝙤𝙪 𝙊𝙝 𝙊𝙝 𝙄 𝙘𝙖𝙣'𝙩 𝙨𝙩𝙤𝙥 𝙛𝙖𝙡𝙡𝙞𝙣𝙜 𝙞𝙣 𝙡𝙤𝙫𝙚 𝙬𝙞𝙩𝙝 𝙮𝙤𝙪❞ 🎧 𝚆𝚑𝚒𝚝𝚎 �...