Capítulo 107: El final del Awqanaku Tupaq

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Nota del narrador: "El miniarco del llano" nos está dejando revelaciones interesantes, nos esta dejando revelaciones bomba, así que vamos a continuar con esta historia y veamos de que mas nos enteramos

Después que Mirabel y Aleyda hicieron la tregua, todos convinieron que había que atrapar a las Rengifo, las cuales eran las únicas que faltaban del desafío Awqanaku Tupaq, para que de esta forma, oficialmente se reconociera que Aleyda era la unica que podia seguir intentando apoderarse del milagro de los Madrigal. Por esta razon, Mirabel, sus hermanas, su papa, Samuel, Saturno, Nepomuceno y Otilio se unieron para atrapar a aquellas escurridizas brujas menores. Es aquí donde nos preguntamos en donde se encontraban ellas todo este tiempo, ya que todas las brujas menores habían sobrevolado el pueblo, para intentar atrapar a Mirabel, pero de las Rengifo no se veía ni el rastro. Por lo tanto, traslademonos a las afueras del pueblo, más exactamente donde hay vegetación, en donde está el bosque que rodea al pueblo, lo que comúnmente en Colombia se llama "Monte", ya que justamente las Rengifo pensaban que Mirabel al tener una hermana cloroquinética, esta de alguna forma se las había ingeniado para esconderla allí. Como se habían dado cuenta que allí Mirabel no estaba, se fueron hacia aquellas montañas que eran rocosas, desérticas, ya que al tener una hermana herculiana, pensaron, debía estar oculta en alguna cueva, cubierta por alguna roca. Como adivinaremos, tardaron bastante en destruir toda roca sospechosa de ocultar la entrada a alguna cueva, antes de darse cuenta que Mirabel tampoco estaba allí

Jacinta: Esto es increíble, ya llevamos bastante tiempo buscando a esa niña y al parecer no está por estos lados

Jazmin: Es lo más curioso, ¿Por qué sus hermanas no la trajeron por el "monte" o por estas montañas rocosas, sendo que son los terrenos que son más fuertes?, es algo curioso cuanto menos

Josefa: Bueno, a lo mejor se anticiparon a nosotras, es decir como sabían que nosotras vendríamos adonde supuestamente ellas iban a estar, entonces ellas hicieron todo lo contrario y se quedaron en el pueblo

Jacinta: Bien, entonces vamos al pueblo y busquemosla allá

De esta forma, las trillizas Rengifo se dirigieron nuevamente a Aguazul, con el objetivo de buscar a Mirabel, sin saber que esta, sus hermanas, su padre y compañía, ya habían dispuesto un modo de atrapar a aquellas escurridizas brujas. Lo mas curioso, es que por primera vez Sebastian sentía que no tendría que intervenir para resolver el problema de brujas que se presentaba en el pueblo, ya que con lo que había visto, se había dado cuenta que una niña sin ningún atributo especial, mas que su propia inteligencia y astucia, había logrado atrapar y encerrar a un grupo de brujas menores. Sin embargo, sabia que al siguiente dia, tendria que tener una charla seria, tanto con los Madrigal, como con Samuel, como con su prima, por lo cual pensaba organizar una reunion en donde pudiese escuchar la versión de la historia de cada uno y ver como podía suavizar lo más posible dichas relaciones. Sebastian sabía que ambas partes tenían la razón, por un lado, los Madrigal no iban a permitir que Aleyda les quitara aquella magia que les fue otorgada, magia que ellos consideraban, era el legado de Pedro Madrigal, pero por otro lado, sabía lo terribles que eran Yoruja y Huitaca, sabían lo infames que habían sido y siempre seran, ya que de por si, eran la misma representación del demonio en las culturas indígenas, por lo cual comprendía a la perfección el desespero de su prima de acabar con ellos cuanto antes y formar una nueva Hermandad que permitiese que las brujas pudiesen convivir sin problema con los chamanes como el, así como con humanos mágicos, seres mágicos y seres mitológicos, a excepción de los malvados, que como bien sabemos son la Muelona, la Tunda, Patetarro, los duendes, la Mancarita y otros que irán apareciendo en la presente obra, a medida que avancen los capítulos. Así pues, Aleyda se fue a tomar una gaseosa Colombiana (marca existente desde 1921) con casabe llanero, mientras Sebastián observaba a lo lejos la trampa que estaban colocando para aquellas revoltosas Rengifo, esperando que apenas estas fuesen atrapadas, pudiesen conducirlas a la estación, en donde les daría un severo escarmiento como había hecho en otras ocasiones. Una vez estuvo lista la trampa, Mirabel se colocó en un lugar visible, ya que sabía que apenas la vieran, las hermanas Rengifo se lanzarían a atraparla, pero como nuestra guardiana Madrigal ya conocía como funcionaba aquello del rayo tractor, tenía un plan para hacerlas bajar y posteriormente, atraparlas. Dicho y hecho, las trillizas Rengifo aparecieron sobrevolando el cielo del pueblo, por lo cual Mirabel llamo la atención de estas

Encanto, una serie de colombianos escrita por un colombianoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora