Capítulo 91: Revelaciones (Parte 2)

11 0 0
                                    

Los Madrigal y el pueblo seguían avanzando pacientemente en dirección hacia el castillo de la bruja, sin saber que esta ya sabia que se habían enterado de su relación con la Hermandad

Bruno: No puedo creer que mis visiones no mostraran en realidad las intenciones de Aleyda, ¿Cómo no pude haberlo visto antes?

Abuela: Porque tus visiones solo muestran el futuro, no las intenciones de los demás

Bruno: Si, pero viendo el futuro mama, con el tiempo uno llega a saber las intenciones de las personas, eso es algo que tarde que temprano sale a la luz

Abuela: Es verdad, pero recuerda que tus visiones solo muestran algo específico que quieras ver, no todas las cosas en general

Bruno: Sin embargo, hay algo que no entiendo, si Aleyda quiere destruir el milagro, ¿Por qué la Gitana Encantada dijo que se haría una aliada con el tiempo?

Pepa: Es verdad, no me acordaba de eso, hace ya algún tiempo que Gitana vino a profetizarnos cosas

Abuela: (Pensativa) Es cierto, ella nos dijo que con el tiempo Aleyda se volvería una aliada de nosotros y nos enseñaría a manejar mejor nuestros dones; en ese caso, puede que exista la posibilidad que ella sepa algo del milagro que nosotros ignoremos

Julieta: Aun así, ¿Por qué apoderarse del milagro?, ¿Qué ganaría con ello?

Abuela: No tengo idea, pero debemos estar preparados para lo que sea que esté planeando

Volvemos hacia el castillo de la bruja, en donde esta ya ha logrado calmarse, si bien esta pensativa y perdida en sus recuerdos, ya que como recordaremos, en el capítulo 34, Aleyda le había dicho a tres siluetas "No tengo tiempo para tus estúpidas bromas, ¡Largo de aquí!", "Tú y yo cortamos relaciones desde hace rato, ¿Para que viniste acá?", y "No me interesa ningun consejo que tengas que darme", que justamente eran Tunjo, Madremonte y Mohan, por lo cual la continuación de aquellas conversaciones, eran las siguientes, empezando con Tunjo

Aleyda: No tengo tiempo para tus estúpidas bromas, ¡Largo de aquí!

Tunjo: ¡¿Así le hablas a tu hermano mayor?!, ¡¿El que te cuido cuando eras una niña?!

Aleyda: ¡Por quincuagésima vez!, ¡Es ilógico que un muñeco que creado para asustar sea incapaz de cuidar a una niña!

Tunjo: ¡Pues si lo hice!, ¡Que te hayan borrado la memoria es otra cosa!

Aleyda: ¡No empieces con eso, que soy sensible con ese tema!

Tunjo: (Calmandose) Bien, ojala que alguno de esos golpes que te den los Madrigal y el pueblo te devuelvan la memoria

Tunjo se marcha, dejando a Aleyda enojada, pasamos a la conversación que hubo entre Madremonte y Aleyda

Aleyda: Tu y yo cortamos relaciones desde hace rato, ¿Para que viniste acá?

Madremonte: Porque lo quieras o no, sigues siendo mi hija, asi ya no quieras saber mas de mi

Aleyda: ¿Ah si?, ¿Y porque tus hijos e hijas cloroquinéticos siempre fueron mas importantes que yo?

Madremonte: Sabes que eso no es verdad, yo a todos los que están y estuvieron a mi cargo quiero por igual, que no lo recuerdes por lo que te hicieron, es otra cosa

Aleyda: ¡Sabes que ese tema me molesta!

Madremonte: Pues que te moleste todo lo que quieras, no me rendiré hasta que vuelvas a recordar todos los buenos momentos que pasamos, ahora tomate estos remedios contra el dolor que prepare para ti

Aleyda: (Toma un suspiro) Bien mama, me los tomaré (Se dirige al amo de llaves) amo de llaves, dame esos remedios

Amo de llaves: Como ordene mi señora

Encanto, una serie de colombianos escrita por un colombianoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora