UNA DE ELLOS en edición

CAPÍTULO 39: Encerrados

ALLY:

-¡Allyson!-me grita Theresa al otro lado del teléfono.

-¿Theresa? ¿Estás bien? Tranquilízate. ¿Qué ocurre?

-Es... ¡Thomas!-me grita, sollozando.

-¿Qué?-musito.

-Ven a St. Peter's.

Cuelgo el teléfono en cuanto lo dice. No. No por favor. Thomas está bien. Thomas tiene que estar bien. Decido llamar a toda la pandilla para que venga. Necesito a alguien.

Empiezo por Riley y Brit, pero ya se han ido de la ciudad. Me piden que las informe de todo y me desean suerte. La siguiente a la que llamo es a Haily, pero Ethan y ella, están pasando el fin de semana en Barbados, así que no pueden venir, y me piden que haga lo mismo. Luego llamo a Sophie.

-¿Ally?

-Sophie...-no aguanto más sin llorar.- Thomas... está en el hospital... mi... me han dicho...

-¿Qué ha pasado?

-Jason. Jason, Thomas, David y Marcos. Todos iban en el coche.

-Ya estoy de camino a St. Peter's. ¿Tú estás bien?

-No...

-Van a estar bien. Tú tranquilízate, ¿vale?

-Vale...-suspiro.

Por el camino en coche, llamo a Molly, que me dice que ya está de camino también. Cuando llegamos, me encuentro con Abry. Voy corriendo hacia ella y nos fundimos en un largo abrazo. Joder, he echado tanto de menos a mi mejor amiga...

-¿Cómo están?-susurra.

-No lo sé. ¿Qué ha pasado?

-No sé. Llamé a Marcos, para despedirme, todo parecía ir bien. Le...-se le quiebra la voz.-Le dije que le quería pero el que me correspondió fue David. De repente, había muchísimo ruido, varios gritos, un golpe... y se cortó la llamada.

-Dios...

-Todavía estamos esperando el informe médico de todos. Nos han dicho que Jason está bastante bien, es el único consciente.

-¡Donde están!-grita Sophie al entrar por la puerta de la mano de Molly.

-Estamos esperando noticias.-susurro.

Entonces un doctor entra en la sala de espera.

-¿Jason Greene. Todas nos levantamos y vamos a su encuentro.

-Nosotras.-digo por todas.

-Hola. Soy el Dr. Miller. –Todas asentimos.- Jason está consciente, está estable. No ha sido nada grave. Tiene unas cuantas magulladuras, pero está bien. Estará dos noches en observación, pero luego le daremos el alta.

-Gracias a Dios...-suspira Sophie. Lo siento por Jason, pero no siento ni el más mínimo ápice de alivio, no puedo evitar pensar que ese solo es el mejor de los casos. Thomas está peor. Thomas puede estar muerto...

-Pueden ir a verle si quieren.-nos informa el doctor.

Nos acompaña a una sala al final del pasillo. Jason está tirado en la cama, con varias vendas alrededor de su cuerpo. Tiene bastante buena pinta, teniendo en cuenta que acaba de tener un accidente de coche.

Sophie, que antes estaba detrás de todas nosotras, nos empuja para abrirse paso e ir corriendo al encuentro de Jason. Se tira encima de él y comienza a sollozar en su pecho. Las demás, admiramos la tierna escena desde el marco de la puerta.