Luffy se convirtió en el Rey de los Piratas. Sí, el primer paso hacia su verdadero objetivo en la vida, pero le costó todo lo que era valioso para él.
Esa fue la razón por la que saltó al mar, pero en cambio, despertó en el cielo.
El cielo donde sal...
"¡Apuesto a que estás celebrando por dentro Garp!" Le grité a mi mejor amigo, Garp.
Para ser honesto, no me importa nada un pirata, pero están ejecutando a este hombre por las razones equivocadas, y él era el nieto de mi mejor amigo.
-Desde que tu nieto invadió Marineford, ¡todos nuestros planes han sido en vano! -Apreté los dientes, pensando en qué decirles a los superiores.
-Dale el trabajo a uno de los almirantes. ¡Apuesto a que se pelearán por él! -se rió Garp con su sonrisa molesta de siempre.
-Sabes qué, tu estúpida boca me dio una gran idea. Voy a pasarle mi puesto al almirante Aokiji. -
Le arrebaté sus galletas de arroz y me las comí todas, lo que hizo que me mirara con la boca abierta.
"¡Oye, eso es mío!"
"Aun así, ¿por qué Crocodile ayudaría al otro bando? ¿No vino aquí para matar a Barbablanca?" Lo pensé detenidamente mientras recordaba lo que había sucedido antes.-¡Prepárense, es hora de ejecutar a Ace! -grité mientras veía a los piratas entrar en el muro en pánico.
-¡Sí, señor! -saludaron los verdugos mientras apuntaban sus espadas al cuello de Ace.
Procedieron a hacerlo, hasta que Crocodile lanza dos cuchillas de arena, tirándolos fuera de la plataforma.
"Conociéndolo, lo hizo porque quería seguir adelante de una vez". Suena como él.
"A veces nos señalas algo obvio, ¿por qué no hacerlo todos los días?"
-Hablando de cosas obvias, ¿qué crees que sea esa aura rosa? -Me señaló otro misterio.
-No lo sé, pero probablemente sea un oponente fuerte al que le gusta presumir. Podría ser Buggy. -Me senté al lado de Ace.
-No nos preocupemos por eso, ¡deberíamos preocuparnos por si nuestros planes no funcionan! ¡Es culpa de tu maldita familia! -Me crucé de brazos.
"¡JAJAJAJAJA! Espera, ¿dónde están mis galletas?" Miró a los costados e incluso le preguntó a Ace, a lo que este solo negó con la cabeza.
"Me lo comí todo, ¿recuerdas? De todos modos, lo haré rápido después de que llegue el nuevo grupo de verdugos". Llamé al almirante Kizaru.
"Si puedes", dijo con cierta presunción."La gente más peligrosa aquí es Barbablanca y Buggy. Tengo que deshacerme de ellos. También pide un nuevo juego de galletas de arroz para los dos.
-No subestimes a mi nieto, Sengoku. Estoy seguro de que salvará a Ace. -Sonrió mientras comía galletas de arroz.
"Ahora mismo me estoy deshaciendo de las amenazas, espera a que le llegue el turno a tu nieto", mastiqué mientras hablaba.
"Sengoku-san, ¿me llamaste?" Kizaru llegó.
"Ejecuta a Buggy. Es la segunda amenaza más peligrosa en este momento". "Entendido, Sengoku-san". Se alejó volando aburrido a la velocidad de la luz.
-Antes de eso, ¿no crees que deberías preocuparte por eso? -Garp señaló una escena que me sorprendió.
El antiguo suelo de hielo ya estaba roto y lleno de barcos, y Jr. Oars estaba lanzando barcos piratas uno por uno como si fuera una pelota de fútbol. "¿Cómo sucedió esto? ¡Llama a Akainu!" Llamé a uno de los marines de reserva y les ordenó que fueran a buscar a Akainu.
"¡Entendido, señor!" Corrió y fue a buscar a Akainu, que estaba allí de pie mirando fijamente algo.
"¿Sengoku-san?"
"¿Qué pasó con tu plan? ¿Por qué no se llevó a cabo todavía?", lo regañé, en lo que él respondió con una buena razón.
"¡Esto no habría sucedido si no hubieran sabido de antemano sobre el muro!" Suspiré.
-¡Esos idiotas! ¡Entonces ocúpense de Barbablanca ahora mismo! -Se alejó caminando hacia Barbablanca.
"Algo anda mal entre bastidores. Puedo sentirlo". _________________________________________......................................................................
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