🐺VEINTISIETE: HAGÁMOSLO.🐺

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Jimin consiguió volver en sí unos minutos después de aquel episodio que vaticinaba que se aproximaba su próximo calor, su lobo pareció calmarse y sus amigos lo ayudaron a regresar a casa sano y salvo, no pudieron explicaciones, simplemente lo tranquilizaron y lo mantuvieron seguro.

En cambio, en el interior de Jeon Jungkook algo cambió. Cuando regresó a casa aún lo sentía, una especie de inquietud, un algo... Debió darse cuenta en cuanto su nariz captó a mucha distancia los melocotones dulces, cuando su vista encontró rápidamente al omega.

Su lobo dormido, escondido e ignorado había despertado.

Y lo había hecho porque otro lobo lo había llamado.

El beta despeinada sus cabellos y caminaba en su reducida habitación desesperado. Él no quería eso, vivía bien ignorando esa parte animal que estaba escondida, al fin y al cabo, su rango era tan inferior que de nada servía, más que para tener trabajos peor remunerados y ser ninguneado. Y hacía años que los de ciudad no se transformaban, había terminado siendo una habilidad perdida. Entonces, ¿para qué quería a su lobo despierto?

Eran las once de la noche, la ducha no lo había calmado, su animal estaba ansioso y alerta, un omega lo había llamado, lo reclamaba y quería obedecer, pero su parte humana y racional se negaba.

Fue a buscar su teléfono móvil y buscó con rapidez información sobre si existían inhibidores para betas, si era así debía marchar cuanto antes en busca de una farmacia de guardia y hacerse con ellos antes de que su lobo lo volviera loco.

Entraba y salía de todas las páginas, ninguna le parecía de fiar, pero había un foro donde algunos betas hablaban sobre experiencias que quizá pudieran servirle. Estaba concentrado en un hilo donde alguien preguntaba si alguna vez habían sentido que estaban con el celo y tenía varias respuestas, cuando tocaron insistentemente su puerta.

Se sobresaltó y nada más girarse lo olió. Melocotones en almíbar, Park Jimin, probablemente en celo, estaba en su puerta.

Dejó el teléfono sobre la mesita, se levantó de la banqueta y caminó con cautela, puso la mano en el pomo frío y su lobo amortiguado se removió.

Estaba asustado.

- Jungkook, sé que estás ahí, necesito que hablemos, por favor.

La voz de Jimin al otro lado de la madera parecía la de siempre, salvo por un toque desesperado en ella, así que el beta giró el pomo y la mano del omega en alto, indicando que estaba a punto de llamar otra vez, bajó.

Los ojos de Park Jimin desvelaron ligeramente al verlo, pero volvieron a su color al instante, Jungkook tragó saliva y se hizo a un lado para dejarlo pasar. El más bajo se descalzó sin si quiera agacharse, usando los mismos pies y entró al pequeño lugar. La puerta se cerró.

Mantuvieron las distancias, el pelinegro se giró para mirarlo, claramente olía a inminente celo y vestía ropa muy fresca para la temporada, pero sus ojos se mantenían oscuros y su semblante denotaba preocupación.

- Mira, puede que esto te suene muy raro y entiendo que luego quieras que me marche de tu casa, pero necesito al menos hablarlo y ser sincero.

El castaño asiente y se acerca algo más, como dándole a entender que tiene vía libre para hablar. Su lobo quiere salir, lo nota, tira desde adentro para que acorte la distancia.

- Puede que te suene raro, pero a mi lobo le gustas. Gustar es poco, diría que le encantas. - Dice el pelinegro de forma apresurada, moviendo las manos mientras explica.- No me malinterpretes, no es raro porque seas tú, simplemente no es común porque se supone que a los omegas le atraen los alfas, ¿comprendes?

- Lo sé.

Jungkook no quería sonar cortante, pero lo ha hecho, porque tiene cierto orgullo y aunque es conocedor de su posición igual le afecta, principalmente por que es ese omega quien se lo está recalcando.

Jimin nota cómo el menor aparta la mirada, se mantiene serio y el tono en el que contestó y entiende que puede que aunque lo intente explicar puede sonar terriblemente mal, pero necesita ser sincero y la verdad es que no entiende aún que le pasa a su lobo con ese chico, pero no sabe si es una atracción temporal y por eso lo tiene a él mismo confundido.

Necesita ser claro.

- Tu camisa, ¿recuerdas tu camisa? Bueno, resulta que me puse en celo, tu camisa estaba entre mis cosas, a mi lobo le gustó el olor de tu perfume y...- El omega enrojeció, era incapaz de terminar la frase, pero por la expresión que puso el beta supo que lo había entendido.- El caso es que no debería ponerme con el celo de nuevo, no me toca, pero... Creo que el habernos acercado está alterando a mi lobo y...

Jungkook levanta una mano para hacer callar al contrario, las palabras de sus amigos flotan en su cabeza, el lobo le araña por dentro, jamás había sentido eso y de repente cree que necesita ir al grano para que todas emociones y pensamientos dejen de alborotarlo.

- Tu lobo quiere aparearse con el mío, bueno, no aparearse porque no soy alfa.- Se corrige a si mismo de inmediato, y aunque no suele usar expresiones porque no le gustan la usa para ser claro y directo:- Quieres follar conmigo.

Si Park Jimin estaba rojo antes ahora su tono ha aumentado peligrosamente, sus ojos cambian de color unos segundos, la piel comienza a humedecer. Cree que ha sido una pésima idea y comienza a pensar en lo que debe decir ahora para poder marcharse de forma digna.

- Hagámoslo.

- ¿Qué?

- Según dices tu lobo está encaprichado conmigo, estás entrando en celo de nuevo, así que hagámoslo, te ayudaré con tu celo.

Jimin está estático, su corazón va a mil y el calor aumenta a medida que omega parece emocionarse cuando el castaño da dos pasos más hacia él, ahora si ambos estiran el brazo son capaces de tocarse.

Jungkook parece muy seguro de sí mismo, su animal está bien despierto y en su mente no deja más espacio para otra cosa que no sea: "Vívelo."

Quizá suena a trato, incluso un poco a un simple favor y ellos terminan acercándose de forma lenta, pero en cuanto sus cuerpos se rozan, los ojos conectan y sus labios se unen no importa nada más.

🐺Two is better than one🐺 (Kookmin)-OMEGAVERSE.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora