🐺Two is better than one🐺 (Kookmin)-OMEGAVERSE.

🐺CUARENTA Y NUEVE: "Two is better than one".🐺

Algunos cabellos se mezclaban entre sí, haciendo una bonita combinación entre el azabache y el color chocolate. Jimin sostenía en sus manos alzadas una goma que usaba para poder cerrar el armario, cuya puerta se abría constantemente porque estaba vencida. Jungkook mantenía las suyas sobre el estómago. Los dos mirando al techo con sus cabezas juntas, tumbados sobre la cama del omega.

— Está bien. Walden. Parece un buen sitio para trabajar.

— ¿Has aceptado?

— Dije que me lo pensaría porque tenía otras ofertas que sopesar.

El pelinegro separa su cabeza de la del beta y lo mira con extrañeza, el contrario le devuelve la mirada con un leve giro de su cara, no cambia su posición.

— ¿En serio?

— No.— Ríe, el ceño fruncido del mayor se relaja.— O sea, sí tengo un par de ofertas más, pero son malísimas opciones.

— Entonces, ¿tratas de hacerte el interesante o qué?

Jungkook suspira, se pasa la lengua por los labios y mira al techo de nuevo. Hay una mancha amarillenta en una esquina de la habitación. Jimin no vuelve a la posición inicial.

— Solo debo pensármelo.

— ¿Por qué? Dices que parece un sitio agradable y tus otras ofertas no son buenas.

El beta lo mira, tiene una mueca en los labios y esa forma de mirar que le indica que no va a decir lo obvio porque ambos saben de qué está hablando. El omega resopla, se coloca sobre su estómago y mira a su novio desde arriba.

— No te lo tomes como un favor que tendrás que devolver, mi hermano la ha cagado, pero no es así, ¿vale?

— Igual siento que es como un enchufe, quizá los empleados lo sepan y no me sienta cómodo. También está el hecho de que veré a veces a tu hermano por allí...

Jimin lo entiende, pero cree que los aspectos positivos valen más que las suposiciones negativas. Deja la gomilla a un lado y apoya la barbilla sobre una de sus manos.

— Piensa en la cara de Hyun Bin cuando se entere.

Lo dice a modo de juego y Jungkook no puede evitar sonreír. Mañana debe ir a Candy's, él no fue despedido y aún no presenta su carta de renuncia.

— Sigues guardándole rencor, eh.

— ¡Pues claro! Era el alfa más cansino que me he cruzado en la vida, infiel, y para colmo se atrevió a ningunearte y ponerte el doble de trabajo.

Jungkook se ríe de la forma indignada en que habla su chico, a veces piensa que Jimin odia más a su jefe de lo que él alguna vez lo hizo.

— Pareces un hermano mayor enfadado y sobreprotector.

Jimin lo mira con desdén y le da un toque con el dedo en la frente, el beta se frota la zona entre risas.

— Eres mi novio y eres menor que yo, así que mi enojo es completamente normal. Ese viejo...

El castaño abandona su posición y lo envuelve entre sus brazos, deposita un beso en la nuca del omega y pasa una pierna por sobre la del contrario.

— Ésta tarde llamaré a Walden.— Dice cerca de la oreja del mayor, logrando hacerle cosquillas. Deposita otro beso a un lado del cuello.— Mañana le entregaré mi carta de renuncia a Hyun Bin.

— ¿Te acompaño?

— No. ¿Ves como actúas raro?

Jimin gira la cabeza para poder mirarlo de reojo, Jungkook no suelta su agarre. El pelinegro se gira, quedando de espaldas sobre el colchón y el castaño se posiciona sobre él y le peina el cabello.

— Quiero ver su cara cuando dejes la carta y cuando nos vea de la mano.

— Cuando nos casemos le llevamos una invitación de boda, ¿no te parece mejor idea?

Ambos se ríen, se besan, Jimin acaricia la espalda de Jungkook. Cierran los ojos y las ganas de hablar van disminuyendo, la decisión está tomada, así que no hay más nada que pensar. El castaño acaricia la mejilla del omega mientras lo besa, se coloca de rodillas para ponerse del todo sobre él, luego se deja caer con suavidad sobre el cuerpo contrario, sonríe entre besos cuando Jimin coloca una pierna alrededor de su cintura y tira de su cuello para estar más cerca aún.

— Me alegro que hayamos decidido quedarnos aquí, me encanta esta cama.

El omega aprovecha la posición y lo relajado que está el beta para hacer fuerza y tirarlos a los dos, quedando ahora él sobre el más joven.

— Yo echaré de menos la pequeña cama de tu cuchitril.— Vuelve a besarlo después de decirle eso mirándolo con un puchero.

— Estás demente, si era casi imposible estar los dos en esa cama.— Responde el castaño y luego besa y tira del labio inferior del mayor.

— Así nos manteníamos juntitos sin tener que buscar ninguna excusa.— Sonríe Jimin y luego muerde con algo más de fuerza el labio inferior de su novio.

Los dos se ríen sobre sus bocas, Jungkook vuelve a colocarse arriba del omega y comienza a subir la camiseta de pijama color gris que lleva mientras acaricia la piel con la punta de sus dedos, dándole un escalofrío placentero al contrario.

— Igual por aquel entonces asegurabas no querer nada serio.— Murmura el beta sobre su cuello mientras delinea sus costillas con ambas manos.

— Tú decías lo mismo.— Contraataca estirando su cuello y cerrando los ojos mientras acaricia los brazos y hombros del castaño.

Y los dos tienen razón, cada uno por un motivo distinto, cuando todo empezó no esperaban un futuro, no esperaban nada juntos. Pero ahí estaban. Acababan de comenzar a vivir juntos.

— ... Yo no pensaba que jamás fueses a mirarme...

Jimin se separa del nuevo beso en los labios empujando ligeramente al beta, se miran a los ojos, sonríe sin mostrar los dientes y le acaricia la cara.

— No te conocía. Cuando lo hice supe que ser los dos estaba mejor que ser yo solo.

— Ah, entonces solo se trata de no sentirte solo.— Contesta Jungkook fingiendo estar ofendido y hace como que se separa de su novio.

El omega se apresura a agarrarlo con más fuerza y lo tira sobre él, haciendo que se le escape un quejido por el peso del más joven sobre su estómago. Se miran de nuevo a los ojos, Jungkook sonríe divertido, Jimin está muy serio.

— Sabes que no. Te quiero, Jungkook, ya no me imagino una vida sin ti.

La mirada del beta se suaviza, la sonrisa le cambia, cierra los ojos y acaricia la nariz del omega con la suya. Meten los dedos entre el cabello del otro y vuelven a besarse, lento, profundo, con amor.

El pijama de Jimin desaparece entre las sábanas, la ropa que Jungkook cae al suelo y no tienen sexo como al principio de su relación, si no que hacen el amor y ambos son conscientes de ello. No hay secretos, no hay dudas. Son un omega y un beta que se aman, completamente seguros que su combinación es perfecta, los dos se vuelven uno.